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Los inversores conservadores buscan opciones donde invertir su cartera. El escenario de tipos de interés cero o negativos no ha sido benévolo con ellos durante los últimos años y ahora se avecinan alzas en el precio del dinero, lo que dificulta el tránsito en la renta fija. Sin embargo, siempre hay opciones a las que agarrarse.

Por ejemplo, los bonos garantizados o la deuda financiera, dos activos de renta fija donde es experta la firma nórdica Nordea Asset Management. El gestor responsable de los fondos que invierten en estos nichos del mercado, Fabio Angelini, ha estado en Madrid visitando a distintos inversores para explicarles los beneficios de introducir este tipo de renta fija, jornada en la que reservó un hueco para verse con EL ESPAÑOL-Invertia y analizar la situación económica y financiera del viejo continente.

No obstante, es obligado advertir que la entrevista tuvo lugar en los prolegómenos de la invasión rusa a Ucrania, por lo que el escenario central quizá podría verse modificado.

Con las circunstancias de ese momento y a falta de saber si la guerra se prolongará, su principal conclusión es que no sería raro ver una subida de tipos de 50 puntos básicos o más por parte del organismo que preside Christine Lagarde en los próximos 12 meses. ¿La causa? Una inflación más alta de lo esperado. En sus fondos (Nordea 1-European Covered Bond Fund y Nordea 1-European Financial Debt Fund), es el sector bancario su principal apuesta en estos momentos, cuyos bonos, en comparación con las acciones, han sido un oasis de rentabilidad y estabilidad.

La economía se mueve en una senda de recuperación y crecimiento post-Covid y una inflación más elevada de lo que se preveía. ¿Cómo reaccionarán los bancos centrales?

Si hubiéramos tenido esta conversación hace unas cuantas semanas o meses, el consenso del mercado diría que no habría subidas de tipos en Europa antes de finales de 2023. Pero las cosas han cambiado mucho y muy rápidamente. Ahora el consenso espera una subida para finales de este año. Algunos expertos incluso afirman que ya en junio, cosa que nosotros no creemos porque sería un movimiento muy agresivo. Pero sí podría ser muy posible hacia octubre.

En primer lugar, si bien la inflación se prevé que bajará, todavía seguirá un tiempo alta y los bancos centrales tienen que reaccionar. Al mismo tiempo, si el BCE está viendo que la Fed sube sus tipos, que el Banco de Inglaterra los está subiendo incluso antes, puede verse presionado.

Fabio Angelini, especialista sénior de producto de renta fija europea en Nordea AM.

¿Hasta qué nivel subirían los tipos oficiales en esta primera fase?

Las expectativas implícitas del mercado son subidas de tipos de entre 30 y 50 puntos básicos en un año. Esto es consistente con un alza en cualquier lugar de entre 20 y 40 puntos básicos. Aunque el problema ahora es que el mercado en general está cotizando subidas de 50 puntos básicos o más a 12 meses vista. No sería raro que viéramos finalmente este nivel de 0,5% o más, porque la inflación está más alta que los tipos de interés.

Y los precios, ¿se mantendrán disparados o acabarán reduciéndose a niveles más controlables?

Para que la inflación esté consistentemente por encima del 5%, el precio de la energía debería estar muy alto por mucho tiempo, cosa que no es razonable hoy día. Lo razonable sería que la inflación se fuera a niveles del 3% o 2% en los próximos 12, 18 o 24 meses. Primero, por el efecto base: es insostenible tener unos precios tan altos durante tanto tiempo. Y, además, porque por primera vez en años, las expectativas del mercado están en línea con las expectativas del BCE en cuanto a la inflación.

Antes de subir los tipos el BCE, tendrá que poner fin a su programa de compra de bonos. ¿Qué consecuencias tendrá para la prima de riesgo de España y otros países europeos?

El tapering, en forma de reducir las compras del BCE, es inminente. Comenzará a finales de marzo y durará hasta finales 2022. Eso implicará que los bonos de España, Italia o Alemania vayan en la misma dirección, hacia un mayor tipo de interés.

Ya llevamos viendo en los últimos meses que los vencimientos más largos están funcionando mejor que los vencimientos cortos. Los vencimientos cortos se están comportando más volátilmente.

Por primera vez en años, las expectativas del mercado están en línea con las expectativas del BCE en cuanto a la inflación

¿Qué atractivos tienen los bonos garantizados y la deuda financiera para un inversor de renta fija?

El denominador común a ambos activos son los bancos. Estamos muy lejos de niveles de verdadero riesgo.

Los bonos garantizados son más un producto de duración, hacia los cinco años tal y como los gestionamos en Nordea AM hoy por hoy. A nuestro juicio, es comprar duración al precio correcto.

Por su parte, la deuda financiera es un tipo de bonos con rentabilidades más altas. Si necesitas buscar cupones con más rendimiento y luchar contra los tipos reales negativos con la inflación actual, tienes que estar en crédito. La deuda financiera que tenemos comprada está ofreciendo altas rentabilidades y, además, nosotros le añadimos una alta calidad a ese crédito. Tenemos entre un 20% y un 50% del fondo en bonos con grado de inversión.

Teniendo en cuenta que ambas estrategias se reducen a bonos bancarios, ¿podría poner algunos ejemplos de emisiones que tengan en cartera, sobre todo si proceden de España?

Por supuesto. Tenemos un bono contingente convertible (CoCo) del banco austriaco Bawag PSK. El banco está bien capitalizado, pero, sobre todo, nos gusta que tiene un alto reajuste tras su primera fecha de llamada (call). Comparativamente, no nos gustan otros CoCos de bancos franceses o alemanes porque fueron emitidos el año pasado a cupones muy bajos. Si las primas de riesgo suben, no es un buen negocio para el banco hacer la llamada a la conversión del bono. Dejarán el vencimiento del bono hacia seis, ocho o diez años.

En España, hemos ido teniendo bonos subordinados que han ido entrando y saliendo. Nos gustan los bancos regionales o retail de buena calidad crediticia, con una rentabilidad atractiva todavía hoy, como Unicaja o Abanca.

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