El plazo para presentar la declaración de la renta está llegando a su fin. El próximo jueves 30 de junio acaba el plazo para todos aquellos contribuyentes que tengan que ajustar sus cuentas con Hacienda. A la hora de realizar este trámite pueden ocurrir dos situaciones: que el resultado sea positivo (el contribuyente debe pagar a Hacienda) o negativo (el organismo estatal tendrá que devolver al usuario una cantidad determinada). El hecho de que una persona se encuentre en una situación u otra dependerá, en parte, de las deducciones a las que tenga derecho.
Las deducciones son aquellos conceptos de la declaración de la renta por los que un contribuyente puede quitarse peso fiscal y, de esta manera, acabar pagando menos o que directamente el resultado de su declaración de la renta acabe siendo negativo. Sin embargo, no todos los contribuyentes son conscientes de todas las deducciones a las que podría tener derecho, lo que implica que algunos de ellos acaben pagando más de lo que debían o terminen recibiendo menos dinero del que podrían haber percibido.
“Según cálculos realizados en TaxDown, cada año, los contribuyentes españoles dejamos de percibir más de 9.000 millones de euros en deducciones no aplicadas, en muchos casos, de carácter autonómico. Al final, se trata de dinero que le pertenece al contribuyente y que no recibe por desconocimiento o exceso de confianza a la hora de aceptar su borrador por defecto”, asegura Quique García, CEO de TaxDown.
Eso significa que, teniendo en cuenta el número total de contribuyentes (21.028.886 personas, según los últimos datos de la Agencia Tributaria correspondientes a 2019), cada español que debe hacer la declaración de la renta no percibe unos 428 euros de media por no aplicar todas las deducciones correctamente.
¿Y esto a qué se debe? Al hacer la declaración de la renta con la plataforma de la Agencia Tributaria, normalmente el contribuyente ingresa sus datos personales y se le genera un borrador. Sin embargo, a veces el borrador no incluye todas las deducciones a las que un usuario tiene derecho. “La mayoría de las deducciones autonómicas no aparecen en el borrador y hay que incluirlas una a una en el caso de que seamos beneficiarios de ellas”, subraya el CEO de TaxDown.
Deducciones autonómicas
Las comunidades autónomas tienen ciertas competencias en materia fiscal y, entre ellas, pueden aplicar deducciones propias en la declaración de la renta. Esto implica que, dependiendo del lugar en el que resida el contribuyente, puede aplicarse ciertas desgravaciones. “Las comunidades autónomas con mayor número de deducciones propias son la Comunidad Valenciana, Canarias y Castilla y León, con 31, 23 y 17 deducciones respectivamente”, afirma Quique García.
Aunque algunas autonomías tengan más deducciones, teniendo en cuenta la totalidad, no existe una gran diferencia entre ellas. “Canarias, para compensar su insularidad, y algunas comunidades como La Rioja o Asturias están haciendo más esfuerzos por su entorno rural (viviendas, mayores…)”, explica Antonio Gallardo, experto de Banqmi, el comparador financiero de iAhorro.
De hecho, en La Rioja los contribuyentes tienen la posibilidad de desgravarse un 5% por la compra, rehabilitación o construcción de una vivienda habitual en un municipio pequeño. Algo parecido ocurre en Álava, dónde las personas con un inmueble en un municipio de menos de 4.000 habitantes pueden deducirse hasta el 20%.
En cuanto a los colectivos especiales (jóvenes, madres, etc.) también existen ciertas diferencias entre las CCAA. “En materia de educación hay comunidades con deducción en libros y materiales, otras con idiomas, uniformes…”, asegura Gallardo.
¿Existen elementos que sí o sí desgravan?
Una de las claves principales para aplicar todas las deducciones es que la persona que vaya a realizar la declaración de la renta tenga claras sus circunstancias económicas, es decir, si tiene hijos, una hipoteca sobre una vivienda, si durante el año fiscal ha realizado donaciones a organizaciones benéficas, etc.
