Chueca (Zaragoza): "Hay que conseguir que el transporte público sea más cómodo que el vehículo particular"
La consejera de la capital aragonesa repasa las claves de la situación actual y los planes futuros para impulsar la movilidad sostenible.
16 febrero, 2021 03:06Noticias relacionadas
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Zaragoza siempre ha sido una ciudad en la que empresas y marcas han lanzado productos para realizar estudios de mercado. La ubicación y las características sociodemográficas de la capital aragonesa permitían a las compañías obtener una serie de resultados que luego les permitían lanzar esos mismos proyectos en el resto de España.
El caso de la movilidad no es distinto. Sin ser Madrid ni Barcelona, Zaragoza ha sido el lugar elegido para poner en marcha multitud de iniciativas en un campo en el que los servicios de transporte tradicionales y los más novedosos están viviendo una profunda redefinición.
Una realidad que conoce bien Natalia Chueca, consejera municipal de Servicios Públicos y Movilidad de Zaragoza. La responsable de la capital aragonesa repasa para el Observatorio de la Movilidad de Invertia las claves del impacto de la pandemia en el transporte y los planes que marcarán el futuro de la movilidad de su ciudad.
¿Cuál ha sido el principal impacto de la pandemia en la movilidad de su ciudad?
En cuanto al transporte público, ha supuesto un drástico descenso en el número de usuarios, tanto del autobús urbano como del tranvía. Frente a las cifras muy positivas de 2019, año en el que se batieron récords de viajeros, en 2020 la pandemia, el confinamiento y la ralentización económica han provocado una caída del 43,2% del uso global.
De los más de 123 millones de viajes de 2019 se ha pasado a poco más de 70 millones. Esta disminución drástica en el número de usuarios se traduce, asimismo, en un importante agujero económico para el Consistorio, que se cifra entre 22 y 23 millones de euros.
En el caso del autobús urbano, en 2020 ha perdido casi 40 millones de viajeros, un 42,3% menos que el año anterior. La caída en el tranvía ha sido del 45,5% de viajeros, 13.147219 menos. También ha disminuido de manera significativa la movilidad en su conjunto, a pesar de la transferencia de usuarios que han abandonado el transporte público El tráfico rodado general en la ciudad cayó hasta el 80% durante los días más duros del confinamiento. Luego ha ido suavemente recuperándose, pero todavía no se han alcanzado las cifras previas de intensidad del tráfico. Estamos actualmente en un 7% por debajo de los niveles prepandemia.
Por otro lado, este trasvase de viajeros, sí ha afectado al incremento de uso de medios alternativos, como la bicicleta o los patinetes eléctricos, así como los desplazamientos a pie, aunque no disponemos de datos cuantitativos tan concretos como en el tráfico o el transporte público.
¿Han modificado los planes de movilidad que previamente estaban en marcha? ¿Cuáles han sido sus principales medidas en materia de movilidad tras la pandemia?
Fueron muchas medidas y todas orientadas a un objetivo principal: garantizar la seguridad en la movilidad, y especialmente en el transporte publico. Zaragoza fue la primera gran ciudad en poner en marcha la desinfección diaria de todos los autobuses y todos los tranvías de la red y la primera en obtener el certificado AENOR Covid- Free en las flotas. En el caso del tranvía incluso con un repaso al final de cada recorrido completo.
El Ayuntamiento también implantó dispensadores de hidrogel en todos los vehículos y mantuvo frecuencias y servicios a pesar de que el uso llegó a caer en algunos momentos un 90%. También se fueron regulando y controlando los aforos conforme a las cambiantes indicaciones de Sanidad, y fuimos mejorando los sistemas de información a los usuarios.
