Renault se une con la china Geely para crear un ‘gigante’ en la fabricación de motores de gasolina e híbridos
El grupo francés separa sus negocios. Para los motores de combustión crea Horse junto a Geely para fabricar cinco millones de motores de gasolina e híbridos. La división de eléctricos se llama Ampere.
8 noviembre, 2022 08:30Noticias relacionadas
Renault está apostando fuerte por lograr una buena rentabilidad. Desde que Luca De Meo tomara las riendas de la compañía hace ya algo más de dos años, este ejecutivo se ha propuesto como objetivo prioritario que el grupo francés vuelva a los beneficios y sea rentable. En concreto, De Meo espera pasar del actual 5% de margen operativo que tendrá en 2022 hasta un 8% para 2025 y el 10% para 2030, tal y como recoge Reuters.
Sin embargo, para conseguir estos objetivos, debe iniciar una nueva etapa en su historia de más de 120 años. En concreto, Renault ha anunciado hoy la firma de un "acuerdo no vinculante" con la china Geely para crear una compañía "especializada en el desarrollo, fabricación y suministro" de motores híbridos y de combustión.
Esto supone, por tanto, que el constructor francés ha decidido separar su negocio en dos áreas diferenciadas. Por un lado está la nueva división, que pasa a llamarse Horse, y que estará centrada principalmente en los motores de gasolina e híbridos. Y por otro está la organización especializada en eléctricos y software, que se llama Ampere.
La nueva organización creada con Geely está formada con un reparto de capital del 50% en la nueva compañía. Con esta nueva división, Renault pretende que la nueva compañía sea un "proveedor global e independiente de los motores híbridos de próxima generación, además de desarrollar tecnologías libres de carbono y bajas emisiones en cinco centros globales de I+D", ha señalado la compañía en un comunicado.
Así, esta nueva empresa formada por Renault y Geely sería la que abastecería a diferentes clientes, entre ellos: Renault, Dacia, Geely Auto, Volvo Cars, Lynk & Co, Proton y también Nissan y Mitsubishi Motors Company. Asimismo, en el futuro, "la asociación también podría ofrecer tecnologías de tren motriz a marcas de automóviles de terceros".
Recordamos en este sentido que Geely es un fabricante chino que es el principal dueño de Volvo, máximo accionista de Mercedes y ya vende modelos en Europa por medio de Polestar, entre otros.
Plantas españolas
Esta nueva compañía podría operar con 17 plantas de motores, algunas de ellas españolas, en tres continentes diferentes y con un nivel de empleo de alrededor de 19.000 personas en total (actualmente el grupo cuenta con 157.000 empleados). El objetivo de esta nueva compañía es el desarrollo de cinco millones de transmisiones y motores de combustión interna, híbridos e híbridos enchufables por año para abastecer a más de 130 países y regiones. De esta manera, Renault espera poder cubrir hasta el 80% del mercado mundial de motores de combustión.
"Esta asociación ambiciosa con Geely para seguir desarrollando las tecnologías ICE y de motores híbridos. seguirá siendo una parte crítica de la cadena de suministro del automóvil en las próximas décadas. Podremos ofrecer las mejores soluciones electrificadas y de tren motriz de su clase a múltiples marcas OEM en todo el mundo, liberando el potencial de mercado para esta tecnología de baja emisión", ha señalado Luca De Meo.
Por su parte, Eric Li, presidente de Geely ha señalado que “el acuerdo con el Grupo Renault permitirá la creación de un líder mundial en tecnologías híbridas para proporcionar soluciones avanzadas altamente eficientes para los fabricantes de automóviles de todo el mundo”.
Apuesta por los coches eléctricos
Además, esta nueva reorganización, por tanto, supondrá una reestructuración del negocio en Renault. Un cambio que conllevará también la separación de la compañía en otra división diferente para los eléctricos y el software.
Esta reorganización de coches eléctricos y software, Luca De Meo, CEO del Grupo Renault, la ha bautizado como Ampere. Se trataría, por tanto, de una nueva organización centrada principalmente en el lanzamiento de varios coches eléctricos a lo largo de esta década.
Unos coches eléctricos de los que el primer eslabón ha sido el Renault Mégane e-Tech, si bien vendrán muchos más en los próximos años. Asimismo, también está apostando claramente por ser una compañía de tecnología, con sus fábricas y elementos de producción conectados.
La intención de Luca De Meo, directivo que se incorporó al constructor francés hace ya algo más de dos años, es que Ampere pudiera salir a bolsa en un futuro próximo en Euronext, la fusión de las bolsas de París, Ámsterdam y Bruselas. Se trataría, además, de una división, que según apunta Bloomberg, podría tener un valor de 10.000 millones de euros. Esta cifra supondría una valoración similar a la que tiene la propia Renault en bolsa, que cerró este lunes situada en 9.364 millones de euros. De Ampere, además, Renault sería el principal accionista y mantendría el control de la sociedad.
Esta compañía, además, podría tener alrededor de 10.000 empleados, todos (o la gran mayoría) en Francia, que es donde se quedaría el ‘cuartel general’ del eléctrico de Renault. En total, el Grupo Renault cuenta actualmente con 157.000 empleados en todo el mundo. Y de esta manera, además, Renault daría una gran respuesta contundente a la intención de los políticos de prohibir el motor de combustión más allá de 2035 en la Unión Europea.
Asimismo, esta nueva reestructuración desencadenaría más adelante en una reorganización en el accionariado de las compañías. Recordamos en este sentido que Nissan es un socio histórico de Renault, del que es accionista al 15%. Sin embargo, el porcentaje de Renault en Nissan es mucho mayor, ya que cuenta con el 43% del accionariado de Nissan. Y estas desigualdades en el accionariado son las que han hecho principalmente que Nissan quiera cambiar los porcentajes de participación. Para conseguir esto es para lo que Renault pretende que Nissan invierta en la nueva filial de eléctricos y de software de la compañía del rombo.
Esta reordenación de la alianza llega después de 23 años de colaboración entre Renault, Nissan y Mitsubishi. Entre las razones de esta reorganización, está los resultados económicos de la compañía y las necesidades de inversión para acometer la gran transición hacia el vehículo eléctrico. En este sentido, Renault-Nissan-Mitsubishi ya habían anunciado unas inversiones cercanas a los 20.000 millones de euros durante los próximos años para el lanzamiento de alrededor de 30 nuevos coches eléctricos construidos con cinco plataformas comunes.