El cantante malagueño Julio Benavente sueña en grande, pero tiene los pies en el suelo. Aunque lleva varios años dando conciertos en salas, está especialmente ilusionado por el que va a dar el próximo 7 de abril en La Cochera Cabaret, simplemente porque va a estar "cerquita" de su gente.
"Ahora vengo con todo. Más maduro, más ilusionado, con un proyecto que está muy cuidado", dice el artista, que también reconoce sus nervios a apenas unos días de la cita que tanto tiempo lleva esperando. "Quiero demostrar mucho en el escenario", afirma.
Esos nervios son los mismos que siente cuando baja de Madrid a Málaga en coche. "Cuando nos vamos acercando con el coche y ya veo el mar... Es que me entran nervios, de verdad", dice con una sonrisa. Estar lejos de los suyos es lo que peor lleva de ser músico, pero reconoce que Madrid le ha permitido conocer a "muchas personas interesantes" de cara al ámbito laboral. "Está siendo una etapa de descubrimiento, de hacer mucha música y conocer gente. Aunque no descarto volver algún día, reconozco que está siendo muy bonito", explica.
Sobre en qué punto se encuentra como artista, reconoce que "probando todo". En estos momentos está trabajando en jugar con estilos para "encontrarme". "Creo que ahora mismo estoy sacando las mejores canciones que he hecho en años, estoy sacando música nueva y diferente a lo que siempre hice. Sigo manteniendo mis raíces, pero ahora con ritmos más urbanos; estoy ilusionado con lo que viene", manifiesta.
Gran parte de su público lo conoció en su paso por el talent show La Voz, donde le vimos hacer covers de artistas como Pablo Alborán. Se vio una versión muy melódica de Benavente. "Pero es verdad que he descubierto mi gusto de verdad, no me encierro en un género musical, porque no sé lo que hago realmente. Yo hago música, lo que me sale y ya está. Quizá mi mayor referente ahora mismo es Rosalía", cuenta.
En cuanto a la televisión, cree que programas como La Voz "no abren puertas, abren ventanas". "La Voz te da a conocer, pero no te da la opción de vivir de la música. La música es un camino muy largo, es un camino muy duro, de mucho trabajo y madurez. Hay que madurar en la música para dedicarte a ella, yo me he dado cuenta de eso", dice. Así, insiste en que La Voz le ayudó mucho, pero más bien a entender cómo funciona la música y el mundo que le rodea. "Fue una experiencia muy bonita y no me arrepiento para nada de haber ido", sostiene.
Sobre 2024, espera que ocurran "muchas cosas bonitas". Hace unos días tocó en Madrid, el domingo lo hará en Málaga y, aunque tiene un proyecto de álbum en mente, primero irá sacando algunos temas nuevos. Si bien acaba de lanzar Ojú qué tontería, pronto verá la luz otra canción que dedica a sus padres, Cuando sale de clase. "Creo que saldrá en abril, y la verdad es que es un tema que me hace mucha ilusión, porque siempre, desde chico, tenía ese reto de escribir sobre la historia que tuvieron mis padres y estoy muy contento por sacarlo, creo que saldrá en abril", explica.
Sus padres siempre le han apoyado en todas las decisiones que ha ido tomando. Benavente ha tenido claro desde muy joven que su futuro estaba en la música, es por ello por lo que dejó la carrera de Filología Hispánica para optar por centrarse solo en su camino artístico. "Lo intenté también en Marketing, pero yo sabía que esto era lo mío. Si estoy donde estoy es gracias a mi entorno; es uno de los factores que más me ha ayudado", expresa.
Siempre soñador, se imagina llenando algún día un estadio. "Es muy difícil, pero no imposible", se dice a él mismo. Pese a todo, se queda con los pasos que está dando con un equipo del que, asegura, se siente "muy afortunado". "Yo quiero ser un artista al que la gente conozca por sus canciones, que sepan que las escribo y que todas parten de vivencias. Yo canto con la verdad siempre. Es un proceso lento y difícil, pero no imposible", zanja.
DOMINGO 7 DE ABRIL
Juio estará el próximo domingo en la sala La Cochera Cabaret. Las entradas tienen un precio de 10 euros y se consiguen aquí.