Los incendios de Canadá siguen siendo protagonistas en todo el mundo, no solo en las zonas del país americano que han quedado afectadas. Primero fue Estados Unidos, ya que ciudades como Nueva York o Washington quedaron completamente marcadas por un cielo que se movía entre tonos grisáceos y naranjas y un aire casi irrespirable.
Sin embargo, las consecuencias de esas enormes columnas de humo atravesando el cielo del planeta ya han salpicado a diferentes zonas de Europa. Un avance peligroso e imparable que ya está llegando incluso a zonas de España y Portugal. De hecho, durante esta semana se están pudiendo ver los cielos de algunas ciudades de nuestro país afectadas por esta especie de niebla tan molesta que mancha el ambiente de nuestros entornos, especialmente al amanecer.
Por ello, ciudades como Madrid no son ajenas a estos incendios de Canadá que, a pesar de estar a unos 6.000 kilómetros de distancia, están afectando directamente a la calidad del aire de la capital de España. Muchas personas se han visto sorprendidas por estos amaneceres tan particulares, plagados de una especie de calima que no es producto de la llegada del verano, si no de la catástrofe que se está viviendo al otro lado del Atlántico.
¿Cómo están afectando los incendios de Canadá a Madrid?
Los salvajes incendios que se llevan produciendo durante semanas en Canadá han llegado hasta nuestro país y hasta grandes ciudades como Madrid. Mientras los bosques de la región de Quebec, entre otras muchas, quedan arrasados, la capital de España no está siendo ajena a esta desgracia. En los últimos días, Madrid ha amanecido con un particular sol anaranjado y velado por nubes de polvo americano que han opacado la luz natural del verano.
Esta cuestión, que muchos no creían, ha sido confirmada por Rubén del Campo, el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología, quien además ha señalado que este fenómeno ha llegado para quedarse durante toda la semana tras cruzar el Atlántico Norte. "Extraño amanecer el de estos días en Madrid, con el sol anaranjado y velado por el humo procedente de los incendios de Canadá", comentaba el especialista hace unas horas en redes sociales.
La Península Ibérica está siendo víctima de varios ataques en los últimos días. Por un lado, la llegada de ese humo procedente de Canadá. Pero por otro, la presencia de un fenómeno que suele repetirse varias veces durante cada verano: la famosa calima.
La Agencia Estatal de Meteorología ya advirtió el pasado lunes de la intrusión desde el sur de una masa de polvo africano a través de una imagen de su satélite. La unión de estos dos fenómenos ha provocado un hecho insólito en los cielos del país, el cual está golpeando de manera especial a grandes ciudades como Madrid.
"Lo que sucede en determinadas zonas del planeta puede acabar notándose en lugares muy distantes. En la imagen observamos cómo el humo de los incendios de Canadá alcanza la Península Ibérica. Más al sur, se aprecia el polvo en suspensión procedente del Sáhara".
Otros expertos como Mar Gómez, doctora en Físicas y responsable de meteorología en eltiempo.es, han recordado la importancia de tener siempre en cuenta que vivimos en un espacio global y conectado: "Lo que pasa al otro lado del océano nos afecta a todos. El cielo enturbiado por el humo de los incendios de Canadá en España. Todo está conectado. Recordadlo".
¿Cómo ha llegado el humo desde Canadá hasta España?
El impresionante viaje que han realizado las columnas de humo desde Canadá hasta España está generando una enorme expectación en todo el mundo. Entre 6.000 y 7.000 kilómetros en cuestión de unos días para teñir el Atlántico de tonos grises y naranjas hasta aterrizar en la Península Ibérica.
Sin embargo, este recorrido y esta velocidad no han sido casualidad, ya que hay una razón que explica perfectamente cómo se ha producido este singular y desagradable fenómeno. Se trata de la corriente 'jet stream', un viento que se hace presente en el Atlántico Norte procedente precisamente del noroeste a una velocidad de unos 250 kilómetros por hora y que ha guiado esas columnas de humo en dirección a Europa.
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Este fenómeno que ya ha llegado hasta España se ha hecho especialmente visible también en zonas de Galicia y del norte de Castilla y León, tal y como recoge el Servicio de Monitoreo de la Atmósfera llamado Copernicus.
¿Afectarán los incendios de Canadá a la calidad del aire de Madrid?
En un principio, la respuesta es negativa. No afectará el humo procedente de los incendios de Canadá a la calidad del aire de las diferentes ciudades de España. No obstante, no se trata de un hecho positivo evidentemente.
A pesar de que grandes urbes como Madrid hayan amanecido estos días con su cielo teñido de gris y con un sol anaranjado, situación que se va a repetir durante toda la semana, no supondrá un riesgo para la salud especialmente importante.
La tendencia ha marcado que las partículas se concentren en la parte alta de la atmósfera, por lo que no está previsto que afecten a la calidad del aire que respiramos. De hecho, estas partículas se difuminan al llegar a la superficie terrestre. Su presencia se nota especialmente al amanecer y en el ocaso por el tipo de luz que se refleja en el horizonte.
Las buenas noticias, tal y como apunta MeteoGalicia, son que la concentración de estas partículas irá en receso, ya que a partir del jueves está prevista la llegada de un nuevo frente que limpiará el ambiente. Ahora ahora, en Canadá han ardido más de siete millones de hectáreas. Todavía quedan 113 incendios activos en la zona de Quebec, de los cuales 29 de ellos están fuera de control habiendo obligado a la evacuación de miles de personas.
En estos momentos, los incendios han alcanzado récords de emisiones con registros que no se habían visto en el mundo en los últimos 20 años. Se calculan que ya han subido a la atmósfera unas 160 megatoneladas de carbono. Las zonas afectadas son Columbia Británica, Alberta, la provincia del Saskatchewan y los Territorios del Noroeste en el occidente de Canadá, hasta Ontario, Quebec y Nueva Escocia.