Concentración en contra de una agresión a un sanitario en un centro de salud de Málaga.

Concentración en contra de una agresión a un sanitario en un centro de salud de Málaga.

Málaga

Málaga fue la provincia española con más denuncias por agresiones a sanitarios junto a Madrid en 2021

La Policía Nacional presenta un balance donde señala a la ciudad andaluza como una de las más problemáticas en este ámbito, recibiendo hasta 23 notificaciones el año pasado.

4 marzo, 2022 10:52

Noticias relacionadas

La Policía Nacional ha presentado este viernes el balance de las agresiones a profesionales sanitarios en 2021, situándose la cifra de denuncias registradas en España en 225. La vuelta a la presencialidad en los centros hospitalarios y de salud, así como la vigilancia del cumplimiento de las medidas higiénico sanitarias han sido la causa de las agresiones durante el pasado año, siendo el perfil más frecuente del agresor el de varón entre 36 y 55 años y de nacionalidad española.

De las 225 denuncias recibidas, un 48% lo fueron por agresiones físicas, siendo el colectivo de médicos el que más denuncias interpuso con un 58% del total, seguido por el de enfermeros que suman un 27% y el de técnicos que supone un 15%. Málaga y Madrid fueron las provincias con mayor número de denuncias por agresión, 23 en cada una de ellas. Además de las denuncias recibidas, los agentes de seguridad ciudadana tuvieron que realizar un total de 9.000 intervenciones tanto en hospitales como en atenciones sanitarias en domicilios.

La provincia andaluza es territorio hostil para los sanitarios. Lo demuestra un informe presentado por Comisiones Obreras el pasado mes de diciembre. La provincia se situó como la segunda que más ataques físicos y verbales registró en 2021 (186), por debajo solo de Sevilla (279). Le siguieron Cádiz (140), Córdoba (114), Jaén (90), Huelva (84), Granada (79) y Almería (70). 

Durante el pasado año se ha producido un aumento del 14% de las denuncias de agresiones respecto a las presentadas el año anterior. Las causas estimadas de este repunte se deben a la vuelta de la atención sanitaria de manera presencial a los centros sanitarios y la vigilancia del cumplimiento de las medidas por la Covid. Además, la labor de concienciación que llevan a cabo los interlocutores policiales sanitarios,  está impulsando la interposición de denuncias como única fórmula para visibilizar y poder evaluar realmente la dimensión del problema.

Por otro lado, la actividad formativa en prevención de agresiones que llevan a cabo los interlocutores, se ha adaptado a las circunstancias y se ha extendido a los profesionales de la seguridad que protegen a los sanitarios, llegando a más de 2.000 profesionales de la salud y de la seguridad en este ámbito, siendo ya más de 12.000 los profesionales formados desde la implantación del protocolo.

El perfil habitual

Durante el año 2021, se ha frenado la tendencia a la baja de los últimos dos años, produciéndose un ligero aumento de las denuncias, si bien las cifras siguen estando por debajo de las que se registraron en el 2019. En total se interpusieron 225 denuncias, lo que representa un aumento del 14% respecto de 2020.

De los datos analizados, se ha corroborado que los martes fueron los días de la semana con mayor incidencia concentrándose las agresiones en la franja horaria comprendida entre las 10 y las 12 horas. El perfil del agresor detenido suele coincidir con el de un varón de entre 36 y 55 años y de nacionalidad española, mientras que el perfil de la víctima es una mujer de edad similar y de la misma nacionalidad

Además de intensificarse medidas ya implantadas como la colaboración con los colegios profesionales de la seguridad, se han elaborado nuevos proyectos como es la adaptación de un protocolo de denuncias in situ. Sin olvidar el papel de los interlocutores policiales sanitarios, figura que se ha consolidado como un elemento fundamental en la contención de las agresiones a sanitarios. 

El futuro

Para los próximos años, la Policía Nacional adoptará una serie de nuevas medidas materia preventiva de agresiones en el ámbito sanitario. Entre ellas destacan la puesta en funcionamiento de actividades formativas en el ámbito universitario, con la adquisición temprana de herramientas destinadas a la prevención de agresiones para futuros profesionales de la salud; campañas de sensibilización con la elaboración de guías, vídeos explicativos y cartelería con recomendaciones y herramientas para la prevención de las agresiones; o presencia en centros sanitarios de los interlocutores policiales.