Donald Trump vs. Joe Biden. Mike Pence vs. Kamala Harris como aspirantes a vicepresidente. Las 59 elecciones presidenciales en EEUU se celebran mañana en mitad de una fuerte crisis sanitaria y económica por la Covid-19, tanto en el país norteamericano como en el resto del mundo. Pero es que, de su lado, la mayor economía del mundo afronta sus propios dilemas internos: desde las protestas recientes por la muerte del afroamericano George Floyd hasta el futuro del Obamacare.
Medio planeta espera un resultado y el otro medio, el contrario. Según John Reinsberg, vicepresidente de Lazard Asset Management y jefe de estrategias internacionales, una reelección de Trump sería favorable para los mercados estadounidenses, aceleraría un acuerdo comercial con el Reino Unido, reforzaría posibles disputas con Europa y reanudaría la guerra comercial con China. En cambio, piensa que una victoria de Biden sería una buena noticia para Europa y favorecería a los mercados emergentes.
Pero, a pesar de que los dos candidatos presidenciales tienen ambiciones radicalmente distintas en cuanto al papel que debe desempeñar el país a escala mundial, las perspectivas macroeconómicas "no deberían cambiar en exceso" sea quien sea finalmente el ganador, considera Samy Chaar, economista jefe de Lombard Odier.
"Frente a la recesión más profunda de la historia moderna, un nivel récord de desempleo y un gasto presupuestario históricamente alto para combatir la pandemia, el problema clave de la economía estadounidense es su recuperación", recuerda el experto.
En este sentido, Invertia ha preguntado a varias firmas de inversión acerca de cómo diseñar una cartera en función de si vence el republicano o el demócrata, así como su previsión de cuál será el resultado final.
Fondos de inversión
Daniel Rodríguez-Sahagún, gestor de carteras en Intermoney Patrimonios, cree que el escenario con mayor probabilidad es la victoria de Biden en las elecciones presidenciales y el control de los demócratas en el Congreso. "Nuestro mayor temor consiste en un escenario en el que se diera un empate entre los dos candidatos o, peor aún, una situación en la que uno de los dos contendientes no reconozca la victoria del otro", añade.
Con Biden como ganador, recomienda el fondo IMDI Rojo, de la propia Intermoney y enfocado en la renta variable global, que invierte con una alta diversificación internacional (EEUU, Europa y otras regiones) y gestiona de forma muy activa el riesgo de divisa, lo cual "consideramos de gran importancia en el momento actual".
Cabría esperar un estímulo de más de dos billones de dólares (a principios de 2021 a más tardar) que, probablemente, equivaldría al 11% del PIB. Por lo tanto, "los sectores cíclicos se verían especialmente beneficiados".
Si se diera la sorpresa y Trump fuese reelegido, el plan de estímulo sería de menor tamaño y, en este caso, "se limitaría el recorrido de lo cíclico". Aun así, los estímulos "podrían ser suficientes para justificar la exposición a bolsa", aunque en lugar de beneficiar a la renta variable global, desde Intermoney Patrimonios priorizarían la renta variable estadounidense, a través de fondos que siguieran de cerca el índice S&P 500, como el U.S. Pioneer Fund (Amundi Funds).
Escenario abierto
Por su parte, Francisco Julve, responsable de Selección de Fondos de A&G Banca Privada, no quiere hacer una apuesta grande en ninguno de los dos sentidos. Lo que sí piensa es que no se puede dar por hecho la 'marea azul' en la que Biden gana Congreso y Senado con margen relevante.
Si el líder demócrata gana, en A&G apostarían por el fondo Alger Small Caps, de pequeñas y medianas capitalizadas con mucho sesgo al sector salud. "Healthcare es un sector que suele hacerlo bien si repite partido y, además, el plan de salud nacional de Biden (cobertura para el 97% de la población) también parece que impulsaría la inversión en este sector", explica Julve.
No hay que olvidar que las small caps están más condicionadas por la recuperación de la economía y evolución de la pandemia que por las propias elecciones, por lo que, "si hay avances en la vacuna y la economía mejora, el fondo puede hacerlo bien".
Otro fondo que iría de la mano de una victoria de Biden es el Vontobel Clean Technology, global pero con la mitad de su exposición en EEUU. "Las energías limpias se comportarían mucho mejor con Biden, y como la inversión con criterios socialmente responsables (ESG, en inglés) y la concienciación ambiental coinciden con esta línea y es una tendencia global y de futuro, el fondo puede ser también buena alternativa", según A&G.
"El sector sobre el que la percepción del inversor puede cambiar más ante una hipotética victoria de Trump es el energético, posiblemente seguido de los bancos y consumo", para lo que Julve selecciona el fondo Robeco BP US Premium.
Un fondo todoterreno que se beneficiaría tanto del vuelco demócrata como del continuismo republicano es el Nordea Global Listed Infrastructures, con 60% de la exposición en EEUU. "Ambos partidos tienen en sus programas electorales fuertes inversiones en infraestructuras: carreteras, transportes, agua, energía verde y banda ancha", destacan desde A&G Banca Privada.
Inversión directa
El analista Sergio Ávila, de IG, señala que es bueno "tener en mente siempre y gane quien gane" al sector tecnológico, si bien reconce que hay más riesgo de que Biden endurezca su regulación. No obstante, aconseja poner el foco más allá de los gigantes del sector y recomienda incluir en cartera o vigilar muy de cerca valores como Amphenol Corporation, TE Connectivity, Corning Inc, Keysight Technologies, Zabra Technologies Corp, Trimble, Ubiquiti, IPG Photonics y Cognex Corp.
