Nadia Calviño e Ione Belarra en Consejo de Ministros.

Nadia Calviño e Ione Belarra en Consejo de Ministros. Eduardo Parra / Europa Press

Observatorio de la vivienda

La Ley de Vivienda encalla en el diseño del tope al alquiler y en su aplicación en las casas que salgan al mercado

Los cruces de declaraciones revelan que el acuerdo en el seno del Gobierno no está cerrado. 

10 marzo, 2023 02:36
Luis Casal Valentín Bustos Eduardo Ortega Socorro

Primero habló María Jesús Montero: "Prácticamente ya hay acuerdo en el Gobierno de coalición sobre cómo va a resultar el texto de la ley de Vivienda". Después respondió Ione Belarra: "Por desgracia hoy no estamos más cerca que ayer de un acuerdo". Y, más tarde, Nadia Calviño: "Quedan muy pocas cuestiones por cerrar. El acuerdo puede llegar en las próximas horas".

Tres piezas de este tablero de ajedrez en que se está convirtiendo la aprobación parlamentaria de la Ley de Vivienda, que no estaría tan cerca de producirse como el ala socialista da a entender. Fuentes de Derechos Sociales concretan que hay desacuerdo, todavía, en el diseño del tope del alquiler y su aplicación a las viviendas que salgan al mercado tras la aprobación de la ley. 

La coalición lleva arrastrando discrepancias esta legislación desde 2020 y, tras un acelerón a finales de año, planteaba trasladarla en breve a los socios de Gobierno. Sólo faltaba el aval de la vicepresidenta, que decidió enmendar el diseño de los topes: primero, un techo del 3% a las subidas del alquiler hasta 2024; después, aplicar un nuevo índice en el que ya está trabajando Asuntos Económicos.

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Ahora, la discrepancia está en que la fórmula del índice no se desarrollaría en la ley, sino más adelante. Los grupos parlamentarios y los ministerios implicados tuvieron una reunión el jueves por la tarde para intentar desbloquear este asunto, algo que viene siendo habitual en las últimas semanas.

"Estaríamos aprobándolo a ciegas y luego no tendríamos mano para tocar el índice", indican las fuentes citadas sobre el mecionado índice. En este sentido, dicen, el Ministerio de Derechos Sociales teme que Calviño logre su objetivo original de ligar el índice de precios al mercado en el futuro, algo a lo que se oponen tanto Unidas Podemos como los socios habituales. "Es poner al zorro a cuidar de las gallinas", recalcan. 

Así, la propuesta es subir un punto porcentual, hasta el 3%, el vigente límite del 2% a la actualización anual de los alquileres, pero sólo hasta 2024. Esta medida estaba incluida en el escudo anticrisis que entró en vigor el 1 de abril de 2022, hace ya casi un año, y se ha ido prorrogando en los sucesivos decretos anticrisis que se han ido aprobando después. 

Ya en 2025, todos los precios se actualizarían al nuevo índice en el que ya está trabajando Asuntos Económicos. Derechos Sociales rechaza de plano este modelo, principalmente porque sospecha que Calviño busca una fórmula que permita subidas muy superiores al 3%

Miedo

El miedo viene desde hace semanas, cuando Belarra llegó a un principio de acuerdo con el Ministerio de Transportes para regular los alquileres. Sin embargo, el texto pasó de Transportes a Asuntos Económicos y, cuando volvió, el documento no tenía nada que ver. "Más que negociar nos tumbó cosas", se quejan.

Sobre el segundo punto de discordia, la aplicación de los límites de precios a los nuevos contratos, ni siquiera había acuerdo o acercamientos con el equipo de Transportes.

Más de un año

Cabe recordar que la norma se aprobó en Consejo de Ministros hace más de un año, pero que sigue dejando 'en el banquillo' a la que sería la primera Ley de Vivienda a nivel estatal de la democracia española.

Los expertos consultados por este periódico coinciden en señalar en que establecer el índice de precios “va a ser un problema”.  El actual, denominado Sistema Estatal de Referencia del Precio del Alquiler de Vivienda, contiene datos de 2020 (es decir, de las declaraciones de Renta de 2019), por lo que los datos para saber cuánto están destinando los inquilinos al alquiler están desfasados.

Tampoco serán actuales los precios por zona, más aún si se tiene en cuenta que entremedias ha pasado una pandemia de Covid-19. 

Pero hay otro escollo. Y ese sería qué hacer con los pisos nuevos que entrarían en el mercado de alquiler. Según Alquiler Seguro, el tope vigente del 2% no está dando los frutos deseados.

En el mes de diciembre de 2022, el importe de los nuevos alquileres aumentó un 14% interanual, mientras que las rentas en vigor lo hicieron un 5%. Por tanto, están presionando hacia arriba los precios. Algo que desde la formación morada no quieren ver ‘ni en pintura’.