La Policía Nacional está investigando la agresión a una niña de 12 años a la salida de un instituto de Madrid por parte de una compañera, ante la atenta mirada de una considerable cantidad de personas, y cuya escena fue grabada y difundida en redes sociales.
Los hechos tuvieron lugar el pasado lunes 25 de septiembre a las 11:00 horas a las puertas del Instituto de Educación Secundaria Gómez Moreno, en el distrito de San Blas-Canillejas, cuando una chica empezó a decirle a otra de su misma edad que quería pegarla y empezó a propinarle empujones.
En ese momento, como se ve en las imágenes difundidas en redes sociales, la atacante dio a la víctima puñetazos y patadas, acorralándola contra un coche aparcado frente al instituto. En varias ocasiones, la agarró del pelo y la arrastró hasta la calle, donde continuó golpeándola hasta que llegó otro joven y las separó.
Durante toda esa violenta escena, ningún adulto, padre o responsable del centro acudió en defensa de la agredida. De hecho, ambas estaban rodeadas de muchos chavales que jaleaban a la atacante profiriendo gritos de "¡Más patadas!" o incluso "¡Mátala!", mientras algunos grababan sin pudor lo que ocurría delante de sus narices. En redes sociales circulan al menos tres vídeos en los que se ve claramente la agresión.
Ahora, los agentes de policía de la UFAM (Unidades de Atención a la Familia y Mujer) analizan las imágenes y recogen testimonios para localizar a las atacantes.
Amenazada desde el viernes
La madre de la víctima ha denunciado los hechos ante la comisaría de San Blas de la Policía Nacional, advirtiendo de que la víctima ya había recibido insultos y amenazas en otras ocasiones.
Según ha relatado en el programa En boca de todos de Cuatro, al menos una de las agresoras es una compañera de clase de la víctima con la que el viernes anterior tuvo un pequeño enfrentamiento. La agresora se metió con el físico de su hija llamándola "patas largas", "espagueti" o "pelo alambre".
Ante estos insultos, la víctima se encaró con su compañera y ambas salieron de clase para arreglar las cosas. Ya el lunes, el día de la agresión, la atacante se acercó a la víctima junto con otras chicas para amenazarla, estando aún dentro del instituto. "Ella no le dio importancia. No pensaba que la fueran a pegar. Si no, no hubiera salido del instituto", ha afirmado la madre.
La niña fue atendida por una psicóloga del Samur-Protección Civil sin traslado hospitalario. "En este momento mi hija está mal. Ayer estuvimos en el hospital y le han mandado una medicación que la ha dejado un poco atontada, entonces tenemos que estar controlándola. Sigue llorando, le sigue doliendo el cuello, se le cae el pelo... De momento, está bastante mal", ha expresado la madre en Telemadrid.
En esa misma cadena de televisión, la madre de la menor ha relatado que el día del suceso se encontró a su hija "en shock, con la mirada y la cara idas". Aunque, para ella lo más duro fue ver las imágenes. "Es mi hija... cualquiera que sea madre y esté pasando por esto sabe lo duro que es ver cómo pegan a tu hija y ver lo que le están haciendo. Verlo con tus propios ojos, con la impotencia de no poder hacer nada".
Medidas del instituto
La progenitora ha indicado también que el centro llevó a cabo una mediación antes de que se produjese a la agresión, porque algunos profesores se habían percatado de que pasaba algo, y ha adelantado que ya "están tomando medidas" y han abierto un expediente. "El director hasta el momento se está portando bien. Lo único que pido es justicia para la niña y esos niños que han grabado con tanta maldad", ha afirmado.
También ha mostrado su indignación, además de por lo ocurrido, por la inacción de los compañeros que presenciaban la escena. "Es vergonzoso que en el siglo en el que estamos, los niños de ahora se pongan a grabar, con esas risas, esa paliza que le están dando a mi hija. Quiero justicia y quiero alzar la voz. Lo suben para reírse con maldad, y esto a ellos les gusta, les da morbo ver cómo pegan a una niña indefensa a la que han pillado distraída", ha reprochado.
Finalmente, ha pedido un cambio en la legislación porque considera que con la actual ley del menor los agresores "están protegidos" y, como "no pasa nada porque son menores, lo van a seguir haciendo". "Quiero que esa ley cambie", ha sentenciado.
Pese a que el instituto va a actuar por lo ocurrido, su hija no volverá a clase hasta conocer las medidas concretas que tome el centro.