Hubo otras medidas tomadas durante el confinamiento. Por ejemplo algunas destinadas a facilitar desplazamientos y estacionamientos al personal sanitario y de las residencias de mayores: transporte público gratuito, plazas de estacionamiento reservadas en párquines públicos…
Por otro lado, también hemos trabajado mucho en mejorar las conexiones para bicis y vehículos de movilidad personal, en la idea de favorecer "con urgencia" estos medios de transporte y disuadir del uso de vehículo privado. Para ello hemos diseñado en tiempo récord el trazado de casi 80 kilómetros de ciclocarriles, vías aptas para bicicletas y vehículos de movilidad personal en calzada, que completan el circuito de carriles bici para que la ciudad sea 100% ciclable y sea posible desplazarse por cualquier punto de la ciudad en bicicleta o este tipo de vehículos sin usar las aceras, reservándolas exclusivamente para el peatón.
También hemos puesto en marcha iniciativas, como el desarrollo de una app del tipo Mobility as a Service. Aunque han llegado en este contexto de urgencia, pretenden precisamente facilitar y fomentar el uso del transporte público y del compartido eliminando el pago en metálico, unas actuaciones que ya estaban previstas en nuestra hoja de ruta.
¿Qué políticas han lanzado para revertir el trasvase de usuarios del transporte público al vehículo particular?
Como indicaba antes, pensamos que ese traspaso, en Zaragoza, ha sido relativo, puesto que aunque haya personas que antes no usaban el coche privado y ahora sí lo hacen, hay otros que han dejado de utilizarlo, por estar en situación de teletrabajo o de ERTE, o directamente por la grave crisis económica que ha supuesto la pandemia. Actualmente estamos en un 90-95% de intensidad del tráfico respecto a un año "normal".
Si la movilidad en transporte público ha bajado un 40% y la de vehículo privado un 7%, es obvio que ha habido una transferencia aunque es difícil de cuantificar. Los técnicos municipales estiman que un 10% de los usos perdidos en transporte público, unos 40.000 desplazamientos al día, se han pasado al coche.
El resto se pueden distribuir entre peatones, vehículos de movilidad personal y bajada de la movilidad en general. En todo caso, nuestro esfuerzo ha estado encaminado a que la ciudadanía que necesite desplazarse no pierda la confianza en el transporte público.
Muchas ciudades están limitando la circulación de vehículos con motores térmicos. ¿Han puesto en marcha alguna iniciativa en este sentido? ¿Qué impacto ha tenido? ¿Tienen algún calendario para aplicar y ampliar este tipo de limitaciones en marcha?
Zaragoza es una ciudad con un índice de motorización por habitante muy inferior a la media nacional, porque es una ciudad compacta en la que casi el 50% de los desplazamientos se realizan a pie y en la que ya está implantada la peatonalización del Casco Histórico desde hace años.
Próximamente acotaremos y ampliaremos esta zona de bajas emisiones con sistemas de control de acceso a determinadas zonas.
¿Qué porcentaje de la flota del transporte público y de la administración es eléctrico actualmente en su ciudad? ¿Qué planes futuros tienen en este sentido?
Es uno de los principales objetivos del de nuestro gobierno, acelerar la electrificación del transporte público y de todas las flotas de vehículos que prestan servicios públicos en la ciudad, como limpieza o gestión de residuos. Estamos de lleno trabajando en ello, exigiéndolo en las nuevas licitaciones que estamos tramitando.
En el transporte público hoy por hoy tenemos cuatro vehículos eléctricos, además de los 21 tranvías de la red. Nuestro objetivo, todavía en fase de trabajo, es acelerar la implantación de autobuses eléctricos en la flota en una cantidad más apreciable. Al margen de cuestiones contractuales y económicas con la concesionaria, eso requerirá una actuación importante en las cocheras municipales, con la instalación de los medios y la acometida eléctrica necesaria.
La flota del parque móvil del Ayuntamiento de Zaragoza es de 614 vehículos entre los que se encuentran 45 vehículos 100% eléctricos, que representan un 7,33% de la flota municipal. Además, contamos con 42 vehículos híbridos eléctricos, un 6,84%.
También contamos con 11 vehículos de Gas Licuado de Petróleo, un 1,79 % de la flota municipal. Por tanto, en nuestra flota municipal disponemos de 45 vehículos cero emisiones y de 53 vehículos ecológicos.
