La Audiencia Provincial de Madrid ha confirmado que el tuitero Camilo de Ory, que fue condenado a 18 meses de cárcel por los mensajes degradantes que escribió sobre el pequeño Julen, el niño de 2 años que murió tras caer el 13 de enero de 2019 a un pozo en Totalán (Málaga), quiso "denigrar y humillar" a las víctimas.
El condenado recurrió la sentencia dictada por el Juzgado de lo Penal número 3 de Madrid pero la Sección 6 de la Audiencia Provincial de Madrid ha desestimado el recurso y ha confirmado "íntegramente" la dictada en primera instancia, según la resolución judicial, a la que ha tenido acceso Efe.
Este tribunal destaca que los mensajes del tuitero tuvieron "un claro e inequívoco contenido vejatorio", que sus textos no pueden ampararse en la libertad de expresión y que con ellos se incrementó el dolor por padecimiento psíquico de los afectados de modo "consciente y voluntario".
"Estamos ante expresiones y comentarios que atacan a las víctimas en lo que es más esencial del individuo: su dignidad de ser humano merecedor de respeto por su condición humana", señala la sentencia, que destaca que las expresiones y comentarios que hizo el tuitero crearon a las víctimas "sentimientos de angustia, inferioridad y humillación".
"De ahí la gravedad de la conducta del recurrente", reiteran los magistrados. La sentencia considera probado que Camilo de Ory, tanto durante la operación de rescate de Julen como finalizada la misma, "y siendo conocedor del fatídico desenlace y de la dramática situación vivida por los progenitores del menor", publicó tuits empleando el nombre del pequeño "con trato burlesco, ofensivo y degradante".
De esa forma, sostiene la juez, "incrementó injustamente el dolor padecido" por los padres mediante la divulgación, los días 20, 22, 23, 24 y 26 de enero de 2019, de comentarios como "si es molesto aguantar las obras del vecino, imaginad lo agobiado que tiene que estar Julen con las perforaciones", "Julen, el espermatozoide de Dios", "cómo has podido caer tan bajo, Julen" o "el pozo lo ha hecho un hombre, no? Pues violencia machista".
Otros de los tuits publicados por Camilo de Ory, según recoge la sentencia, fueron estos: "si Julen comiera en Burger King esto no habría pasado", "embutidos El Pozo patrocina este rescate" o "soluciones habitacionales Julen".
Y el día 26 de enero, cuando los equipos de rescate lograron recuperar el cuerpo sin vida de Julen, escribió: "Hoy se guardará un minuto de silencio por Julen en todos los campos de golf".
Los padres de Julen aseguran que cuando conocieron la existencia de estos comentarios a través de amigos y familiares sintieron "impotencia" e intentaron ponerse en contacto con su autor para que cesara en dicha divulgación, aunque éste "nunca se disculpó" e incluso se llegó a jactar, en una entrevista en televisión, de haber aumentar su número de seguidores en Twitter.
El apelante en su recurso alegó también que había falta de padecimiento físico y psíquico de los padres pero el Tribunal afirma que ese dolor "es evidente" y no creen los magistrados que "exista ser humano que lo ignore, y ese dolor se incrementó de modo deliberado por sus comentarios".
"Conocedor de la dramática situación que estaban viviendo los padres, se dedicó a realizar comentarios burlescos, ofensivos, humillantes y denigrantes sobre la situación del menor", insiste la sentencia.
La abogada Antonia Barba, que ha representado a los padres de Julen en esta causa, ha mostrado este viernes a EFE su satisfacción por la sentencia, "han sido cuatro años luchando por la dignidad de Julen y de sus padres".