La labor solidaria que desde hace más de 30 años viene realizando la Fundación Cudeca salta todas las fronteras de la provincia de Málaga y adquiere una dimensión global, hasta el punto de estar presente en el más conocido de los ralis mundiales: el Dakar.
El nombre de la entidad, reconocida por la labor que viene realizando en el cuidado de afectados por el cáncer y de otras enfermedades, está muy presente en todas y cada una de las etapas que desde finales del año pasado recorren buena parte de Arabia Saudí.
Lo hace, eso sí, gracias a la labor desinteresada del empresario Alfredo Rubio y su copiloto Luis Alberto Benedicto. "Siempre quise hacer este mítico rali; me apasionaba desde niño por el contenido aventurero y de superación personal que significa", explica Rubio vía Whatsapp a EL ESPAÑOL de Málaga.
Desde los arenales saudíes explica los motivos que le han llevado no sólo a participar en la competición, sino también a aceptar ser una especie de abanderado internacional del trabajo de Cudeca. Rubio, que acude por vez primera a la cita, participó en 2021 en el campeonato de España de todoterreno con el buggy con el que ahora recorre las rutas de Arabia Saudí.
"Después de eso pensé que era el momento de cumplir mi sueño, así que lo preparamos todo", añade. ¿Pero cómo llegó Cudeca al Dakar? Rubio reconoce que fue su copiloto el que le propuso aprovechar la difusión que da un evento de esta envergadura y trascendencia para "ayudar a alguna fundación".
La propuesta fue aceptada de inmediato. Correspondió a Benedicto la elección del colectivo al que representar. "Él se encargó de organizar una reunión con Cudeca; le pareció fantástico que les diéramos cobertura", apostilla Rubio.
Y ¿por qué esta organización? Según cuentan porque un amigo de ambos perdió a su hija de cáncer. La experiencia, ciertamente dolorosa, dejó ver la importante labor que realiza Cudeca, cuyo personal no dejó un solo día de estar junto a la chica. Este es, de algún modo, el origen del proyecto Al Dakar por un grano de arena.
Al tiempo que dan a conocer su trabajo, la iniciativa pretende recaudar fondos mediante la venta de boletos para una rifa posterior al Dakar. En la misma, explican desde Oriente Próximo, se sortearán camisetas "firmadas por participantes relevantes" y material utilizado durante el rali, que será donado.
En esta historia cobra protagonismo la figura de Koke Contreras, el que fuera portero del Real Madrid y del Málaga CF. No sólo porque colaboró en la elección de la fundación a la que ayudar, sino porque tirando de sus contactos ha conseguido que figuras del deporte como Joaquín Sánchez, jugador del Betis, e Isco, colaboren con el proyecto.