La ministra de Sanidad, Mónica García, ha anunciado este lunes la creación de un observatorio contra el fraude y la corrupción sanitaria. Para ello, se elaborará un manual de prácticas para la contratación sanitaria, con el objetivo de cerrar la puerta a las negligencias.
García, que ha participado en los Desayunos Socio-sanitarios de Europa Press, ha señalado que se va a elaborar un "mapa de riesgos dentro del Sistema Nacional de Salud para identificar los puntos críticos de fraude en contratación". Una medida que "en Europa ya existe".
En esta línea, la ministra ha avanzado que "esta misma semana" se van a dar "los primeros pasos normativos" de la Ley de Gestión Pública del Sistema Nacional de Salud con el fin de "sacar el ánimo de lucro" porque "se puede trabajar de la mano de la pública sin meter la mano en la caja de la pública".
"Queremos poner un cerrojo, poner pie en pared en uno de los ámbitos más susceptibles de las malas prácticas en la gestión sanitaria, ya que su objetivo es consagrar la supremacía de la gestión pública en nuestro Sistema Nacional de Salud".
En este sentido, la ministra ha insistido en que "hay dos terrenos" ya que, por un lado está la sanidad privada, y, por otro, "la privatización obscena de la sanidad, que es la que detrae los recursos de la sanidad pública".
Empaquetado del tabaco
Además de la creación del observatorio contra el fraude, García también ha hecho otro anuncio: este lunes se sacará a consulta pública el Real Decreto por el que se fijará el empaquetado genérico del tabaco.
Se trata de una medida incluida en el Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo, aprobado junto con las comunidades autónomas este pasado viernes.
"Esta medida se está aplicando actualmente en muchos países como Australia, Francia, Noruega y Dinamarca y está dando unos efectos evidentes", ha afirmado la ministra.
García ha asegurado que la científica demuestra que el empaquetado genérico es una medida "efectiva y que ayuda a que el propio empaquetado no funcione como un reclamo publicitario en sí mismo, haciéndolo menos atractivo y contribuyendo también a tomar la decisión de dejar de fumar".
Fin de las guardias de 24 horas
La ministra de Sanidad también ha recordado su intención de acabar con las guardias de 24 horas mediante la reforma del Estatuto Marco.
"Hay que actualizar las jornadas laborales al siglo XXI y actualizarlas, en muchas ocasiones, a un estatuto de los trabajadores que dé respuesta a que no haya profesionales que, a día de hoy, están trabajando 60 horas a la semana, de las cuales, la mitad no les computa cómo era trabajada", ha explicado.
Sin embargo, ha recordado que esto "no va a pasar de hoy a mañana" porque este sistema sanitario "está desde la época preconstitucional basado en un trabajo de 24 horas".
Por eso, García ha dicho que aún "hay que verlo" y mirar hacia otros lugares donde ya se aplica, como Suecia. Allí, "tienen menos médicos por habitantes que en España y no tienen guardias de 24 horas" y "como mucho" se trabajan 15 horas. "Aquí lo que tenemos que hacer es un esfuerzo doble", ha insistido.
Para ello, será necesario reorganizar las plantillas, capacitar a los diferentes profesionales para que hagan los diferentes trabajos y "ver que la hora de guardia tiene un valor especial, pero no solamente tiene un valor especial para el paciente y para el sistema, sino también para el profesional".