Esto se debe a que no hay elementos que desgraven sí o sí a todos los usuarios, sino que depende del perfil. “Las deducciones se dan por circunstancias objetivas o personales (tener hijos, cuidar mayores a nuestro cargo, tener una discapacidad…) o por haber hecho una donación, una aportación a un plan de pensiones, etc.”, matiza el experto de Banqmi, comparador financiero de iAhorro.
Los niños y la declaración de la renta
“Cuando tengas hijos te desgravarás más”. Se trata de una frase muy oída en la sociedad cuando se habla de la declaración de la renta, dando a entender que, una vez tenido un hijo, las desgravaciones que se consiguen en la renta son mayores.
¿Es eso cierto? “Existen deducciones por tener hijos que buscan ayudar a las familias y hacerles la vida un poco más sencilla. Por ejemplo, la deducción por maternidad por tener hijos menores de 3 años de hasta 1.200 euros anuales por cada hijo nacido o adoptado en territorio español. Todas las madres en esta situación tienen derecho a esta deducción y pueden solicitar incluso el abono por anticipado”, explica el CEO de TaxDown.
Las ayudas no existen solo cuando el usuario tiene hijos menores de tres años, sino que también pueden aplicarse hasta que el progenitor cumpla los 25 años. Quique García matiza que, para poder desgravarse a los hijos hasta dicha edad, estos no deben percibir unos ingresos anuales superiores a los 8.000 euros.
En el caso de encontrarse en esta situación, es importante leerse el manual de la declaración de la renta y, de esta manera, cualquier persona podrá saber cuáles son las deducciones por hijo a las que tiene derecho.
Aportaciones a ONG, partidos políticos, sindicatos
Aportar dinero a causas solidarias tiene su premio, recompensa que el contribuyente podrá percibir en la declaración de la renta. Las donaciones a entidades sin ánimo de lucro (siempre que sean en cuotas mensuales, trimestrales o anuales) desgravan hasta el 80% en los primeros 150 euros y un 35% en la cantidad restante.
En lo que respecta a los partidos políticos y sindicatos, el contribuyente podrá deducirse hasta un 20% de las cuotas de afiliación o las aportaciones siempre que la cantidad no exceda de los 600 euros anuales.
Ayudar a nuevas empresas
Un nuevo negocio o empresa necesita inversores, pero estos arriesgan su dinero por confiar en una nueva idea. Es por ese motivo que la Agencia Tributaria contempla estas inversiones a la hora de realizar la declaración de la renta.
Según el manual de la declaración de la renta 2021-2022 de Hacienda “los contribuyentes pueden deducirse el 20% en el periodo por la subscripción de acciones o participaciones en empresas de nueva o reciente creación”. Esto significa que, si una persona ha decidido invertir en un nuevo negocio, podrá desgravarse cierta cantidad por ello cuando presente la declaración de la renta.
¿Se puede modificar la declaración?
Puede ocurrir que una persona haya presentado la declaración de la renta y que, después, tras mirar noticias en la prensa o, incluso, hablar con un asesor fiscal, se percate de que se ha olvidado de incluir una deducción a la que sí tenía derecho. En esos casos, ¿es posible modificar el documento presentado?
Quique García, CEO de TaxDown, recuerda que, hasta el 30 de junio, fecha límite de presentar la declaración de la renta, se puede presentar más de una declaración, puesto que, una vez que se cierre el plazo, la Agencia Tributaria cogerá la declaración más reciente del contribuyente. Eso significa que hay que pensar bien si el documento presentado es 100% correcto antes de que llegue el 30 de junio.
Una vez terminada la campaña de la renta, hay posibilidades de hacer una modificación, pero dependerá de la situación en la que se encuentren los trámites. “Dependerá de su estado: si ya se ha realizado la solicitud de devolución de ingresos no se puede hacer una declaración complementaria”, especifica Antonio Gallardo.