Estos datos no incluyen la contrata de limpieza y parques. Ambos contratos están muy próximos a iniciar su renovación, y en los pliegos de condiciones se incluye la obligatoriedad de la renovación de sus vehículos y la utilización de tecnologías no contaminantes.
En esta misma línea, ¿cuántos puntos de carga eléctrica hay en su ciudad? ¿Qué planes han puesto en marcha para aumentar esta infraestructura?
Nuestro objetivo es facilitar y fomentar la instalación de puntos de recarga en la ciudad. La vía preferente, para garantizar el mejor servicio al usuario, es la licitación de espacios autorizados para ello a concesionarios especializados en este sector.
Aunque tenemos puntos de carga municipales y damos todas las facilidades los concesionarios de los párquines públicos para que ofrezcan este servicio, pensamos que es una oferta que crecerá de manera proporcional al incremento real de la
demanda, que confiamos en que sea rápida.
Estamos en fase de dimensionamiento de los puntos de carga que necesita la ciudad y sus ubicaciones, para licitarlos este año. Además, tenemos una oficina de impulso a la electrificación en la que trabajamos con todos los agentes sociales - concesionarios, empresas de automóvil y energía, taxis- para acelerar la implantación en espacios públicos pero también en espacios privados, ya que son realmente los más adaptados a las necesidades de los propietarios de vehículos eléctricos.
Las entregas de paquetería han aumentado exponencialmente durante los últimos meses, ¿tienen algún plan para ordenar este segmento de la movilidad?
El Ayuntamiento de Zaragoza lidera, por encargo de la Dirección General de Tráfico (DGT) y en colaboración con el Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de Aragón y La Rioja (COIIAR), un grupo de trabajo para definir el nuevo marco operativo y legislativo del sector de la distribución de última milla.
Esta colaboración ha permitido a la DGT iniciar la parametrización y definición de las nuevas normas que favorezcan el desarrollo de flotas sostenibles y seguras, además de la digitalización de estos servicios para la optimización de su trabajo, y eliminación del tráfico de rotación, entre otras.
El objetivo de Zaragoza es convertirse en un referente en la Distribución Urbana de Mercancías, al poder aplicar soluciones innovadoras y los últimos desarrollos tecnológicos para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, estamos ultimando la nueva ordenanza donde se regulará y poniendo las bases para la digitalización de su gestión, de forma que todos salgamos favorecidos.
Otro de los proyectos estrella en el que estamos convencidos de que seremos pioneros es el uso de drones. En diciembre ha arrancado el proyecto europeo Flying Forward 2020 (FF2020), en el que participa el Ayuntamiento de Zaragoza junto a una docena de destacados socios de seis países distintos.
Se trata de uno de los proyectos aprobados por la Unión Europea en su convocatoria de fondos para investigación, desarrollo e innovación del programa H2020 Hacia una movilidad urbana aérea sostenible (Towards Sustainable Urban Air Mobility).
La participación de Zaragoza en esta iniciativa sitúa a nuestra ciudad, de forma destacada, en el desarrollo de la tecnología de la movilidad aérea urbana, que será protagonista en los espacios urbanos durante las próximas décadas. El proyecto tiene una dotación de 6.090.825 euros, de los cuales la Unión Europea subvenciona 5.999.575 y 246.625 euros corresponden a Zaragoza. Se desarrollará entre diciembre de 2020 y diciembre de 2023.
Una de las cuestiones que más demandan los usuarios es reducir el contacto físico con las plataformas, ¿En qué estado está la digitalización de billetes, abonos y accesos en su ciudad?
Esta semana hemos presentado, precisamente, la prueba piloto de ZUM, un proyecto pionero en movilidad nacional. Muy pocas ciudades en el mundo tienen una
aplicación en la que integran la planificación, reserva y pago de todos sus modos de transporte (transporte público, bicis y motos compartidas, taxis) ¡Zaragoza lo tiene!
