“¡No te arrimes a la niña, cabrón!” Los primeros segundos del vídeo avanzan entre un alboroto sonoro en el que disparos y gritos se van entrelazando. Las imágenes están tomadas desde lo alto de un edificio con vistas a la playa. Deambulando entre los barrotes de la barandilla, la cámara comienza a captar las primeras muestras del tiroteo. Las pruebas se podrían seguir presenciando minutos después de que todo hubiera acabado, con los restos de un casquillo en el suelo en el lugar de los hechos.
Uno de las testigos presenciales del incidente, que prefiere no revelar su identidad, relata que en un primer momento desconocía lo que estaba ocurriendo. Incluso hasta tiempo después no llegaron a saber con precisión qué había pasado: "Ha habido mil versiones", justifica. Sin embargo, las escenas captadas por el teléfono móvil lo dejan claro: un varón, cuchillo en mano, intenta agredir a una mujer.
Durante los dos minutos que acumulan los dos vídeos, se puede escuchar cómo los testigos comentan la situación: "¡Qué vengan refuerzos! ¡Más rápido!", dicen cuando tan solo había un par de agentes de la Policía Local enfrentándose al presunto agresor. "¡Ay! ¡Se va a rajar!", grita otra persona mientras el detenido intenta herirse, antes de ser desarmado y esposado.
La actuación de la Guardia Civil evitó “una posible agresión a una víctima de violencia de género”. Los agentes tuvieron que reducirlo a disparos, después de una intensa búsqueda por la zona hasta que finalmente fue localizado en el paseo marítimo Nuestra Señora del Carmen.
El testigo se encontraba en ese instante en la calle, justo debajo del edificio desde el que se grabó todo: "Salimos alertados por el ruido. Vi llegar a todas las patrullas y me asomé. En ese momento empezaron a gritar ¡cuidado, cuidado!". La calle estaba cortada, y varias patrullas de la Policía Local y la Guardia Civil tuvieron que intervenir para arrestar al hombre, al que se acabaron llevando detenido, pero en ambulancia.
Según informa Europa Press, el detenido, que tiene en su haber numerosos antecedentes policiales por violencia de género y una requisitoria judicial en vigor con orden de búsqueda y detención por delitos de resistencia y desobediencia, se encuentra ingresado en el Hospital Regional en estado grave a la espera de evolución. Al parecer, el hombre presenta heridas de bala y arma blanca. Fue atendido por los servicios sanitarios en el propio paseo marítimo.