Un recepcionista de una clínica ginecológica de Málaga ha sido detenido por la Policía Local por el supuesto acceso a imágenes íntimas de uso profesional de las pacientes, después de que fuese recriminado por una persona en la playa por grabar a mujeres en bikini sin su consentimiento.



El hombre, de 50 años, ha sido arrestado como presunto autor de un delito contra la intimidad y el derecho a la propia imagen, según ha informado este martes la Policía Local en un comunicado.



La actuación comenzó a las 15:47 horas del pasado 26 de junio, cuando una llamada alertó a la Policía Local de que un hombre estaba dirigiendo una cámara oculta hacia mujeres, algunas de ellas con apariencia de ser menores de edad, que estaban en bikini en la playa de La Malagueta, lo que había motivado una discusión tras recriminarle su actitud.



A raíz de dicha denuncia, agentes que prestaban servicio de paisano lograron localizar casi dos horas más tarde a un hombre que coincidía con la descripción.



Los agentes comprobaron que portaba una cámara de vídeo cuyo objetivo estaba recubierto en parte con cinta aislante negra para disimular las grabaciones, y hallaron cinco tarjetas de memoria y un teléfono móvil.



En el teléfono, según mostró de forma voluntaria, había numerosos archivos de vídeo en los que, al parecer, tenía grabaciones de las partes íntimas de pacientes de una clínica ginecológica, en algunos casos de vaginoplastias, con el agravante de que estaban en la carpeta de una aplicación de mensajería instantánea, lo que apuntaba a que dichas imágenes podrían haber sido compartidas.



"Si bien parece que el material se obtuvo con el consentimiento de las afectadas para uso exclusivamente profesional", la Policía señala que el detenido "podría haberse valido de su condición de empleado de la clínica en tareas administrativas" para acceder al mismo sin el consentimiento de las afectadas.



A falta de esclarecer si pudo contar con la colaboración o negligencia en la custodia de las imágenes por parte de algún otro empleado del centro, con lo que podría haber vulnerado la intimidad de las clientas de la clínica e incurrir en un delito, los agentes lo detuvieron.



El hombre fue trasladado a dependencias judiciales, junto a los dispositivos de grabación y las tarjetas de memoria intervenidos.