Doña Manolita, histórica: vende el Gordo y otros cinco premios en la Lotería

Lluvia de champán y confeti en el número 22 de la Calle del Carmen, dirección de la administración de lotería Doña Manolita. Sus trabajadores no dejaban de descorchar botellas regando con el líquido espumoso a los curiosos, los compradores de lotería y los medios allí congregados. Para ellos, ha sido un día histórico. “Pocas veces una administración vende los cinco primeros premios de la Lotería de Navidad”, explica, exultante, Concha Coronas a EL ESPAÑOL. La administración que dirige ha vendido diez décimos del Gordo de la Lotería de Navidad - el 25.590-, veinte décimos del segundo premio -el 10.989-, once del tercero -el 00750- y boletos de un cuarto -41.710- y dos de los quintos -el 66.212 y el 81.610-.

Los diez décimos del Gordo, cuatro millones en total, los ha repartido en taquilla Matilde, que reparte suerte en la administración Doña Manolita desde hace 15 años. Está "como loca de contenta" y aguarda unas flores que ha ido a comprarle su marido, pero no es ella quien lo cuenta a los periodistas sino su tío, Martín, que la visita cada día. Matilde fue una de las trabajadoras que este sábado permaneció cinco horas en una Doña Manolita cerrada y sin la tradicional cola que provoca porque los bomberos tuvieron que retirar los elementos inestables de una cornisa de la que habían caído cascotes sin golpear a los múltiples transeúntes de una de las calles más abarrotadas en estas fechas.

Este sábado ya lo advertían: usarían su golpe de suerte para repartir el Gordo. Y dicho y hecho: el primero, con 400.000 euros al décimo, el segundo, 125.000 euros por décimo, el tercero 50.000 euros cada décimo, el cuarto -20.000 euros- y dos quintos -6.000 euros-.

El Gordo, tras un año difícil

“Esperábamos dar el Gordo porque hemos pasado un año catastrófico”, comenta Sonia Domínguez, trabajadora de Doña Manolita, que dice que la de la cornisa no ha sido la única caída, ya que la encargada de esta administración, Concha Coronas, también se cayó hace unos días por las escaleras y tiene una pierna escayolada. De hecho, ha comentado a este medio que otra lotera también había tenido este año un accidente de tráfico. Para Sonia todo han sido señales de que iba a tocar el Gordo, lo que no se esperaba es que también repartieron el segundo premio, el tercero, un cuarto y dos quintos.

De los afortunados, sólo María, procedente de Elda, se ha acercado a la administración para celebrar el segundo premio que le ha tocado. Otro galardonado había recorrido los más de 500 kilómetros que separan Madrid de Galicia exclusivamente para comprar tres décimos en esta administración madrileña. No fue físicamente pero ha llamado esta mañana "emocionadísimo" para agradecer el golpe de suerte, 400.000 euros al décimo.

La gerente de Doña Manolita, Concha Coronas, celebrando en compañía de sus trabajadoras.

Y es que Doña Manolita más que administración es tradición y destino de peregrinaje para quienes aprovechan el puente de la Constitución y otros festivos para visitar Madrid.En esta céntrica administración los españoles quieren que nada cambie y han hecho oídos sordos al sistema introducido este año para evitar las largas colas que se forman, llueva, haga frío o calor para conseguir un pellizco de todo lo que reparte Doña Manolita. En 2017 Doña Manolita ya repartió el Gordo, el segundo y un quinto premio, pero este año se ha superado.