Desde hace dos años, el Colegio San José de Campillos está gestionado por sus propios trabajadores, constituidos en una sociedad mercantil que se declaró en concurso de acreedores. Ahora se encuentra en fase de liquidación, pero continúa ofreciendo sus servicios con total normalidad.
El centro, que comenzó su trayectoria en 1952, cuenta con 61 alumnos internos y 13 externos de Enseñanza Secundaria Obligatoria y Bachillerato y 32 trabajadores, entre profesorado y personal de Administración y Servicios.
Ante la perspectiva de acabar cerrando sus puertas tras más de 70 años, las diferentes administraciones municipales y autonómicas han tomado cartas en el asunto para constatar su compromiso de "continuar colaborando y trabajando en defensa de esta institución".
Este martes ha tenido lugar una reunión en el centro con la presencia de los delegados territoriales Miguel Briones y Carlos García, el alcalde de la localidad, Francisco Guerrero, el administrador concursal y la dirección académica del colegio. Estos últimos compartieron el estado procesal en el que se halla el concurso actual y los posibles enfoques y explicaron que, si llegado el momento se produjese algún tipo de acuerdo con un inversor, se pretende que pase obligatoriamente por una subrogación de los contratos ya existentes del personal laboral.
Los representantes de la Junta, por su parte, destacaron que este colegio "es un referente del que la oferta educativa no puede prescindir" y mostraron su preocupación por "la posibilidad del cese de la actividad a final de este curso, con el consiguiente perjuicio del alumnado escolarizado". Por ello, se ofrecieron a realizar posibles colaboraciones.
Desde el Ayuntamiento de Campillos expusieron las posibilidades que ofrecen para que, junto a la actividad educativa, se desarrolle otro tipo de oferta complementaria vinculada a actividades deportivas, ocio y tiempo libre, o a formación relacionada con el sector de energías renovables.
La reunión finalizó con el compromiso de todos los miembros de "continuar colaborando y trabajando en defensa de esta institución", así como de mantener "una estrecha actualización de la información que se vaya produciendo, especialmente la relativa a inversores que manifiesten su interés en conocer el proyecto y las infraestructuras, y así acometer alguna iniciativa empresarial relacionada con la educación".