Los bancos centrales han puesto en punto muerto sus programas de retirada de estímulos ante el miedo a un frenazo demasiado brusco de la economía mundial. Un cambio de guion que deben seguir muy atentos los gestores de renta fija, como explica Ricardo Comín, director de ventas para Iberia de Vontobel.

Ante este contexto, el experto de Vontobel advierte de que “hay que tener mucho cuidado al invertir en deuda subordinada bancaria”. Explica que, aunque es una opción interesante en la actualidad, “puedes encontrar problemas de que se convierta en deuda perpetua y cuando suban los tipos de interés no merezca tanto la pena”. Por eso, su consejo es “ser muy selectivos”. Donde se coloca al margen es en deuda corporativa de compañías de automoción “debido a la reestructuración que están llevando a cabo”.

En lo que toca a la deuda soberana, Comín explica que, a pesar de la abundancia de vuelcos y pulsos políticos en Europa, “ahora mismo el mercado no sobrerreacciona a las noticias políticas porque lo ha digerido ya” y que “solamente una muy mala noticia o algo más extremo” podría traducirse en un impacto fuerte sobre los diferenciales de deuda del continente.