Estaba sentado tranquilamente en una cafetería de Marbella, pensando que lo tenía todo, una vez más, bajo control. Pero unos segundos después nota un ligero toque en la espalda y varios policías nacionales se abalanzan sobre él, lo inmovilizan y lo detienen. Abren su mochila y dentro hay 6.000 euros y una documentación polaca falsa. Game over.
Era uno de los tres fugitivos más buscados en la Unión Europea después de que Polonia lo incluyera en la lista al ser considerado uno de los delincuentes más importantes de su país en materia fiscal y penal.
Cuentan desde la Policía Nacional que al detenido se le imputan delitos contra el orden público, falsedad documental, blanqueo de capitales, delito fiscal y pertenencia a organización criminal. Además, mantenía una actitud de vigilancia extrema observando todo su entorno como medida de seguridad.
De hecho, en el momento de su detención iba con gorra, gafas oscuras y abrigo para intentar pasar desapercibido. Pero la policía sabía que era él tras un dispositivo de vigilancia y seguimiento.
La investigación comenzó en 2022, cuando las autoridades polacas se pusieron en contacto con la Policía Nacional teniendo en cuenta la entidad de los delitos cometidos por el fugitivo, por lo que el caso de llevó en el marco de la red europea de fugitivos Enfast.
Había encontrado en España un buen refugio e iba cambiando continuamente de provincia para no despertar sospechas, hasta que ha sido atrapado en Marbella. Según las autoridades polacas organizó y dirigió un grupo delictivo compuesto por múltiples personas para cometer delitos fiscales y penales, engañando a las autoridades fiscales y blanqueando grandes sumas de dinero.