Por Yolanda González
De acuerdo con el Observatorio Cetelem, los españoles prevén gastar este año una media de 1.063 euros en sus vacaciones de verano, un 15% menos de lo esperado en 2017. Por suerte, existen varios trucos y herramientas para evitar que un descenso en el gasto implique un menor disfrute del descanso estival.
BUSCAR VUELOS
Lanzarse directo a comprar los billetes en las webs de las aerolíneas puede ser un error. La gran cantidad de compañías y la modificación constante de los precios hacen más aconsejable dejar esta tarea en manos de plataformas como Kayak o Trivago, que se dedican a comparar los precios tanto de vuelos como de hoteles para garantizar al usuario la mejor oferta posible.
Sin embargo, existen herramientas más completas como Skyscanner o Google Vuelos, que permiten buscar vuelos de forma flexible. Si ni las fechas ni el destino son un problema a la hora de planificar tus vacaciones, estas dos plataformas te lo ponen fácil para gastarte lo mínimo posible. Se elige el aeropuerto de salida y el destino y automáticamente se muestra un gráfico en el que comprobar cuáles son las temporadas más baratas para viajar a ese lugar. O al revés: selecciona un periodo de tiempo y encuentra qué destinos son los más asequibles en ese momento del año. Además, es posible solicitar que se notifique vía email cambios en el precio o consejos sobre el viaje.
DÓNDE DORMIR
Hay quien asocia la idea de alojarse en sitios baratos a dormir rodeado de chinches y gente extraña. Actualmente, existen plataformas que permiten descansar en un sitio de bajo coste sin renunciar a todas las comodidades. Mediante webs como Hostelworld y Agoda se pueden reservar hostales y albergues de forma online, asegurándote, además de un buen precio, de que cumplan todos los requisitos que quieres exigir. Conexión wifi, servicio de lavandería, que incluya desayuno... Puedes filtrar los diferentes establecimientos según tus necesidades y conocer el lugar más a fondo leyendo las opiniones de los huéspedes que han pasado la noche allí antes que tú.
Una de las mejores alternativas para los partidarios de un espacio propio es Airbnb, una plataforma donde se oferta el alquiler de apartamentos para uso particular o turístico. Es una buena opción si se viaja en familia y no solo porque sale más rentable que un hotel, sino porque factores como tener cocina propia hacen que se pueda ahorrar a la hora de comer.
Si no quieres gastarte ni un euro, el portal workaway.info es tu sitio. ¿No te importa trabajar como voluntario en una escuela de surf de Perú? ¿Sabrías cómo cuidar un huerto en Reino Unido? A cambio de realizar algunas tareas consigues alojamiento y manutención.
Para quienes quieran sumergirse de lleno en la experiencia local está la red social Couchsurfing, donde personas de todo el mundo ofertan de forma gratuita una habitación de sobra o incluso el sofá de su casa. No solo supone un gasto cero en alojamiento, sino también la experiencia de compartir unos días con alguien de la propia ciudad que puede enseñarte con más detalle y cariño tanto la cultura como curiosidades poco conocidas del lugar.
DÓNDE COMER
La comida es una parte muy importante de cualquier cultura y arriesgarse a probar nuevos alimentos y sabores es gratificante tanto para el estómago como el paladar. Y también para el bolsillo. Sentarse a comer donde lo hace la gente local suele ser garantía de relación calidad precio. Pero para quienes desconfían de su instinto siempre estará Tripadvisor, una web donde es posible informarse de los tipos de restaurantes que hay en la zona con valoraciones y comentarios de quienes han probado lo que allí se sirve.
QUÉ VISITAR
A la hora de conocer los monumentos y sitios de interés, los freetours con alternativas muy extendidas por las ciudades más populares. Un guía turístico se ofrece a mostrar la ciudad a un grupo de personas de forma totalmente gratuita, aunque siempre se espera que, si la experiencia ha sido buena, se de algún tipo de propina una vez finalizado el tour.
HAY QUE INFORMARSE
Lo información es poder, pero también ahorro. Detalles cómo saber qué tiempo va a hacer determinarán factores como el peso de nuestra maleta o tener que comprar ropa cuando estemos en nuestro destino. Conocer la moneda que utiliza y si es más recomendable cambiar las divisas en el país de origen o en el destino también es importante a la hora de que nos cobren intereses.
Estar familiarizado con el sistema de transporte público también puede sernos de ayuda. Ya no solo para coger transportes alternativos al taxi, sino también a la hora de adentrarnos en las calles. ¿Existen bicicletas públicas? ¿Dónde puedo conseguir el ticket para el autobús o el metro? ¿Hay un abono para turistas? A este tipo de preguntas nos dan la respuesta aplicaciones como Transit, que nos informan de las mejores formas para movernos por una ciudad.
Disfrutar del verano sin realizar grandes desembolsos es posible, así que ve preparando la maleta. La decisión de hacer un viaje o permitirse una escapada ya solo dependen de las ganas de descubrir mundo.