El gran 'super' de la droga de Madrid ahora es un barrio 'verde' con alquileres baratos: la nueva vida de La Rosilla
El Ayuntamiento culminará la rehabilitación de este antiguo poblado con el sorteo este mes de una última promoción de viviendas asequibles.
7 mayo, 2024 01:57Cuenta el periodista Arturo Lezcano en su libro 'Madrid, 1983' que, en la capital, los supermercados de la droga siempre han brotado en las afueras. "La tendencia siempre ha sido centrífuga, alejándolos cada vez más, pero siempre en la periferia obrera, justamente el lugar más golpeado". La Rosilla fue uno los mayores puntos de venta en los últimos compases del siglo pasado. Ahora, con este 'super' ya extinguido, el Ayuntamiento de Madrid está muy cerca de entregar las últimas viviendas protegidas de este nuevo barrio 'verde' de Villa de Vallecas.
La Rosilla -describe Lezcano- formaba parte del "pasaje de los horrores" de la droga que discurría por la carretera de Vallecas a Villaverde. Allí se encontraban La Celsa, después La Rosilla y finalmente Las Barranquillas. Hoy ninguno de estos poblados resiste y la Cañada Real acapara los grandes titulares.
La de La Rosilla fue una de las actuaciones más importantes de realojo chabolista llevadas a cabo a finales de los años 80. Allí se construyó un Barrio de Tipología Especial. En sus casas de dos plantas vivían unas 40 familias. Al principio, el día a día se desarrolló con normalidad. Pero con el paso del tiempo se convirtió en uno de los principales focos de droga de Madrid.
"El tiempo demostró que este tipo de barrios, lejos de lograr la integración, provocaron zonas de gran conflictividad y problemas sociales", recuerdan desde el Ayuntamiento de la capital. A finales de los 90, ya tenía fama de ser uno de los grandes mercados de la droga, junto a La Celsa y Las Barranquillas.
Ante este fenómeno, se cambió el enfoque de las políticas para erradicar el chabolismo. Se pasó de realojar a esta población en casas bajas a ubicarla en edificios repartidos por todo Madrid. Todo ello con el objetivo de lograr una mejor integración de estos ciudadanos.
La rehabilitación de La Rosilla no es, ni mucho menos, una operación llevada a cabo por una única administración local. El origen de la actuación se remonta a tiempos de José María Álvarez del Manzano. Fue bajo su mandato cuando se desmanteló este poblado marginal con el realojo de 164 familias. La acción supuso el pistoletazo de salida del proceso para transformar la zona en un "barrio moderno y sostenible".
Con Alberto Ruiz-Gallardón con el bastón de mando, la Empresa Municipal de la Vivienda y el Suelo de Madrid (EMVS) pidió modificar puntualmente el Plan General de Ordenación Urbana y el Plan Parcial de los terrenos para reordenar el ámbito. Una vez formalizados estos trámites, arrancaron las obras para reurbanizar La Rosilla. La actuación se prolongó desde 2012 a noviembre de 2013, costó unos 2,3 millones de euros y se llevó a cabo con Ana Botella como alcaldesa.
¿En qué consistieron estos trabajos? A grandes rasgos, ampliaron el espacio del peatón y facilitaron los recorridos, con aceras amplias y accesibles. También se levantaron lugares estanciales con sombra para los vecinos, se favoreció el arbolado autóctono de hoja caduca y perenne y se construyeron zonas infantiles.
Estas obras -según las mismas fuentes- fueron el germen para "acabar con las infraviviendas y mejorar las condiciones de vida de los vecinos". "Además, sentaron las bases para lo que termina ahora, con José Luis Martínez-Almeida de alcalde, con el nuevo barrio residencial de La Rosilla", añaden.
Así son las 279 casas con alquiler barato
En total, el Ayuntamiento ha invertido casi 37 millones de euros para construir en La Rosilla 279 viviendas en régimen de alquiler asequible, además de 509 plazas de garaje y un local comercial de 3.000 metros cuadrados "que facilitará el día a día a los vecinos y potenciará la vida en el barrio".
En total, la EMVS ha edificado en la era 'Almeida' cuatro promociones en lo que fuera el gran 'super' de la droga de la ciudad. Rosilla 1 y 2 se sortearon el pasado enero. Rosilla 3, por otro lado, ya está terminada y se sorteará durante la segunda quincena de mayo. La otra promoción, Rosilla 4, se entregó en julio de 2022 y está habitada desde entonces.
Dentro de cada promoción, hay hogares de dos, tres y hasta cuatro habitaciones. Una docena de estas viviendas están adaptadas para personas con movilidad reducida. El precio del alquiler de cada piso nunca superará el 30% de los ingresos de la unidad familiar. De media, los inquilinos que residen en la capital en viviendas promovidas por la EMVS pagan unos 230 euros al mes.
'Bulevar ecológico'
Desde el Ayuntamiento también destacan que las cuatro promociones de la Rosilla se enmarcan dentro de su apuesta por el "urbanismo sostenible". Cuentan con Certificado de Eficiencia Energética A (el más alto), que permite "reducir el consumo de energía y aumentar, al mismo tiempo, el confort de sus inquilinos".
También tienen sistema de aerotermia, suelo radiante refrescante y aislamiento SATE en las fachadas, un sistema que aísla tanto térmica como acústicamente, lo que supone "importantes ventajas" en ahorro energético y confort.
En las calles, se ha apostado por alumbrado de bajo consumo y un arbolado autóctono que no necesita riegos abundantes ni un mantenimiento continuado, indican desde Cibeles.