Irine Khundadze y Nutsa Gvelesiani son dos jóvenes georgianas que aman lo excéntrico, viajar, la moda, la música, la cultura y, sobre todo, la comida. Eso las llevó en 2020 a abrir su propia hamburguesería en Tiflis, en la que hacen "sold out prácticamente a diario", y dos años después en Madrid.

Tanto ellas como Munchies by Foodgoddess, su original concepto de hamburguesería, seguramente sean lo más extravagante que haya en Madrid. "Siempre llama la atención de los transeúntes porque es extraordinario e inusual", informa Irine Khundadze, sobre su restaurante del barrio de Las Letras, en la calle Santa María, 39.

Por el Día de la Hamburguesa, conocemos este local en el que reina el color rosa y "es una mezcla" de sus personalidades: "Disney, Wes Anderson y drag queens", avanza una de las georgianas en inglés, pues todavía está aprendiendo español.

"Queríamos ser diversas. No queríamos un típico sitio de comida basura", asegura una de las creadoras de Munchies by Foodgoddess, el paraíso para los amantes de las smash burgers (las hamburguesas con la carne aplastada ahora tan de moda) donde la creatividad se respira en cada esquina. 

Irine y Nutsa, ahora 26 y 23 años, respectivamente, se conocieron hace años en Georgia a través de una amiga en común. Nunca pensaron en que el destino las llevaría a emprender juntas y acabar viviendo en Madrid. De hecho, si no hubiera sido por la pandemia, seguramente no hubiera ocurrido nada de esto.

[El barco de pan, huevo y queso georgiano que triunfa en Madrid]

Fue en el confinamiento cuando Irine cocinó la primera hamburguesa que después llevaría el sello Munchies: "Pasé la mayor parte de la pandemia cocinando porque me encanta. Crecí en la cocina de mi abuela", cuenta la joven, que por aquel entonces vivía en París porque trabajaba como productora en los estudios de Disney. El primer bocado le bastó para convencerse de que junto con Nutsa debían abrir su propio restaurante. 

Hace dos años empezaron a vender sus hamburguesas en Madrid. Ingredientes de calidad, sabores atrevidos y un equilibrio perfecto son la base de Munchies. "La carne, las salsas y el pan lo hacemos según nuestra receta específica, y las verduras y el panetone son de un comercio local", informan desde el restaurante.

En la carta se pueden encontrar burgers como la Classic Goddess (dos piezas de carne, dos lonchas de queso cheddar, salsa Munchies, ensalada y tomate), la Triple Truffle Goddess (tres piezas de carne, queso crema, salsa de trufa Munchies y ensalada) o la Big Munch (salsa Big Munch, dos piezas de carne, queso, ensalada, pepinillo y pan). El precio medio es de 13 euros la burger.

El camino en España de Irine y Nutsa no ha sido fácil. Sin inversores, ni contactos, ni amigos, ni conocer el idioma. Cuando llegaron a la capital sólo contaban con 1.500 dólares, una lista de tareas y creer en una ciudad que finalmente les ha abierto las puertas del éxito.

Pese a su limitado presupuesto apostaron por fiestas inolvidables que les hicieron reconocidas en la capital y las han llevado a conseguir una comunidad de Munchies con más de 17 mil seguidores en sus redes sociales.

Con planes ambiciosos para el futuro, Munchies by FoodGoddess quiere abrir más locales y "crear la primera tienda de comida reconfortante georgiana".