La inmobiliaria Lazora, que gestiona más de 7.000 pisos en alquiler en España, ha lanzado una promoción por la que regala los dos primeros meses de arrendamiento a todos aquellos inquilinos que entren a vivir en una de sus viviendas.
Esta promoción no tiene un plazo de validez fijo, sino que estará vigente “hasta que se restablezca un poco la normalidad de movimientos”, según explican a Invertia fuentes de la compañía. “Lo estamos haciendo en aquellas promociones donde tenemos unidades para ofrecer ya que el nivel de ocupación actual está por encima del 95%”, indican.
Debido a la incertidumbre que rodea la desescalada, Lazora ha tomado esta iniciativa para “facilitar la decisión de cambiar de vivienda a todos aquellos que tengan que hacerlo en este contexto tan difícil”. “Queremos que la situación sobrevenida del estado de alarma no les cause mayores complicaciones”, apuntan. La mitad de las viviendas que gestiona son protegidas y la otra mitad están en el mercado libre.
Más acciones por el Covid-19
Esta decisión nació a raíz de la crisis sanitaria que azota España. No es la primera, ya que el pasado 19 de marzo Lazora puso en marcha un “programa extraordinario de moratoria del pago de las rentas” para todos aquellos inquilinos que se encuentren en una situación de dificultad financiera y vulnerabilidad sobrevenidas como consecuencia del coronavirus.
Además, la gestora destaca otras medidas que ha adoptado para “intentar minimizar las molestias causadas por el coronavirus para nuestros clientes actuales, y futuros: hemos reforzado las medidas de limpieza y seguridad sanitaria en todos los edificios; ayudas especiales para personas de la tercera edad que viven solos; flexibilidad para aquellos que debían mudarse en pleno estado de alarma porque les había vencido su contrato y también para aquellos que debían entrar a vivir en nuestras viviendas”.
De la misma manera, Lazora cuenta a Invertia que está ayudando a sus inquilinos en la tramitación de las distintas ayudas al alquiler que ha aprobado el Gobierno para aquellas familias afectadas por la crisis sanitaria del Covid-19 y que cumplen los requisitos establecidos. Reconocen que esta burocracia resulta “a veces compleja”.
Necesidad de aumentar la oferta
El Banco de España ha constatado en el Documento Ocasional “El mercado de la vivienda en España entre 2014 y 2019” publicado este viernes que durante los últimos años han aumentado las dificultades para el acceso a la vivienda para determinados colectivos, como los jóvenes, los hogares con rentas más bajas y los que residen en áreas metropolitanas.
“La intervención pública en el mercado del alquiler puede contribuir a aliviar estos problemas”, apunta la institución, y apuesta por “centrarse en incrementar de manera estable la oferta de vivienda en arrendamiento a disposición de los colectivos más vulnerables”.
“La crisis va a acelerar aún más esa necesidad a corto plazo, porque va a haber españoles que no van a poder o van a tardar más en acceder a la financiación para comprar una vivienda”, señalan desde Lazora. “Esto va a provocar todavía una demanda más fuerte de alquiler al ser la única forma de poder acceder a la vivienda, especialmente para jóvenes y familias con rentas bajas”, admiten fuentes de la compañía.
Lazora mantiene que “para esto no existen soluciones rápidas, son de oferta -estructurales- y necesitan de 10 a 15 años para implantarse y resolver totalmente el problema”. Además, “con un parque de vivienda social y asequible 10 veces menor que en la Unión Europea esto implica que la gran mayoría de las nuevas viviendas deben ser sociales y asequibles”.
Por tanto, concluye Lazora, “más que nunca hay que ponerse a trabajar con urgencia en un plan de vivienda de largo plazo, de amplio consenso político y sectorial, que garantice y resuelva de forma real, y no sobre el papel, la financiación y construcción de las viviendas que necesitan y van a necesitar los españoles”.