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El capital privado comienza a recuperar los niveles de actividad previos a la pandemia, apoyado por la liquidez existente, un entorno macroeconómico favorable y la reducción de la incertidumbre en la evolución de la pandemia. Con tres trimestres transcurridos, capital riesgo y venture capital superan ya los 6.000 millones de euros invertidos en España.

Así se puso de manifiesto en la octava edición de la LPs & GPs Spanish Conference, que celebraron EY y Ascri en la sede de la primera. En este sentido, el volumen de inversión en España ha alcanzado en el tercer trimestre del año cerca de 4.850 millones en un total de 618 inversiones, un 18,4% más que en el mismo periodo de 2020, mientras que el venture capital ha superado los máximos registrados, con casi 1.250 millones en un total de 512 inversiones.

En el encuentro de la firma de servicios profesionales y la patronal del capital privado participaron cerca de 300 inversores y fondos del sector.

Los mensajes que se trasladaron fueron muy positivos para la industria. Ignacio de la Torre, economista jefe de Arcano Partners, concluyó que “el entendimiento de la política monetaria lleva a concluir que viviremos un periodo de cinco a diez años de tipos reales negativos, y eso provocará uno de los mayores desplazamientos de la historia hacia el capital privado”.

Los datos recabados por Ascri muestran que, según el tipo de inversor, se mantiene el apetito de los fondos internacionales, tanto de private equity como de venture capital, que cuentan con abundante liquidez y mantienen el interés en España. En los primeros nueve meses del año, contribuyeron con más del 80% del volumen total invertido en empresas españolas, manteniendo el peso de los últimos años.

Sostenibilidad

De su lado, “los datos reflejan la confianza que continúan otorgando los inversores internacionales a las gestoras españolas, que han realizado un gran esfuerzo durante la pandemia apoyando e impulsando a sus participadas para su supervivencia y para prepararlas para el rebote posterior”, resaltó Aquilino Peña, presidente de Ascri.

También fue un aspecto destacado el impacto y la sostenibilidad. “Todos los players de esta industria aseguran que, en estos momentos, la creación de valor es una exigencia para cualquier inversor y esto va más allá del simple requerimiento del reporting no financiero. Gran parte de la literatura nos muestra cómo existe una correlación positiva entre esta creación de valor y el rendimiento financiero y operativo de la empresa”, indicó Juan López del Alcázar, socio responsable del área de Strategy and Transactions de EY y del sector Private Equity.

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