La racha de cierres de restaurantes de grandes grupos de restauración en Madrid está siendo un no parar en este inicio de 2025. Especialmente, muchos se han dado en pleno paseo de la Castellana y a estos se suma ahora el que tenía la mejor terraza de esta arteria principal.

Tras conocerse el cierre de Totó, el restaurante de deportistas famosos como Cristiano Ronaldo y Rafael Nadal, y el de Robuchon Madrid, el primer bistró francés en la capital del chef con más estrellas Michelin del mundo, Joël Robuchon, también se confirma que ha bajado la persiana La Mamona Castellana. Los tres en la misma avenida.

El último de estos locales que ha cerrado abrió hace sólo 4 años y ha sido durante ese tiempo uno de los restaurantes más demandados de la 'jet set' madrileña por su gran terraza. Sus propietarios han decidido cerrarlo, pero no porque fuera mal o por falta de clientela, sino por un cambio de estrategia del gran grupo que se encuentra detrás.

De esta manera, el Grupo Lalala, con actualmente 19 restaurantes en Madrid, ha pasado a llamarse Grupo La Bientirada. Según adelantó Sivarius, este cambio ha llevado consigo el cierre de tres locales de La Mamona: en Castellana 62, Juan Bravo 41 y Avenida de Europa 16 (Pozuelo de Alarcón).

"La decisión de ser La Bientirada como empresa y colocar la marca como eje principal ha conllevado muchos cambios y decisiones. Por ello, ha habido locales que se han visto afectados para poder llevar a cabo nuestra estrategia; siendo espacios que por sus dimensiones no podían ser Bientirada; lo que dificultaba más la expansión", ha respondido a preguntas de Madrid Total Sara Domínguez, directora de Marketing y Comunicación del Grupo La Bientirada.

Por ello, bajo el nombre La Mamona sólo queda abierto el restaurante ubicado en Chamberí y está a punto de vivir un gran cambio después de verano. "El nuevo concepto tiene mucho potencial y va a dar mucho que hablar", adelantan desde el Grupo La Bientirada, que mantendrá esta marca en una única localización.

El Grupo La Bientirada, fundado por Miguel Nicolás (CEO) y Luis Torremocha (socio), ejecuta este cambio para volver a sus raíces, ya que el grupo empezó a crecer con La Bientirada, esa cervecería moderna e informal con alma castiza que tanto triunfa en la capital.

"El nombre Lalala nos ha acompañado durante 8 años, y le debemos mucho, pero en este momento, todos nuestros proyectos llevan el carácter La Bientirada y queremos darle su lugar", apunta Domínguez.

Después de haber decidido centrar todos sus esfuerzos en las cervecerías, empiezan con este cambio a principios de 2025, y para finales de marzo tienen previsto lanzar su nueva página web, completando así todo el proceso estratégico.

Por tanto, este año va a ser un año de crecimiento, pero no en cuanto a expansión, sino a consolidar su marca, aunque hace dos semanas abrieron La Bientirada en la calle Raimundo Fernández Villaverde, 50.

De esta manera, los restaurantes que quedan abiertos a día de hoy son La Bientirada en Quevedo, Príncipe de Vergara, Santa Engracia, Mirasierra, Parque de Berlín, la T4 del aeropuerto y el más reciente, el de Raimundo Fernández Villaverde.

Por otro lado, cuentan con La Barra de la Bientirada en Fleming, Hermosilla, Juan Bravo, Santa Engracia, Ibiza (una filial junto con otro colaborador) y en el aeropuerto, en la T1 y la T4; además de La Mamona Chamberí, La Lianta en Ponzano y Salamanca, La que se Lía y La que Faltaba.

Otros cierres

El inicio de este 2025 ha ido desencadenando un cierre tras otro. Robuchon Madrid, el primer restaurante francés del chef con más estrellas Michelin del mundo, Joël Robuchon, no terminó de cuajar en Madrid desde sus comienzos. Dos años y medio después, cerró sus puertas inesperadamente.

Por otro lado, el Club Allard deja atrás su nombre y concepto después de la abrupta salida de Martín Berasategui del restaurante. Con el fin de este emblema gastronómico, el Grupo Terracotta -que tras triunfar con su primer restaurante, con el mismo nombre, en la calle Velázquez- se embarca en la aventura de abrir Terracotta Plaza de España en Casa Gallardo.

Asimismo, Totó, el exclusivo restaurante italiano del número 36 del paseo de la Castellana, propiedad de Mabel Hospitality, grupo al que pertenecen famosas estrellas del deporte como Rafael Nadal y Cristiano Ronaldo, también cerró recientemente.