La única alternativa para obtener rentabilidades en el actual entorno de tipos de interés ultra bajos -si no negativos- con potencial de larga duración en el tiempo no es otra que la renta variable. A medida que una recesión en 2020 parece cada vez menos probable, la inversión en acciones va ganando tracción, no sin cierto recelo por parte de los que siguen la evolución de los principales índices bursátiles del mundo desarrollado.
Por tanto, puede ser un buen momento para cambiar el foco hacia los mercados emergentes. Por valoraciones tienen un interés relativo mayor, pero es necesario ser selectivo. No todos los países ofrecen una perspectiva tan sólida, como es el caso de Argentina y Turquía, pero otros mercados como China, India y Corea muestran mayor fortaleza por su capacidad de atraer inversión externa que alimente el círculo virtuoso de su crecimiento económico.
Pero, además, hay otro aspecto que puede indicarnos la consideración que estos mercados tienen, y es su progreso en cuanto a buen gobierno corporativo. Concretamente, varios de estos países han adoptado los Estándares Contables Internacionales, lo que facilita en gran medida la comparación entre diferentes compañías a nivel global, pero también los reguladores están dando los pasos necesarios para dotar de mayor transparencia a sus operaciones.
La categoría VDOS de fondos de inversión renta variable internacional emergentes obtiene una revalorización en el año del 17%, con una valoración relativamente atractiva respecto a los mercados desarrollados.
Si se conideran únicamente los fondos de esta categoría que obtienen la calificación cinco estrellas de VDOS -por su notable evolución tanto por rentabilidad como por volatilidad en los últimos tres años- la clase R de capitalización en euros de Goldman Sachs Brics Equity Portfolio avanza un 29,6% en el año. A un año su rentabilidad es del 24,9%, con un dato de volatilidad del 15,6%. Invierte al menos dos tercios de su patrimonio neto en renta variable de empresas domiciliadas en Brasil, Rusia, India y China o que obtengan una parte mayoritaria de sus ingresos o beneficios en estos mercados. Con un patrimonio gestionado de 353 millones de euros, las mayores posiciones en su cartera corresponden a Alibaba (9,4%), Tencent (8,5%), Ping An Insurance Group (7,3%), B3 - Brasil Bolsa Balcao (5,7%), Banco Bradesco (4,8%). Por país, los mayores pesos se han asignado a China (59,8%), India (19,7%), Brasil (14%) Rusia (5,7%) y liquidez (0,8%). La inversión en la clase R del fondo requiere una aportación mínima de 5.000 euros. Aplica a sus partícipes una comisión fija del 0,85%.
Con un enfoque global en la inversión en mercados emergentes, Fidelity Funds - Emerging Markets Focus obtiene una rentabilidad de 28,8% en el año, en su clase Y de acumulación en dólares. En el último periodo anual suma una ganancia del 25,1%, registrando una volatilidad del 12,5%. El gestor del fondo, Alex Duffy, invierte en empresas que se beneficien de sólido gobierno corporativo y estructura de capital, capaces de generar rentabilidades atractivas. Las acciones seleccionadas se mantienen a largo plazo. La cartera se construye con base en un análisis fundamental bottom-up, con escasa referencia al índice de mercado. Los países con mayor ponderación en la cartera de este fondo son China (27,7%), India (11,2%), Taiwán (8,8%) y Hong Kong (8,2%), mientras que las mayores posiciones corresponden a Taiwan Semiconductor (5,2%), Bank Central Asia TBK (5%), Aia Group (4,9%), HDFC Bank (4,1%) y Samsung Electronics (3,4%). Es necesaria una inversión mínima de 2.500 dólares para suscribir este fondo que grava a sus participes con una comisión fija del 0,8% y de depósito del 0,35%.
También con un enfoque global, Schroder ISF Global Emerging Market Opportunities se revaloriza desde enero un 26% en su clase C de acumulación en euros. En el último periodo anual suma un 20,8% de rentabilidad, con un coste por volatilidad bastante controlado del 13%, en el segundo mejor grupo de su categoría por este concepto (quintil cuatro). Invierte al menos dos tercios en empresas de países de mercados emergentes de todo el mundo, si bien puede asignar hasta un 40% a efectivo y bonos globales si el gestor espera que el comportamiento bursátil sea particularmente débil. El análisis toma en consideración factores ambientales, sociales y de gobernanza (ASG). Está gestionado por Nicholas Field y Tom Wilson, con las mayores ponderaciones por país en su cartera en China (21,9%), Corea del Sur (18,1%), Brasil (14%), Rusia (10,6%) y liquidez (7%). Individualmente, las mayores posiciones incluyen acciones de Samsung Electronics (6,82%), Taiwan Semiconductor (5,43%), Alibaba (5,24%), Tencent (3,55%) y Petrobras (3%). Se requiere aportar un mínimo de 1.000 euros para suscribir la clase C de acumulación en euros de este fondo, que aplica a sus partícipes una comisión fija del 1% y depósito del 0,3%.
La adopción de mejores prácticas de gobierno corporativo puede haberse convertido en un tema estructural que impulse la renta variable de los mercados emergentes. Puesto que las diferencias en cuanto a idiomas y normas de comunicación pueden obstaculizar la recopilación de información, la inversión a través de un fondo de inversión resulta más conveniente para un inversor individual, que se beneficia así de la estructura organizativa y de la extensa presencia y experiencia de los equipos de análisis y gestión de la gestora del fondo.
*Paula Mercado es directora de análisis de VDOS
Pie de foto / AUTOR FOTO (FUENTE)