Nuevo capítulo sobre el futuro cantón de Montecarmelo. El Ministerio de Política Territorial y Memoria Democrática ha pedido al Ayuntamiento de Madrid los permisos para realizar nuevos sondeos en las zonas donde "es más probable hallar los cuerpos de 450 brigadistas internacionales". La solicitud gubernamental llega después de que con los primeros trabajos no hayan encontrado ningún resto.
En un comunicado difundido por el Ministerio que dirige Ángel Víctor Torres, el Ejecutivo explica que el informe preliminar del equipo arqueológico contratado ha concluido que las zonas 1 y 2, las "únicas" donde el Consistorio madrileño dio autorización para las excavaciones, "no presentan elementos de relevancia arqueológica".
Los especialistas han llegado a profundidades de 10 metros sin que se encontrase otra cosa que "escombros modernos". Por ello, según el Ministerio, aconsejan ampliar los sondeos a otras zonas que "sí son susceptibles de dar resultados positivos".
Además, desde Memoria Democrática apuntan que las localizaciones donde han podido trabajar han sido "impuestas por el propietario" y que "no eran ideales para la búsqueda".
Una vez recibido el informe de los expertos, el Ministerio ha pedido al delegado del Área de Gobierno de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Borja Carabante, que permita ampliar las excavaciones a las zonas A y B, localizadas fuera de los muros del cementerio de Fuencarral.
"Total colaboración"
Ante tal petición, el Área de Borja Carabante ha ofrecido su "total colaboración". El Ayuntamiento estudiará las autorizaciones que solicite el Ministerio para la realización de nuevos estudios y sondeos arqueológicos, "siempre que cumplan con la Ley de Memoria Democrática y se sostengan en evidencias e indicios concretos", ha indicado el Consistorio en un comunicado de respuesta.
Además, ha recordado los hitos que se han sucedido hasta hoy sobre las polémicas excavaciones y ha remarcado que Cibeles ya realizó tres estudios con los que se "descartó la presencia de una fosa común en el espacio donde irá el cantón".
"El Ayuntamiento de Madrid realizó tres estudios para este cometido: un análisis de cartografía y fotografías aéreas históricas, seis sondeos y 10 ensayos de resistencia del suelo y un análisis de tomografía y georradar. El informe final del georradar, el más exhaustivo, fue contrastado por tres arqueólogos externos", ha indicado.
"Se detectó una anomalía compatible por tamaño con una fosa a una distancia de casi 12 metros del cantón y 6,5 de la vía de acceso y otra secundaria sin importancia. Ambas han sido analizadas por el Ministerio sin ningún hallazgo relevante", ha agregado.
En este sentido, el Área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad ha argumentado que ya en agosto de 2017, con el Gobierno de Manuela Carmena y "el PSOE como aliado", se ejecutaron obras en el cementerio de Fuencarral "sin realizar ningún tipo de investigación previa o estudio arqueológico que sirviese para comprobar la existencia de una fosa con los cuerpos de 451 brigadistas internacionales".
"Además, el propio Gobierno de Carmena aseguró entonces: 'No existe hasta el momento ningún indicio, evidencia, información o documento que acredite la posible ubicación actual de los restos de estas personas, que fueron exhumados y sacados del cementerio en los años posteriores al final de la Guerra Civil'", ha añadido.
Por último, el Ayuntamiento subraya que ha "ha demostrado en todo momento su disposición para despejar cualquier duda sobre este asunto".