Juzgan a miembros de una red que cultivaba, preparaba y enviaba marihuana a países europeos

La Audiencia de Málaga tiene previsto juzgar a una red afincada en la Costa del Sol que, presuntamente, se dedicaba a realizar todo el proceso relacionado con el tráfico de drogas, en concreto marihuana; desde controlar la plantación, hasta el envío de la sustancia a países de Europa, pasando por la preparación y el almacenamiento.

En total hay 24 acusados por los delitos contra la salud pública, pertenencia a grupo criminal, defraudación de electricidad y tenencia ilícita de armas, solicitándose penas que varían según el número de delitos que se le imputa a cada uno. El juicio está previsto en la Sección Segunda de Málaga el martes y miércoles.

Según las conclusiones provisionales del fiscal, a las que tuvo acceso Europa Press, un acusado era el "líder absoluto" del grupo, mientras que otro era su lugarteniente y un tercero se encargaba de la custodia y preparación de la sustancia para ser enviada a distintos países europeos, sobre todo Holanda.

Otros dos procesados eran los que supuestamente se encargaban de producir y recabar en la provincia de Córdoba la sustancia que luego se almacenaba, manipulaba y envasaba para su envío, señala la acusación. Finalmente, otro acusado era el que presuntamente realizaba las negociaciones con los productores sobre las partidas.

A mediados de marzo de 2018, se produjeron contactos entre estos miembros para preparar una operación que se saldó con la detención de los miembros del grupo residentes en la Costa del Sol, precisa el ministerio público en su escrito inicial, apuntando que a algunos se les intervino droga y dinero procedente de la venta.

Los dos procesados que se encargaban de producir y recabar la marihuana lideraban otro grupo en el que estaban tanto los que se dedicaban a cultivar la sustancia y a proveer a la organización, como familiares de los líderes que supuestamente ocultaban en sus domicilios el dinero procedente del tráfico de drogas.

Por último, otros dos acusados eran los que supuestamente realizaban las instalaciones de los sistemas de aire acondicionado y luz para los invernaderos de marihuana, así como las conexiones ilegales a la red eléctrica; y otros realizaban labores de vigilancia en algunas de las negociaciones.