Varios alumnos participantes en la iniciativa educativa.

Varios alumnos participantes en la iniciativa educativa.

Málaga

El éxito inesperado de un proyecto que quiere potenciar la vocación científica de los alumnos de Málaga

La iniciativa educativa, centrada en la investigación aeroespacial, suma más del doble de centros que el curso pasado, con un total de 78.

9 octubre, 2021 19:20
Málaga

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El Proyecto Steam: Investigación Aeroespacial aplicada al aula, que busca fomentar las vocaciones científicas del alumnado, ha despertado el interés en los centros educativos de la provincia de Málaga. De hecho, se han sumado más del doble de centros que el curso pasado y para este 2021-22 serán 78 en Málaga, de un total de 468 a nivel andaluz.

Esta apuesta de la Consejería de Educación y Deporte de la Junta de Andalucía pretende mejorar las competencias del alumnado en Ciencia y Tecnología desde edades tempranas y se basa en la metodología Steam (Ciencias, Tecnología, Ingeniería, Artes y Matemáticas, por sus siglas en inglés).

El proyecto está dirigido a centros sostenidos con fondos públicos de Educación Infantil, Primaria, Secundaria Obligatoria y Bachillerato, y acerca al alumnado y profesorado a la investigación aeroespacial, poniendo a los estudiantes en el papel investigador acerca de los avances en este ámbito.

Se trata, como han explicado desde la Junta, de despertar en ellos la inquietud por el conocimiento de la ciencia y las tecnologías y estimular el interés, especialmente de las alumnas por estas materias, contribuyendo así a la igualdad de oportunidades. Este curso 274 institutos y 194 colegios están implicados en el proyecto en la comunidad.

Está organizado en tres fases: la primera es de formación del profesorado a través de los Centros del Profesorado, en formación semipresencial de 20 horas; en una segunda fase se desarrollarán actividades específicas en el aula con recursos que facilita la Consejería, entre los que se encuentran kits educativos aeroespaciales, cuadernillos didácticos, vídeos sobre temática aeroespacial y visitas educativas aeroespaciales. Esta fase se complementa con visitas a centros de investigación, instituciones y empresas del sector.

La última fase corresponderá a la documentación y difusión del trabajo que se ha llevado a cabo y que formará parte importante del proyecto pedagógico del centro educativo.

Además, al comienzo de cada curso escolar se ponen en marcha una serie de desafíos, retos y concursos aeroespaciales, en diferentes niveles y categorías, destinado a equipos de escolares que desarrollarán diferentes tipos de proyectos, y que participan en fases regionales, nacionales e incluso a nivel internacional, algunos de ellos basados en robótica aeroespacial como Astropi o Cansat, basado en el lanzamiento de cohetes, en colaboración con la Agencia Espacial Europea y su Proyecto Esero.

Los centros educativos que participan este curso 2021-22 lo hacen en tres niveles: el nivel I o de iniciación, para aquellos centros que se inician en la investigación aeroespacial; el nivel II o de profundización, para aquellos centros que participaron el curso pasado en el nivel I y desean profundizar en su estudio así como elaborar sus propios recursos educativos en dicha temática; y el nivel III o de especialización para aquellos centros que han superado el nivel II y desean especializarse en su estudio y ejercer como centros embajadores y mentores de otros centros educativos participantes.

Metodología Steam

La metodología Steam es un modelo de aprendizaje basado en la enseñanza de estas disciplinas de manera integrada en lugar de áreas de conocimiento separadas, con un enfoque interdisciplinar y aplicado.

Algunos de los beneficios pedagógicos que se le asocian son la promoción de una cultura de pensamiento científico para la toma de decisiones del alumnado; la adquisición de conocimientos tecnológicos y científicos aplicables a cualquier posible situación que pueda aparecer en el futuro, desde una perspectiva integrada; mayor conciencia de las relaciones entre las diferentes áreas del saber, asegurando un mayor grado de participación activa en los proyectos resultantes; y gracias al factor creativo, desarrolla también la innovación y el pensamiento lateral.