La cantidad de inversión se había cifrado hasta ahora en 3.000 millones de euros, pero este dato representa solo la aportación inicial. "La inversión total estimada se sitúa en torno a los 4.500 millones de euros en 2023-2026 y en los sucesivos años (para la fase inicialmente proyectada se prevé una inversión de más de 3.000 millones de euros)", aclara el documento de consulta pública presentado por la sociedad del grupo Volkswagen Power Holdco SA ante la Generalitat Valenciana.

"Por otra parte, y según la documentación obrante, el impacto directo en el Valor Añadido Industrial (VAB) de esta iniciativa empresarial en la Comunidad Valenciana supondrá unos 650 millones de euros cuando se alcance el 100% de la producción prevista", agrega el documento.

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El mismo subraya que "esta generación de VAB supone por sí misma un incremento del 50% del actual VAB del sector valenciano de la automoción, con lo cual quedaría acreditado su fuerte impacto supramunicipal, teniendo en cuenta que este sector de la automoción ya supone el 11% del VAB industrial de la Comunidad Valenciana".

El proyecto destaca también los elevados sueldos que generará la gigafactoría. "La productividad en términos de ocupación sería de unos 150.000 euros por empleado, prácticamente el doble de la ratio actual en el sector de la automoción, lo cual es indicativo de la innovación y especialización de esta gigafactoría. Según estos mismos datos, el efecto indirecto sobre el VAB industrial oscilaría entre 663 y 722 millones de euros en función del grado de avance de la implantación de la planta de Sagunt", destaca el PTE.

En materia de empleo, el proyecto prevé la creación de 19.100 puestos de trabajo -entre directos e indirectos- durante su construcción. "La documentación presentada separa la generación de empleo durante la fase de la construcción de la planta, incluyendo el montaje de la maquinaria y puesta en marcha de la gigafactoría, y la fase posterior ligada con la producción. Por lo que respecta a la totalidad del empleo temporal, primera fase, se estima en una media anual de 8.900 puestos de trabajo directos y 10.200 indirectos durante el periodo 2023-2026", desglosa.

Una vez operativa, "la documentación presentada contrasta diferentes metodologías con resultados parejos" en materia de empleo. "Así, para la Comunidad Valenciana, se estima una creación de empleos directos de casi 4.200 puestos de trabajo (únicamente en la fase de desarrollo del proyecto inicialmente proyectada el número estimado de empleos ascendería a más de 3.000), siendo el 92% personal de producción y el 8% de dirección y administración", reza el informe. "La empresa hace hincapié en la

calidad y estabilidad de este empleo", agrega.

Por su parte, el empleo indirecto estimado "es de unos 27.000 puestos de trabajo, mientras que el inducido alcanza los 11.000". "Es de remarcar que, con independencia del personal directamente relacionado con la planta de baterías, los empleos indirectos tendrán más peso en los sectores de metalurgia y productos metálicos, productos químicos, maquinaria y equipo y reparación e instalación de maquinaria", precisa.

Impuestos millonarios

Los tributos a los que tendrá que hacer frente la empresa también son superlativos. "Respecto de los ingresos públicos, aplicando los parámetros correspondientes al municipio de Sagunt, el Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE) devengaría 5.842.331,81 euros anuales durante el periodo 2027-2031, y de 9.565.304,06 euros anuales a partir de 2032", estima el PTE.

"Por su parte, el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) a recaudar por el ayuntamiento alcanzaría la cifra de 2.565.304 euros anuales, todo ello sin perjuicio de las bonificaciones que se pudieran otorgar por la creación de empleo y otros factores de inversión", añade.

El informe, en alusión a las haciendas Autonómica y Central, también apunta que, "de los efectos directos, indirectos e inducidos de la inversión y de la creación de empleo en la implantación industrial, estos serán significativos, especialmente sobre el IVA, el IRPF, el Impuesto de Sociedades y los relacionados con el incremento presumible de la actividad inmobiliaria en la zona".

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Otro de los datos llamativos de la iniciativa es la magnitud de su superficie. Según la "definición cartográfica precisa del ámbito del proyecto", la planta de baterías y el espacio reservado para sus proveedores "se corresponde con las manzanas IN-3, IN-1, IN-2, IN-4, de la versión del Plan Especial de Parc Sagunt II".

La primera es la de la planta de fabricación de baterías, y ocupa la friolera de 1.293.806,4 metros cuadrados. Las tres restantes suman otros 1.393.631,6 metros cuadrados. "Por lo tanto la superficie de patrimonio público de suelo susceptible de ser vendida directamente en Parc Sagunt II es de 2.687.438,23 metros cuadrados, con un aprovechamiento lucrativo industrial de 2.929.307,68", reza el expediente.

El presidente valenciano, Ximo Puig, anunció este jueves en el parlamento que la sociedad del Grupo Volkswagen comprará sus terrenos antes de que acabe el presente ejercicio 2022. Y a todo este suelo hay que añadir "los exteriores a Parc Sagunt II que se dedicarán a la producción fotovoltaica". En el mismo, como se aprecia en el mapa remarcado en amarillo, "se distinguen dos zonas, una al norte del Río Palancia compacta, y otra al oeste del futuro Parc Sagunt II, formada por cuatro piezas territoriales diferenciadas".

"El promotor plantea la alimentación energética de la factoría mediante energías renovables de origen fotovoltaico, para garantizar un suministro de energía de 240 GWh/año, siendo Iberdrola España, S.A., la empresa designada para la implantación", recuerda el PTE de la gigafactoría de Volkswagen.

230 millones extra

El proyecto territorial estratégico ha sido aprobado por la Generalitat Valenciana con inusitada premura. Volkswagen confirmó este miércoles por la mañana que aceptaba las condiciones del PERTE VEC para acometer todos sus proyectos de electrificación en España, y este mismo jueves a primera hora ya estaba el proyecto publicado en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV). "La empresa no tendrá que perder ni un día", presumió al respecto el presidente valenciano, Ximo Puig.

El propio líder socialista reveló este miércoles las cantidades adicionales al PERTE VEC que han convencido a la compañía alemana. La enseña recibirá alrededor de 230 millones extra por parte del Gobierno de España al margen del instrumento canalizador de los fondos europeos, que ya le reporta otros 397 millones.

Puig precisó que, por lo que respecta a la planta de baterías, "entre 95 y 110 millones de euros son lo que no estaba aportado en el PERTE". "En principio, son recursos que llegarán del Gobierno de España", dijo. Después redondeó el montante a "100 millones". "No habrá fondos extra por parte de la Generalitat Valenciana", agregó. Si bien la autonomía sí se ha comprometido a aportar a la empresa "una cantidad anual vinculada a proyectos modernizadores concretos, como se ha hecho tradicionalmente con Ford Almussafes".

Puig, además, desglosó que, de los 397 millones que sí llegarán a Volkswagen a través del PERTE, alrededor de 160 corresponderán a la planta de baterías, que será "la primera del sur de Europa". Preguntadas sobre esta cuestión, fuentes del Ministerio de Industria confirmaron a este periódico que el Gobierno de España aportará fondos a la compañía a través de los Presupuestos Generales del Estado (PGE), si bien no confirmaron que la cifra vaya a ser de 230 millones de euros.