No es de extrañar que LaLiga SmartBank viva una revolución en los banquillos a mediados de cada temporada. Las planificaciones y los objetivos pueden fallar en una competición que dura 42 jornadas. Es más, el primer perjudicado en este tipo de decisiones suele ser el entrenador en busca de una metamorfosis sobre la imagen mostrada en el campo. Sin embargo, no siempre sale bien y de ello saben mucho en la Costa del Sol. El Málaga CF es el equipo de Segunda División que más puntos por partido ha perdido con el cambio de técnico.
La travesía de Natxo González en las aguas del Mediterráneo cruza su peor temporal. El técnico vitoriano solo ha ganado un partido de los nueve que ha disputado con el equipo blanquiazul. La intención de la dirección deportiva era que sacara al club de la zona en la que se encontraba y en la que aún sigue. Esos seis puntos le han hecho empeorar los números de José Alberto López. El asturiano cosechó 1.29 puntos por encuentro, mientras que los del vitoriano se cifran en 0.67. Así que el Málaga CF ha perdido 0.62 puntos por partido con el cambio de técnico. El peor balance.
El siguiente es el Sporting, el equipo al que persigue el Málaga CF en la clasificación. El desempeño de David Gallego no cumplió con los objetivos marcados y fue uno de los últimos en ser cesado en febrero. No obstante, sus números, 1.25 puntos por partido, son ligeramente mejores a los Josep Lluis Martí, el actual entrenador con 0.8. Aunque tan solo lleva cinco partidos.
Caso similar al del Fuenlabrada con la "pequeña" diferencia que los madrileños ya van con Sandoval por su tercer entrenador. Sergio Pellicer (0.7) fue el recambio de José Luis Oltra (0.95) y el extécnico blanquiazul se vio relevado hace pocas semanas por el actual técnico. Sin embargo, sus números en tres encuentros son poco representativos.
Los otros dos equipos que tampoco han recibido buenas noticias tras estos cambios son Las Palmas y Amorebieta (recién llegado este último). Lo más positivo para los canarios es que sí que siguen sumando más de un punto por partido (antes 1.46 y ahora 1.23). Aunque para ellos más importante es que se han vuelto a enganchar a la lucha por el play-off con García Pimienta. Por su parte, los dos empates de Haritz Mujika con los vascos no han sido suficientes para seguir en su empeño por salir del descenso.
No obstante, hay quien sí que ha salido ganando. Dos de ellos, no con excesiva influencia, han sido Alcorcón y Huesca. Lo cierto es que ambos se mantienen en la zona en la que estaban. Los madrileños siguen siendo los colistas de LaLiga SmartBank. Es un problema que han sufrido más allá de Juan Anquela (0.5), Jorge Romero (0.57) o Fran Fernández (0.55). Sobre los aragoneses es más complicado, ya que se esperaba que fueran candidatos al ascenso, pero ni Ignacio Ambriza (1.25) ni Xisco Muñoz han conseguido hacerlo posible.
Ahora bien. Hay tres clubes a los que les ha cambiado la cara el relevo de entrenador. Paco Jémez y el Ibiza cierran el Top 3. Los dos se unieron en momentos de flaqueza y ahora se sitúan en una cómoda undécima plaza. Han pasado del 1.19 de Juan Carlos Carcedo al 1.58 del actual técnico. El segundo equipo es el Leganés. Mehdi Nafti también ha conseguido sacar a su equipo del desceno con un cambio en los puntos más que notable: de 0.77 a 1.45, el doble que Asier Garitano.
Sin embargo, si hay uno que ha arriesgado y ha acertado con un cambio a poco más de 10 partidos del final es el Mirandés. El equipo de Lolo Escobar (1.11) se encontraba en una situación peor que la del Málaga, en numerosas ocasiones fue por detrás, pero apostó y ganó. Hace tan solo seis encuentros llegó al banquillo la experiencia de Joseba Etxebarría (2 puntos por partido) y prácticamente ha hecho magia. El club estaba a cuatro del descenso y ahora está a 11.
Futuro incierto
Sin embargo, un nuevo cambio podría estar por llegar. Según adelantó este lunes COPE Málaga, la entidad de Martiricos le podría haber dado un ultimátum a Natxo González. Su estancia en el banquillo podría estar en entredicho incluso si el equipo consigue los tres puntos al Girona, que viene de ganar cuatro partidos consecutivos y el último de ellos ante el Almería. Esta vez, como medida de emergencia máxima, solo vale la victoria y ni siquiera es al 100%. La derrota o un empate podrían convertirle ese mismo fin de semana en un extrabajador del club. Por lo que el técnico tiene el agua al cuello.
Ya son solo seis los puntos que separan al Málaga CF del descenso. Un tropiezo podría ponerle en un serio aprieto si los equipos de abajo siguen consiguiendo resultados favorables. La realidad sigue siendo muy complicada. Tampoco la facilita los rumores que se están destapando sobre la convivencia entre el cuerpo técnico y los jugadores. Sin embargo, lo más importante y urgente es la victoria. Lo que ocurra el sábado... ya se verá.