Casi un mes después de lanzar el anuncio, en la previa de las elecciones europeas, el Gobierno central pone fecha para sentarse a la mesa para hablar del tren de la Costa del Sol. Tal y como han confirmado varias fuentes, la decisión del Ministerio de Transportes es la de mantener ese encuentro el próximo 17 de julio.
A la espera de que se concrete el orden del día, la previsión es que formen parte de ese cónclave representantes de la Consejería de Fomento de la Junta de Andalucía, de los ayuntamientos de Málaga y Marbella y de la Diputación provincial. Desde la Administración regional han informado que se va a proponer que en la reunión estén presentes "todos los alcaldes de los municipios afectados por los problemas de movilidad, desde Nerja hasta Algeciras".
Según se apuntó hace un mes, el objetivo es explorar la viabilidad social, económica y ambiental del tren a Marbella y Estepona. Hay que recordar que la posibilidad de activar mecanismos de diálogo en relación con el tren litoral ya fue puesta sobre la mesa a principios del pasado mes de febrero por el alcalde, Francisco de la Torre, con el apoyo del presidente de la Diputación, Francisco Salado, y el viceconsejero de Fomento de la Junta de Andalucía, Mario Muñoz.
Todos ellos coincidieron en plantear esta vía de acercamiento en un desayuno informativo organizado por el club Diálogos para la democracia y en el que estaba presente el secretario de Estado de Transporte y Movilidad Sostenible, José Antonio Santano Clavero. Ha habido que esperar cuatro meses para obtener una respuesta, que, no obstante, ha de formalizarse con la concreción de la fecha exacta en la que debe tener lugar esta mesa.
De acuerdo con la información conocida, a ojos del ministerio, el estudio firmado por la consultora ARCS y financiado por Unicaja Banco, que le fue enviado meses atrás por el Ayuntamiento de Málaga, es “insuficiente” para determinar el impacto cierto de la operación.
El subdelegado del Gobierno, Javier Salas, explicó que el Gobierno cumplió el compromiso de analizar el documento técnico que fue remitido por el Ayuntamiento. "Después de debatirlo con los técnicos, se ha visto que es una propuesta interesante pero insuficiente", remarcó.
La finalidad de este encuentro es analizar la cuestión de manera "seria y rigurosa", insistiendo en que esta infraestructura debe responder a una demanda social; debe tener en cuenta el impacto medioambiental de su ejecución, al afectar a un territorio altamente condensado y construido, y la dimensión económica.