Acerinox, con una capitalización aproximada de unos 2.650 millones de euros -por detrás del titán ArcelorMittal-, la empresa productora de acero inoxidable está pasando por un periodo no especialmente dulce principalmente por la tensión ocasionada por la guerra comercial.
La cotización ha perdido valor en los últimos tres años a consecuencia, principalmente, de las tensiones geopolíticas. Estas tensiones se han traducido en aranceles que han mermado las cifras de negocio. Actualmente, China es la única región donde la producción mundial de acero inoxidable crece. Si bien a nivel fundamental la compañía parece haber tenido un peor resultado que en 2018, la cotización ha experimentado una revalorización del 34% en el último mes, pasando de los 7,3 euros del 4 de octubre a los 9,8 euros en los que se mueve actualmente.
Esta revalorización ha estado motivada, en primer lugar, por la mejora en las expectativas comerciales derivadas de los avances en los acuerdos comerciales entre EEUU y China. En segundo lugar, por el crecimiento general del mercado de valores que impulsa también al alza a este tipo de negocios más cíclicos. En tercer lugar, por la recompra de acciones del 2% de la compañía que implica la mejora las cifras de beneficio por acción al reducir el número de acciones en circulación y, por tanto, incrementa su valor. Por último, la compra de la alemana VDM Metals por 532 millones supone un impulso en el crecimiento de la compañía, enfocado evidentemente en su sector.
A nivel técnico, la compañía se encuentra en la resistencia de los 9,8 euros por acción, un nivel clave a observar. Este nivel puede verse pulverizado por un buen comportamiento de los mercados de aquí a final de año. Básicamente toda mejora del acuerdo provocará un incremento de la cotización y viceversa. En caso de romper los 10 euros por acción, el siguiente nivel a observar será el de los 10,6 euros, puesto que se comportó como soporte durante 2017 y 2018 en varias ocasiones.
La acción se ha apoyado en la directriz alcista iniciada en 2013 .En el corto plazo, está perforando resistencias importantes, donde el titulo dibuja una estructura de máximos y mínimos crecientes. En el caso de un giro de tendencia, colocamos el stop loss en la zona de los 8,2 euros por acción.
*Álvaro Giménez-Cuenca Roig es analista de XTB