El delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, y el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, delante de una maqueta del Paseo Verde del Suroeste.

El delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, y el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, delante de una maqueta del Paseo Verde del Suroeste. A. Pérez Meca Europa Press

Madrid Capital

Nuevo paso para soterrar la A-5: Almeida adjudica la redacción para enterrar el tramo entre Padre Piquer y Aviación

M. Fiter
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Otro paso más para el soterramiento de la A-5. El Ayuntamiento de Madrid ha adjudicado la redacción del anteproyecto de la segunda fase de la 'megaactuación'.

En este caso, se aborda el tramo de la carretera de Extremadura comprendido entre la Avenida del Padre Piquer y de la Aviación, la que implica a la Operación Campamento.

El contrato ha sido adjudicado por 918.192 euros (sin IVA) a la firma Ayesa Ingeniería y Arquitectura S. A. U. El adjudicatario cuenta con un plazo de 12 meses para la redacción.

El Ayuntamiento sostiene que la 'megaobra' suturará la brecha que parte en dos el distrito. Desde finales de los 60, la carretera separa a los barrios de Lucero, Aluche y Las Águilas con los de Campamento y Casa de Campo, que pertenece a Moncloa-Aravaca.

Gracias al soterramiento y a la construcción de un túnel, la carretera se transformará en un "gran bulevar verde".

Pese a que aún no se nota en el tráfico rodado, las obras de la primera fase para soterrar la A-5 ya están en marcha desde el 11 de octubre

El soterramiento se ha dividido en dos lotes. El primero cubre desde Padre Piquer a Batán, e incluye la obra civil, las instalaciones y el viario en superficie.

El segundo lote engloba desde Batán a la avenida de Portugal. Cuando se haya terminado de soterrar, se urbanizará la superficie, en unos trabajos que formarán parte de un tercer lote. El coste total de las obras sobrepasará los 800 millones. De ellos, 147 los sufragará el Gobierno central y el resto los asumirá el Consistorio madrileño. 

La idea es que quede bajo tierra la parte de la A-5 donde se construirán las 10.700 viviendas de Campamento, unos terrenos que pertenecen al Estado. En septiembre, el Ayuntamiento y el Ejecutivo central desbloquearon la operación tras décadas en un limbo.

Este miércoles, durante el congreso de movilidad sostenible Global Mobility Call, Almeida ha recalcado que el nuevo contrato cumple con el compromiso de ampliar el soterramiento de la A-5, que "transformará la movilidad y la vida del sur de Madrid en la primera fase, con la generación de 80.000 metros cuadrados de zonas verdes y con carriles reservados exclusivamente para autobuses públicos".