Los Satudarah son una organización que agrupa a moteros para camuflar actividades delictivas y que fue creada en Países Bajos en 1990 y prohibida en ese país en 2018, aunque tienen sedes repartidas sobre todo por Europa y con fuerte presencia en España.
El pasado 15 de junio los Grupos Operativos Especiales de Seguridad (GOES) de la Policía Nacional fueron desplegados en Marbella para intervenir en la detención de tres miembros de Satudarah a petición de la Unidad de Droga y Crimen Organizado (UDYCO). La Policía consideró desplegar a los GOES porque los afiliados a estas bandas moteras suelen estar siempre armados. El operativo se realizó en un bloque de apartamentos a un paso del puerto deportivo de Marbella, curiosamente la empresa que gestiona el edificio destaca en su publicidad que el complejo está también destinado al teletrabajo y a los nómadas digitales. Estos narcos se tomaron al pie de la letra el anuncio, y se vinieron a trabajar a Marbella.
Las personas detenidas son danesas, y no son los primeros miembros de Satudarah daneses apresados este año en Málaga. El fugitivo anterior a ellos fue localizado en Mijas el pasado marzo, es una persona que contaba con antecedente por delitos violentos en Dinamarca y que estaba siendo buscado para cumplir una sentencia del Tribunal Superior de Viborg. En 2019 fue condenado a 6 años por apuñalar a una persona en una discoteca en Herning, a esa pena de prisión se le añadió la prohibición de residir en ese municipio pasado 6 años de cumplir su pena. Nada es casualidad en el crimen organizado y que se escondan en la Costa del Sol tiene una explicación.
Las autoridades de Suecia, Noruega, y Dinamarca están de acuerdo en combatir a este tipo de organizaciones criminales. Noruega está en proceso de ilegalizarlos y Dinamarca está estudiando jurídicamente cómo hacerlo para considerarlos como lo que son, una organización criminal. Incluso el Ministro de Justicia danés Peter Hummelgaard se ha pronunciado sobre los Satudarah considerándolos una amenaza para Dinamarca. En los países escandinavos y en Holanda esta banda se ha mostrado especialmente violenta protagonizando continuos tiroteos e incluso decenas de atentados con explosivos. Un buen ejemplo de extrema violencia ocurrió en 2018 en Copenhaghe cuando miembros de Satudarah asesinaron a tiros a Nedim Yasar tras presentar su libro autobiográfico. Era un locutor de radio que había tenido un pasado en pandillas organizadas y que pretendía que los jóvenes no se iniciaran en delitos violentos.
Evitar su desaparición
Los Satudarah en Dinamarca se han adelantado a su posible disolución, y ahora sus chalecos indican el nombre de “Comanches”. Han modificado su identidad, según su versión oficial, porque han tenido discrepancias con otras sedes internacionales de los Satudarah. Intentan con ello evitar responsabilidades civiles y penales que les pueda provocar en el futuro su prohibición de facto en Dinamarca. Algunos ayuntamientos daneses tomaron cartas en el asunto y los locales alquilados donde se reúnen los Satudarah han sido precintados, como el caso de Esbjerg. Con la ayuda de la Policía y una Ley de 2017 consiguieron expulsar de su localidad a los Satudarah el pasado marzo.
Estos cambios también han afectado a las sedes de Satudarah en Marbella, Serbia, Austria, y Montenegro en las que sus miembros ya circulan por las carreteras con los parches de “Comanches”. La explicación de porqué hay de repente tanta actividad de Satudarah daneses en la Costa del Sol es porque su líder aquí es danés, se llama Phillip Nielsen y es un exmiembro de los Hell Angels. Decidió integrarse en Satudarah tras ser expulsado de los Ángeles del Infierno porque cayó en desgracia en esa organización en 2012.
El 21 de septiembre de 2012 miembros de Hell Angels le citaron en un bosque en Amager (Dinamarca). Aquello no fue una cita de Tinder, fue para comunicarle que por infringir las reglas internas de los Hell Angels estaba fuera de la organización. Le apuñalaron, le rompieron la mandíbula y le partieron una pierna para después dejarle tirado en medio de una carretera. Aquello dice Ekstra Bladet que ocurrió porque los Hell Angels lo acusaban de haberles defraudado económicamente, una línea roja para cualquier organización criminal.
En la Costa del Sol lo habitual era la presencia de miembros holandeses de Satudarah ya que es el país que más miembros aglutina, y que tienen intereses estratégicos para controlar rutas de drogas desde aquí. Las anteriores detenciones de fugitivos de Satudarah en esta zona estaban copadas de neerlandeses. Pero ahora no es descartable que sigan llegando miembros daneses de Satudarah para escapar de la responsabilidad penal que les persiguen en su país natal y porque en ese país esta organización es mucho más poderosa que Hell Angels y Bandidos.
En Suecia
En Suecia se instalaron los Satudarah en 2013, y necesitaron a un clan de narcotráfico llamado los Zein para controlar en primera instancia Malmo. Luego llegaron las sedes en Kalmar, Växjö, Halmstad y Estocolmo. Una gran parte de la violencia del crimen organizado sueco en estos años proviene de las disputas de Satudarah contra otras pandillas de los suburbios y bandas moteras que operan en ese país. En Suecia cometen delitos narcotráfico, extorsión y asesinatos, por lo que su influencia en el hampa es bastante importante.
El presidente del Club de Malmo fue condenado en 2014 por narcotráfico por participar en un alijo de 37 kilogramos de cocaína y desde esas fechas decenas de miembros han ido llegando a las cárceles suecas por diversos motivos. En cuanto a los conflictos abiertos con otras mafias recientemente han sufrido ataques con explosivos en bloques de viviendas donde residen miembros de Satudarah, y es una constante en Suecia este tipo de ataques. E incluso en 2022 un sicario de 15 años asesinó a tiros a un miembro en Malmo en mitad de un centro comercial.
La presencia de estos grupos solo se detendrá si se ataja de raíz y realmente se les trata como están haciendo otros países vecinos. Mientras tanto en lugares como Ampuriabrava (Girona) cortan el tráfico en alguna fecha del verano para que miembros de Bandidos llegados desde todo el mundo se reúnan sin mayor problema.