Nuevo terremoto en el sector de los videojuegos. Solo unas semanas después de que Microsoft anunciara la adquisición de Activision Blizzard, Sony ha hecho su movimiento. El fabricante y desarrollador de PlayStation ha anunciado la adquisición de Bungie por 3.600 millones de dólares (unos 3.200 millones de euros).
Con sede en Estados Unidos y alrededor de 900, Bungie es el estudio que ha dado a luz a franquicias de juegos tan populares como 'Halo' o Destiny. Una vez cerrada la operación se integrará dentro de Playstation Studio, según el comunicado emitido por las compañías protagonistas de la operación.
Con todo, Bungie continuará operando de forma independiente como subsidiaria de Sony Interactive Entertainment, "manteniendo la capacidad de autopublicación y llegar a los jugadores donde sea que elijan jugar". Es decir, que, en virtud del acuerdo de adquisición, Bungie podrá seguir publicando y trabajando en otras plataformas aparte de las de Sony.
De hecho, el consejero delegado de Bungie, Pete Parsons, ha publicado un mensaje en página web en el que afirma que la compañía "sigue a cargo de su destino" y continuará publicando y desarrollando creativamente sus juegos de forma independiente. "Nuestros juegos seguirán estando donde esté nuestra comunidad, donde sea que elijan jugar", ha subrayado.
"Bungie ha creado y continúa desarrollando algunas de las franquicias de videojuegos más queridas del mundo y, al alinear sus valores con los deseos de la gente de compartir sus experiencias de juego, reúne a millones de personas en todo el mundo", ha asegurado por su parte Kenichiro Yoshida, presidente y director ejecutivo del Grupo Sony.
Además, ha agregado que utilizarán la diversa gama de activos tecnológicos y de entretenimiento del Grupo Sony para apoyar una mayor evolución de Bungie, así como su capacidad para "crear mundos icónicos en todo el mundo en múltiples plataformas y medios".
Revolución en el sector del videojuego
La compra de Bungie por parte de Sony puede interpretarse como la respuesta de la compañía japonesa al anuncio hace apenas un par de semanas de la compra de Activision Blizzard por parte de Microsoft por 68.700 millones de dólares (unos 61.141 millones de euros al cambio actual) en efectivo.
Una operación histórica tanto por tanto por el importe multimillonario de la operación, la mayor de la historía del sector y la más grande abonada íntegramente en efectivo, como por las consecuencias que podría tener en el desarrollo de un sector con un enorme potencial de crecimiento.
De hecho, los analistas ya anticipaban que esa compra no sería la única que se iba a producir en el sector. Por ejemplo, Ben Laidler, estratega de mercados globales de eToro, ya señaló entonces que la operación en torno al propietario de Call of Duty iba a impulsar más adquisiciones en el sector del juego.
"La mayor implicación de Microsoft en el negocio de los videojuegos, junto con su actual negocio de Xbox, aumentará la presión sobre los principales titulares e impulsará una mayor consolidación. Los competidores, desde Sony hasta otros más abajo en la lista, tendrán que decidir cada vez más si compiten o capitulan" remarcaba.
Al igual que ocurre con las plataformas de streaming como Netflix, Disney+ o Amazon Prime Video, el contenido se ha convertido en un aspecto clave para captar y retener clientes. Y con la compra de Activision Blizzard, Microsoft se garantizó un importante nivel de derechos exclusivos y de valiosos activos de propiedad intelectual.
En una entrevista con Gameindustru.biz, el consejero delegado de Sony Interactive Entertainment, Jim Ryan, ha detallado que esta operación lleva meses gestándose y las conversaciones son anteriores al anuncio de la compra de Activision Blizzare por Microsoft o la de Zynga por Take-Two por importe de 12.700 millones de dólares (unos 11.300 millones de dólares).
Además, ha asegurado que esta compra no tiene nada que ver con una consolidación del sector, sino que se trata de una visión compartida y de cómo hacer mejor las cosas juntos. Sin embargo, ha adelantado que habrás operaciones de compra y PlayStation tiene un camino aún que recorrer en este campo.