El distrito Centro de Madrid tendrá por primera vez contenedores soterrados de papel-cartón, plástico-metal-brice y vidrio. Estarán disponibles en 30 ubicaciones y se instalarán de manera progresiva. Así lo ha anunciado este jueves la vicealcaldesa, Inma Sanz, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno del Ayuntamiento.
El distrito Centro aúna las zonas más históricas de la ciudad y concentra las calles más concurridas y visitadas. En total, está compuesto de seis barrios: Sol, Palacio, Embajadores, Cortes, Justicia y Universidad (donde se encuentra la zona de Malasaña).
El despliegue de los contenedores soterrados forma parte del contrato de contenerización, recogida y transporte de residuos que se puso en marcha en noviembre de 2022.
Dicho contrato contemplaba un aumento de la frecuencia de las recogidas de residuos en la capital, además de la implantación de 30.000 nuevos contenedores más accesibles, integrados y ergonómicos en toda la ciudad. Para todo ello se contempló una inversión total de 1.506 millones de euros anuales.
Calles elegidas
Así, será durante la primera quincena del mes de marzo cuando comiencen a instalarse los primeros contenedores subterráneos de Centro. La idea es instalar 90 de ellos, repartidos en 30 ubicaciones. Las obras para el primer punto de recogida se iniciarán en la calle Serrano Anguita, muy próxima a Alonso Martínez. Los contenedores podrán usarse ese mismo mes.
Además de estas ubicaciones, está prevista su implantación en la plaza de las Salesas, en la calle Fernando VI, en Divino Pastor, en Campoamor, Gravina, Valverde, Serrano Jover, Amaniel, Embajadores, Jesús y plaza Campillo del Mundo Nuevo. El resto de emplazamientos aún está en fase de proyecto.
El establecimiento de este sistema se enmarca en la Estrategia de Sostenibilidad Ambiental Madrid 360. El Ayuntamiento, por otro lado, ya ha finalizado la renovación de los 51 contenedores soterrados repartidos por 18 puntos del distrito de Salamanca.
Así serán los contenedores
Según informa el Consistorio en una nota, este sistema cuenta con contenedores herméticos de tapa abatible y cierre automático silencioso. El mecanismo de apertura del contenedor es de "fácil detección y manejo, permitiendo su accionamiento con el puño o el codo".
Para facilitar el acceso al peatón, además de la maneta de apertura frontal, se ha desarrollado una inscripción en braille en la tapa abatible para personas con discapacidad visual. La altura de la parte inferior de la boca del recipiente está situada a 90 centímetros desde el itinerario peatonal accesible.
Otra de las "características ventajosas" de estos contenedores para la ciudad es que los residuos se almacenan a temperatura más baja y estable, "reduciéndose el ruido, los olores y el riesgo de vandalismo". Al limitarse el impacto negativo provocado por los residuos visibles y el espacio que ocupan en aceras y calles, su instalación "mejora la limpieza del entorno y lo hace más transitable".
A su vez, desde el Consistorio explican que los nuevos contenedores constan de bloques de hormigón prefabricado, plataforma de seguridad, cuerpo contenedor, buzón de recepción y sistema de elevación.
"Tanto los materiales como la pintura y el sistema de insonorización dotan a estos contenedores de una mayor resistencia a cualquier ambiente y a distintas condiciones climáticas y reducen la generación de ruidos molestos e innecesarios, especialmente en lo que concierne a los contenedores de vidrio".