Dicen, que existen pocas cosas como el derbi sevillano. Durante la semana de partido que enfrenta a los dos equipos, la ciudad es un auténtico hervidero. Padres, hermanos y amigos no hablan de otra cosa: o eres del Betis, o eres del Sevilla. Pues bien, Uber ha conseguido aunar a las dos escuadras con un acuerdo de patrocinio histórico y ha provocado que se caliente su propio derbi particular: el que juega día tras día contra el Taxi.
Uber llegó a Sevilla a finales de septiembre y miles de personas se mueven ya por la capital hispalense con UberX. Casi un mes después de la llegada de Uber, la demanda del servicio ha crecido ya más de un 60%, motivada principalmente por los usuarios locales de la ciudad.
Según la compañía de movilidad, con estos acuerdos, Uber busca mejorar la experiencia de los aficionados en sus viajes a los estadios. Además, los dos acuerdos incluyen acciones especiales que se irán comunicando a lo largo del año.
Dicho contrato está suscrito para la presente temporada e incluye visibilidad en los estadios, actividades con jugadores y acciones relacionadas con la innovación.
El caso es, que este este acuerdo, no ha sentado muy bien a algunos aficionados del Betis, del Sevilla y, sobre todo al Taxi, que no entiende que las dos entidades hayan firmado un contrato de patrocinio.
En este sentido, el gremio de este transporte público ha querido reflejar su malestar. Élite Taxi afirma en un comunicado que muestra "su malestar" ante la decisión adoptada por ambos equipos de fútbol.
Élite Taxi Sevilla avisa a ambos equipos de fútbol que "no todo vale por el dólar", exponiendo que "en el taxi (ambos clubes) tienen a béticos y sevillistas.
Como en cada derbi, la ciudad se ha dividido en dos y las críticas en redes sociales se han hecho patentes. Unos defienden que Uber haya llegado a Sevilla y otros vuelven a defender el papel del Taxi.
El acuerdo, por tanto, ha levantado ampollas y tanto Sevilla como Betis han presumido de que Uber sea nuevo partner en sus redes sociales. Quien iba a decir a verdiblancos y blanquirrojos que estarían unidos por una empresa que tanta polémica ha creado desde su llegada a España.
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