Los mosquitos portadores del virus del Nilo han aterrizado en Málaga. Estos insectos ya han sido localizados en algunas muestras, según ha informado la Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía. En concreto, se han localizado en el entorno del río Guadalhorce, en el distrito Campanillas, pero no hay ningún afectada por esta enfermedad en la Costa del Sol.
Ante esta situación, el Ayuntamiento de Málaga también se ha movilizado y activó ayer una nueva fase del plan municipal de vigilancia y control integral de vectores transmisores de Fiebre del Nilo Occidental. Tras conocer que se han localizado mosquitos con este virus en uno de los controles de las poblaciones, han cambiado el nivel de riesgo de Málaga del NR-1 al NR-4.
Este protocolo supone un aumento de la inspección de las aguas estancadas tomando un mayor numero de muestras de ejemplares adultos, aplicar más larvicidas de tipo biológico y el establecimiento de más trampas en las zonas donde se confirme esta presencia.
Por el momento, en las muestras tomadas por el Consistorio no se ha detectado la presencia del virus del Nilo Occidental. Además, Málaga no está considerada zona de riesgo, según los informes de la Consejería de Salud de la Junta, pero como más vale prevenir que curar, se han lanzado una serie de recomendaciones para evitar que estos mosquitos proliferen en la provincia.
Prevención
Para no sufrir una picadura de estos mosquitos es importante utilizar mosquiteras en ventanas y puertas, al mismo tiempo que se vigilan las zonas donde hay depósitos de agua potable o de aguas residuales. Asimismo, se debe utilizar ropa que cubra la piel como, por ejemplo, manga larga, pantalones largos y calcetines una vez que se ponga el sol.
En el caso de querer dejar la ventana abierta, se debe de apagar la luz para que los mosquitos no entren y, en la calle, mantenerse alejados de espacios donde haya agua estancada sin tratar.
Si se quiere usar repelentes contra mosquitos, se recomienda que sea solo en zonas donde abunden. Si se decantan por los aerosoles o insecticidas se deben airear bien las habitaciones y deben estar registrados para uso doméstico.
De esta manera, para evitar que se reproduzcan se debe evitar guardar recipientes como macetas, juguetes o cubos que puedan acumular agua dentro de las casas y vaciarlos una vez a la semana en el caso de que sean imprescindibles.
En cuanto a los estanques, piscinas y fuentes ornamentales se recomienda realizar una cloración del agua o introducir peces que se alimenten de huevos y larvas, y para los ganaderos, recomiendan que eviten el agua de charcos en rodadas de vehículos, caminos o fugas de agua.