Miércoles 31 de julio, 2:40 de la madrugada en la plaza de Legazpi. Un hombre se encuentra sentado en un banco cuando, de repente, un joven de 15 años se acerca a él con un pasamontañas y con una escopeta en la mano. Al ver el arma, el hombre del banco llama a su grupo, que se encuentra a unos metros, para pedir ayuda.
Es en este momento, cuando el joven del pasamontañas dispara al grupo y se da a la fuga, lo que da lugar a una persecución entre ellos. A continuación, el grupo da alcance al joven de la escopeta en la calle Divino Vallés, y le agreden usando machetes, llegando a seccionarle la mano izquierda y haciéndole varios cortes por el cuerpo.
Podría parecer la escena de una película de gansters, pero lo cierto es que estos hechos tuvieron lugar hace 5 días en el barrio de Arganzuela, una zona en la que, durante las últimas semanas, se han producido varias peleas relacionadas con bandas.
Durante este último suceso, fueron los agentes de la Policía Nacional los que, a su llegada, realizaron al joven varios torniquetes. Posteriormente, fue trasladado por los servicios de Emergencias al hospital de La Paz, donde ingresó en estado grave.
Se acusa a este menor español de tentativa de homicidio. Ahora, la Policía Nacional tiene una investigación abierta para tratar de esclarecer los hechos y dar con los autores de esta agresión que se suma a los incidentes provocados entre bandas que se han producido durante el mes de julio.
Y es que, a la vista de los violentos hechos, Arganzuela podría ser la nueva zona disputada por bandas rivales. Dos de ellas han protagonizado ya varias peleas en Madrid en lo que va de año, por lo que sus miembros podrían estar implicados en la pelea del pasado miércoles. Se trata de los Trinitarios y los Dominican Don't Play (DDP), dos territoriales pandillas que podrían estar disputándose el control del citado barrio.
El aviso de los DDP a los Trinitarios
Las citadas bandas protagonizaron recientemente un violento episodio que quedó recogido por las cámaras de una pizzería. Fue el pasado martes 2 de julio, cuando un joven menor de edad entró armado al local con una escopeta y disparó a un grupo de tres chicos. Al final, sólo un joven de 21 años resultó herido de un disparo, pero no hubo que lamentar la vida de ninguno de los implicados.
El autor de los disparos, que apenas tenía 16 años, era de origen peruano y acumulaba antecedentes por lesiones. Finalmente, fue detenido por agentes de la Policía tan solo dos días después. Al parecer, según apuntaron fuentes policiales a Europa Press, el ataque podría estar enmarcado dentro de un rito de iniciación del chico en la banda rival Dominican Don't Play (DDP).
En los últimos años, estas dos bandas enemistadas han protagonizado varios enfrentamientos violentos en la región. Algunos de ellos se saldaron con víctimas mortales, como el caso del trinitario Alexito.
La actividad de estas organizaciones criminales ha crecido en los últimos tiempos —tal y como evidencian los datos de la Fiscalía de Madrid—. Sus métodos para atacar al rival también se han recrudecido. Además de los DDP y los Trinitarios, en Madrid destaca la presencia de los Ñetas. También existen otros grupos como los conocidos Latin King o los Bloods.
Unos sucesos que han reabierto el debate sobre la seguridad ciudadana en la capital española. Desde el Ayuntamiento de José Luis Martínez-Almeida sostienen que Madrid es "una de las ciudades más seguras del mundo", aunque admiten su "preocupación" por estos episodios protagonizados por bandas juveniles y piden al Gobierno central, que tiene "competencia exclusiva" en este asunto, que tome medidas para atajar el problema.