De momento es un piloto de tres meses de duración que nos va a permitir iterar y mejorar antes de lanzarlo a toda la ciudad y ampliar a otros ámbitos como aparcamientos que actualmente no están integrados para gestionarlo todo de forma centralizada desde una misma aplicación.
¿Qué lugar ocupa la bici en su estrategia de movilidad presente y futura?
En Zaragoza la bicicleta siempre ha tenido un papel destacado, y queremos que siga siendo así. Por el tamaño y la orografía plana de la ciudad, se dan las condiciones ideales para que pueda seguir creciendo el número de usuarios y el porcentaje de desplazamientos sobre el total.
Hemos convertido a Zaragoza en la primera ciudad 100% ciclable en condiciones seguras, o bien en carril segregado (135 kilómetros) o bien en carril pacificado a 30 km/h con preferencia para bicis y vehículos de movilidad personal (380 kilómetros). Vamos a seguir impulsando la seguridad y la convivencia de los distintos modos, siempre priorizando a los más vulnerables, peatón, bici, patinete...
¿Qué papel juegan los servicios de nueva movilidad en el mix del transporte de su ciudad? ¿Cuántos operadores y vehículos operan estos operadores en sus calles?
Zaragoza fue una de las primeras ciudades de España donde se vivió la explosión de servicios de movilidad compartida. Su orografía, su estructura compacta y la dotación de una extensa red de carriles bici atrajo a empresas de bicicleta, patinetes y motos que consideraron Zaragoza como un lugar idóneo para este tipo de servicios.
Sin embargo, el mix de oferta no regulada hacía difícil la convivencia en el dominio publico, y dificultaba a nuestros ciudadanos la apuesta decidida por una alternativa. Zaragoza ha sido pionera en regular el uso del espacio urbano mediante la licitación, en Mayo de 2019, del servicio de patinetes eléctricos que otorgó 1.700 licencias a dos empresas de patinetes. Los viajes generados en este tipo de servicio ascienden a un promedio de 2500 viajes diarios.
Cabe destacar que el uso es muy estacional con un destacado ascenso en los meses más cálidos, entre mayo y octubre. Adicionalmente, se ha observado un efecto por el que muchos zaragozanos han tenido la oportunidad de probar el servicio en modo alquiler, les ha convencido y han procedido a comprarse un patinete propio debido al bajo coste de adquisición de este tipo de vehículos.
El 15% de los viajes producidos en los servicios de patinete compartido son generados por usuarios con vehículo propio que lo usan para sus actividades obligadas cotidianas donde tienen disponibilidad de aparcamiento (ir a la universidad, al trabajo, realizar una actividad deportiva). Además, recurren al mismo medio en formato alquiler cuando llevan a cabo una actividad de ocio (tomar unas cañas, ir a un centro comercial) en donde no tienen asegurado el aparcamiento.
En lo que tiene que ver con las motos compartidas, llevan en servicio dos años en la ciudad. Zaragoza alcanzó el pico de estos vehículos en los meses previos al Covid con una media de 900 motos compartidas en la calle. Las empresas que hoy operan en la ciudad lo hacen bajo un modelo piloto, una fórmula que permite poner a prueba un servicio y extraer aprendizajes para después regular la actividad. Los pliegos de motos compartidas en Zaragoza, saldrán publicados en los próximos días, ofertando 900 licencias.
Como protagonista de indiscutible de la movilidad sostenible en Zaragoza se encuentra la bicicleta cuyo uso ha aumentado un 50% desde la llegada del Covid. Actualmente los ciudadanos tienen a su disposición el servicio público de bicicleta BIZI con 1.300 vehículos, así como dos servicios de bicicleta compartida privados, estos últimos aún en piloto.
Entre todos suman 2.700 bicicletas para alquiler. Durante el mes de febrero de 2021 las licitaciones que regulan el servicio de bicicletas compartidas saldrán a concurso ofertando 2.500 licencias de las cuales el 20% se destinan a bicicleta de pedaleo asistido. El modelo de licitación de la movilidad compartida liderado por Zaragoza, ha sido imitado por ciudades como Barcelona, Madrid, Málaga y Sevilla.