Personas sin mascarilla y otras con mascarilla en la calle Larios, en Málaga.

Personas sin mascarilla y otras con mascarilla en la calle Larios, en Málaga. EP

Málaga

Disparidad de opiniones en Málaga ante la recomendación de uso de la mascarilla: "Ya no hace falta"

La actitud de los jóvenes ante la Covid-19 es muy diferente a la de los mayores: "Yo me quito la mascarilla solamente en la calle".

12 julio, 2022 05:00

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Los ciudadanos malagueños son conscientes de la situación actual de la pandemia de la Covid-19, pero no coinciden en la forma de enfrentarse ella. Ante la petición de prudencia desde la Junta de Andalucía, no son pocos los mayores que están de acuerdo: "Con nuestra edad nos tiene que parecer bien", manifiesta una mujer a este periódico. En cambio, muchos de los más jóvenes reclaman la normalizacion de la situación. 

El aumento de casos en Málaga contrasta con el descenso de ingresados: el pasado viernes, hubo 16 encamados nuevos menos de los que hubo en la última actualización. No obstante, el número de positivos sigue en aumento, con un total de 1908 contagiados más. La situación se vive en la calle entre la preocupación, la resignación y la estandarización.

Son esos datos los que han llevado al delegado territorial de Salud y Familias del gobierno regional, Carlos Bautista, a lanzar un consejo a los ciudadanos: “En espacios donde legalmente podemos estar sin mascarilla, pero hay aglomeraciones importantes (…), yo recomiendo a todo el mundo que sea prudente y se pongan la mascarilla”. EL ESPAÑOL de Málaga ha salido a las calles de la ciudad para preguntar a locales y turistas cuál es, tras más de dos años de pandemia, su relación con este accesorio.

Un grupo de chicas jóvenes afirma que “ya no hace falta ponerse la mascarilla” y que el coronavirus se ha convertido “en un virus más”. Sin embargo, sí confiesan ponérsela cuando visitan a familiares en situación de riesgo: “Con mi abuela estoy con mascarilla, pero de normal no porque ya se ha demostrado que el bicho no mata tanto como antes”.

Los representantes de las nuevas generaciones entrevistados se fijan en la mortalidad del virus a la hora de decidir si es importante o no ponerse la mascarilla. “No nos dan datos lo suficientemente contundentes”, así es cómo un joven explica su negativa a ponerse la mascarilla hoy en día. Ante la hipotética situación de que la mascarilla volviera a ser obligatoria en interiores, comenta que, “con resignación, acabaría acatando la norma”.

Por su parte, dos mujeres de edad adulta cuentan que se quitan la mascarilla “solamente en la calle”. En calle Larios, dos turistas admiten durante un paseo que ven conveniente insistir en la prudencia ante la “falsa apariencia” de que “todo está bien”.

Con todo, aún existen personas que, aunque no ven problema en que haya quienes usen mascarilla, solo ven útil esta medida “en caso de que existiese de verdad la Covid”, argumenta un joven negacionista en calle Martínez.

Así, la sociedad malagueña se divide entre la precaución y el anhelo de normalidad tras más de dos años de convivencia con el virus.