La Fiscalía Provincial de Madrid ha solicitado que la exalcaldesa de Móstoles, Noelia Posse, sea inhabilitada durante 12 años para cualquier cargo público por el llamado caso ITV. Un paso que la acerca (más) al banquillo de los acusados y, consiguientemente, a su posible inhabilitación y expulsión del partido.
Y es que, como ha reiterado en multitud de ocasiones el secretario general del PSOE de Madrid, Juan Lobato, la Comisión de Garantías del PSM tomará las "decisiones oportunas" sobre la continuidad de Posse y su equipo en el partido "si se abre juicio oral".
Posse lleva siendo, desde la campaña electoral del 28-M, la criptonita de Juan Lobato. El secretario general del partido se ha hecho con el control de todo el organigrama en Madrid, pero, en Móstoles, sigue teniendo una aldea gala.
De hecho, desde el PSOE de Móstoles confían en que ni Posse ni el resto de concejales procesados sean expulsados del partido, como mandan los estatutos de los socialistas. ¿La razón? Que ya no hay un caso de corrupción.
Hay que recordar que, en un primer momento, Noelia Posse estuvo imputada por malversación y prevaricación. El primer delito implica cárcel, el segundo no y, simplemente, conlleva la inhabilitación.
Conforme el proceso ha ido avanzando, se ha conocido que a Posse sólo se la juzgará por prevaricación. Y es ahí donde ellos argumentan la posibilidad de poder mantenerse en el PSOE de Madrid.
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Fuentes del PSOE de Móstoles han valorado para Madrid Total el escrito del fiscal, asegurando que "no comparten" el relato de los hechos, "aunque comprendemos que cumple con su función".
Desde el equipo de Posse insisten en que van a "defender nuestra inocencia hasta el final" y, si es necesario, e irán a juicio para defenderla. "No vamos a dar por buena ninguna conformidad que suponga admitir que hicimos las cosas mal, porque no es verdad", insisten.
Además de Noelia Posse, en el caso ITV están implicados ocho ex ediles, a un funcionario público y a un empresario. Todos ellos por la presunta comisión de un delito de prevaricación en relación con el caso ITV por condonar una deuda a la empresa concesionaria de más de 2 millones de euros.
Grupo mixto
Pero por mucho que los cercanos a Posse quieran decir que no incurrió en corrupción. El escrito de la fiscalía dice algo diferente. En él, como ha adelantado este periódico, se explica que el caso ITV es "legalmente constitutivo de un delito de prevaricación, previsto y penado en el artículo 404 del Código penal, según su redacción dada por la ley 1/15, de 30 de junio". O lo que es lo mismo. Todos los delitos que el Consejo General del Poder Judicial considera corrupción.
Fuera del argumento que hacen los que defienden la inocencia de la exalcaldesa y su equipo, el Código Ético del PSOE es claro: si se produce la apertura de juicio oral, el Comité de Garantías se vería obligado a expulsarlos.
El problema es que todo esto va más allá de su expulsión. Como Lobato no pudo hacerse con el control de la lista del PSOE de Móstoles antes de las elecciones del 28-M, puesto que a Posse la defienden desde el cuartel general de Ferraz, las listas las configuró ella. Esto significa que gran parte de los ediles implicados en el caso ITV tienen acta de concejal.
Por tanto, si todos tienen que dejar su puesto, sólo dos de los actuales ediles socialistas se mantendrían al frente. Esto obligaría a que corriera la lista renovando, casi desde cero, el grupo en el Ayuntamiento.
Aun así, esto es lo de menos. La peor parte de la expulsión de Posse del partido son las repercusiones que tiene a nivel local y la posibilidad de que ella y el resto de ediles se cambien al grupo mixto. Y es que, aunque a uno le expulsen de un partido, el acta de concejal es nominativa y el partido político a quien representa no se la puede quitar.
En lo que respecta al organigrama socialista en Móstoles. Posse es presidenta de la Agrupación Socialista de Móstoles y, si la expulsa, Lobato se vería obligado dar los mandos del PSOE de Móstoles a una gestora.
La responsabilidad de Lobato
La peor de las situaciones para el PSOE de Madrid sería que Posse y los suyos no dejaran su acta de concejal y se pasaran al grupo mixto. Es una idea que se desechaba a mediados de marzo del año pasado, pero que cada vez va cogiendo más fuerza.
Sería la guinda del pastel para el secretario general del PSOE de Madrid, al que cada vez se le enquista más el caso ITV. De hecho, el actual alcalde, Manuel Bautista, le ha señalado directamente a él.
En declaraciones a este diario, el Gobierno de Móstoles ha valorado que "esta nueva petición de la Fiscalía es un fiel reflejo de un principio esencial por el que deben regirse las administraciones, y es el uso riguroso del dinero público".
"El nombre de Móstoles no puede seguir asociándose a los escándalos. Por ello, reitero al PSOE-M y a Juan Lobato que abandonen el silencio en el que se han instalado y tomen medidas por respeto a los mostoleños", han acusado.