Novartis destinó el pasado ejercicio un total de 97 millones de euros a la I+D+i, lo que se tradujo en el desarrollo de 220 ensayos clínicos en España, de los que cerca del 60% corresponden a fases tempranas de la investigación (fases I y II).
De esta cifra, las comunidades autónomas que lideraron la participación fueron Cataluña, con centros presentes en 201 de estos 220 ensayos; Madrid, que participó en 179; y Comunidad Valenciana y Andalucía, que compartieron el tercer puesto tras participar en 114 ensayos.
Respecto a las principales áreas terapéuticas de investigación de Novartis, la Oncología encabezó el cómputo total de ensayos con un 65% de los estudios realizados, principalmente distribuidos entre tumores sólidos y hematología. Le siguen el área de Inmunología, Dermatología y Hepatología, con un 15% de los ensayos dedicados; y otras áreas de investigación como Neurociencias, Oftalmología, Respiratorio o Cardiovascular.
Entorno favorable
España se presenta actualmente como uno de los países con un entorno más favorable para el desarrollo de ensayos clínicos gracias a la implicación de profesionales y pacientes comprometidos con la investigación. Como consecuencia positiva de ello, tres de cada diez ensayos clínicos que se realizan en Europa se llevan a cabo en hospitales españoles.
"Somos un país que atrae un gran volumen de investigación clínica, lo que permite que los hospitales y profesionales sanitarios tengan una opción más: permitir a los pacientes la participación en ensayos clínicos con medicamentos que pueden mejorar su situación", ha indicado Malpesa.
Sin embargo, a pesar de ser un país atractivo para las compañías farmacéuticas, lo cierto es que "se pueden hacer más cosas". En primer lugar, Malpesa habla de la importancia de retener el talento. También agilizar los trámites: "La pandemia nos ha enseñado que se pueden aprobar ensayos clínicos en días. Yo invito a seguir en esta línea".
Y, en tercer lugar, el portavoz de Novartis pide "invertir en la digitalización de los hospitales, es decir, avanzar hacia el futuro de la medicina y de la investigación".
El impacto de la pandemia
Unos ensayos clínicos que se vieron afectados durante los meses de la pandemia, aunque no se suspendieron. "Entre marzo y mayo de 2020, nuestro objetivo fue asegurar que el tratamiento llegase a los pacientes que estaban participando en los estudios, teníamos que salvaguardar la seguridad de los voluntarios", ha explicado Javier Malpesa, responsable de Investigación Clínica de Novartis, en conversación con Invertia.
Una vez superados los peores meses de la crisis sanitaria, "llegó la etapa de aprendizaje". Y es que, la pandemia ha cambiado la forma de llevar a cabo los ensayos clínicos. "Hemos pasado de un modelo muy rígido a otro más flexible y en función de las necesidades de los pacientes", ha señalado Malpesa.
"Si hemos sido capaces de implementar medidas en plena pandemia, ahora tenemos que hacerlo para todos los ensayos para que el modelo de investigación cambie y sea más descentralizado, teniendo en cuenta la telemedicina y los dispositivos de seguimiento del paciente", ha añadido el responsable de Investigación Clínica de Novartis.