Lo que él llama "sectores bisagra", que forman parte del programa económico de ambos candidatos, y el sector salud son también apuestas ineludibles. Vulcan Materials, Martin Marietta Materials, Jacobs Engineering Group, Willscot Mbiel Mini Holding, Valmont Industries, Thermo Fisher Scientific, Zoetis, Agilent Technologies, Iqvia Holdings y Alexion Pharmaceuticals forman parte de sus favoritas. Y eso sin olvidar las europeas Sartorius, Recordati y Laboratorios Rovi.
En sentido opuesto, considera que el sector petrolero no tiene cabida en esta estrategia incluso si Trump consiguiera renovar en el cargo. En su lugar, sí se produce la reelección, aconseja "añadir compañías de alimentación y mayoristas" como PepsiCo, Mondelez International, General Mills, Hormel Foods, Conagra Brands, Walmart, Costco, Casey's General Stores y Grocery Outlet Holding.
En este punto, cree que los "bajos impuestos" promovidos por la administración del republicano sirven como guía para esta apuesta. Lo mismo ocurre si se analiza el prometido vuelco 'verde' que Biden quiere implementar en la mayor economía del mundo. En este caso, su recomendación pasa por las energéticas The AES Corporation, Clearway Energy y Ellomay Capital.
En Europa, Ávila recomienda estar atento a EDP Renovaveis, Neoen SA, Iberdrola y Solaria, que podrían colocarse entre las grandes beneficiadas por las políticas de la Casa Blanca si hay relevo.
Por lo que se refiere a políticas energéticas, Darío García, analista de XTB, considera que la petrolera Chevron sí tendría cabida en cartera si Trump repite en el cargo, ya que "quiere que los productores de EEUU, que en su mayoría lo hacen a través del fracking, puedan producir con márgenes positivos".
La banca podría ser otro de los sectores beneficiados por las políticas fiscales que han prometido los republicanos, con el objetivo de aliviar la penalización de los bajos tipos de interés promovidos desde la Casa Blanca e implantados por la Reserva Federal (Fed). En este sentido, considera que JP Morgan sería un valor a no pasar por alto. Lo mismo que para Lockheed Martin, solo que en este caso el analista se fundamenta en que "los presidentes republicanos siempre han dado ventaja en los presupuestos a Defensa".
En lo que se refiere a posiciones en bolsa española, destaca dos cotizadas con fuertes intereses en EEUU que podrían verse beneficiadas por un nuevo mandato de Trump: ACS y Acerinox. La primera, por la expectativa del prometido plan de infraestructuras. La segunda, por el apoyo republicano hacia el sector industrial del país, pues hay que recordar que la compañía cuenta con fábricas propias en suelo estadounidense.
Si al final se consuma la victoria de Biden a la que cada vez apuntan más encuestas, la parte energética de la cartera debería rotar hacia First Solar al considerar "el incremento de gasto público" previsto para potenciar "las energías renovables y las inversiones ecológicas". Además, una Iberdrola que en sus últimos resultados anuales ya conseguía un 19% de su facturación en EEUU se le antoja una apuesta adecuada.
En línea con el argumento de un mayor gasto público, Caterpillar, "uno de los grandes fabricantes de maquinaria de construcción" se convierte en una de sus favoritas por los "grandes contratos gubernamentales" a los que podría aspirar.
Por lo que se refiere a la mayor determinación del demócrata a decretar confinamientos más severos para contener el avance de la pandemia, García considera que Viscofan podría hacerse valer como "empresa esencial" en un contexto de mayor consumo de alimentos básicos.
Por lo que se refiere a tecnología, el analista de XTB sí que se decanta por sus colosos, las conocidas como FAANG (Facebook, Amazon, Apple, Netflix y Google -Alphabet-). Una opción que justifica por el hecho de que la mayor carga fiscal con la que amenaza Biden se toparía con la "inmunidad" de unas cuentas de negocio globales marcadas por la "dispersión geográfica" de sus ingresos y cargas tributarias.
Infraestructuras y tecnológicas
El analista de Invertia, Eduardo Bolinches, considera que infraestructuras, energías tradicionales y defensa seguirán marcando las políticas de la Casa Blanca si Trump consigue revalidarse en el asiento presidencial. Un escenario en el que considera oportuno apostar por Caterpillar, Deere, ConocoPhillips, Pionner Natural Resources, Boeing y Lockheed Martin.
Más allá de estos sectores, en finanzas apunta hacia Goldman Sachs, MasterCard, Visa y PNC Financial Services, mientras que en el terreno más puramente industrial considera que PPG Industries, Eaton Corporation y las firmas químicas FMC Corporation y Mosaic son apuesta ganadora.
En contra de la visión de sus colegas, Bolinches considera que una victoria de Biden sería la señal para "estar posicionados claramente ante el sector tecnológico". Tanto las FAANG como Tesla, Microsoft, Nvidia y PayPal son sus favoritas. Eso sí, sin olvidar el grupo de las renovables que tantas líneas de sus discursos de campaña han acaparado. Aquí, el experto aconseja poner el foco en NextEra y Avangrid, la filial estadounidense de Iberdrola.
Par completar la cartera en caso de que finalmente se produzca la llamada 'ola azul', aconseja tomar acciones de compañías como Starbucks, American Tower, Equinix, Crown Castle International y Proligis.