En palabras de uno de los líderes del movimiento carnavalero malagueño, Carlos Pariente, no esperaban una respuesta tan positiva al manifiesto presentado el pasado martes. "La gente tiene muchas ganas de trabajar e implicarse porque se ha dado cuenta de que hace falta un cambio", alegaba Pariente en una entrevista reciente en EL ESPAÑOL de Málaga. Así, en pocas horas el escrito duplicó un apoyo que sigue creciendo.
En una fecha en la que habitualmente el Carnaval de Málaga dejaba de sonar y los carnavaleros vivían los coletazos de la fiesta actuando en la provincia, el ambiente de este año es más positivo que nunca. Como destacaban en uno de los puntos publicados: "no estamos en contra de ninguna persona, solo nos mostramos disconformes con el sistema de gestión interna y estatutaria que tiene desde hace años el Carnaval de Málaga".
Luis Almagro
El autor del cartel del Carnaval de Málaga 2022, conocido como Luisito Rilke, es una de las personas que entiende en positivo el movimiento por el cambio que comenzó con el manifiesto del pasado martes. "No soy el más indicado, porque no participo ni estoy adscrito a ninguno de los movimientos de los últimos años. Soy un carnavalero relativamente nuevo en Málaga, porque he estado quince años viviendo y saliendo en Ronda. En 2008 sí salí aquí".
Desde 2014 vive el Carnaval de Málaga con la Murga de Torrole y con otras vinculaciones: "Creo que el trabajo que ha hecho el equipo de Rafael Acejo es en general bastante positivo, se ha hecho muy buen trabajo, con acierto y con errores. Hay hitos importantes como la Casa del Carnaval, pero estoy muy de acuerdo con el manifiesto, porque no entiendo que en el siglo XXI no haya democracia plena en la Fiesta de la Libertad".
"No sé qué va a pasar, pero considero y espero que la cosa vaya por buenos cauces. La fundación parece dispuesta a escuchar". También apunta: "Tengo una visión muy optimista; me he empapado de todo lo bueno que ha hecho la fundación con Acejo. Esto no es un quítate tú para ponerme yo, sino estar todos", concluye Almagro.
Manu Robles
El director de la murga los Muariscos, que este año fue primer premio con De bar en peor, considera que "por primera vez se observa que la mayoría de los que hacemos de alguna forma u otra esta fiesta estamos unidos y compartimos la idea de que se nos debe tener en cuenta a la hora de tomar decisiones importantes. Esa unión ya es de por sí un dato que invita al optimismo".
Así, no cree que "la idea sea destruir, más bien construir, pero desde un organismo transparente y democrático donde tenga peso la voz de los activos sin los cuales la fiesta no se podría llevar a cabo. Es una oportunidad de hacer las cosas de otra manera, centrándonos en el futuro y que ojalá sea con el entendimiento de todas las partes implicadas, pues la determinación de que debe haber cambios en positivo es firme".
Rubén Gallego
Gallego es uno de los ejecutantes de comparsa con más años de carnaval a sus espaldas. Así, indica que para los que llevan "muchos años ansiando un cambio de rumbo en el Carnaval de Málaga es una alegría enorme" ver este movimiento. "El carnaval se está muriendo y no podíamos quedarnos de brazos cruzados ante eso. El carnaval es mi vida", sentencia.
"Después de casi cuarenta años me partía el alma ver el rumbo que en estos momentos estaba teniendo la fiesta. Por eso no puedo más que estar al lado de mis compañeros en un manifiesto que considero justo y necesario".
Juanlu Leal
Al director de la comparsa Los Patronos le "aterra pensar que un día me levanto y no hay protagonistas de nuestra fiesta, y por ende, no se celebre carnaval. Como cualquier institución, se llame la que se llame, el relevo generacional es lo más importante y para que eso ocurra, confío en el planteamiento de que esta sabia nueva entra con actitudes renovadoras".
En ese sentido, dirige su reflexión hacia la cantera: "Si el carnaval en las escuelas no es suficiente, ¿Porqué no hacemos nosotros una escuela de carnaval? Talleres para todas las edades y con intención de general conocimiento y engrandecer nuestro carnaval".
Y concluye con un mensaje positivo y de concordia:"Como dijo Henry Adams: "El maestro deja una huella para la eternidad." Ojalá haya un entendimiento por todas las partes y consigamos unir lazos para hacer eterno nuestro carnaval".
Dede Cortés
El autor de la comparsa de Alhaurín el Grande se manifiesta en los siguientes términos: "Yo siempre he dicho que nos faltaba amor propio y trabajar en común fuera de los meses de preparación para el concurso. Muchos años en los que se habla sólo cuando llega el carnaval, pero después el colectivo desconecta. Este movimiento no lo veo como una guerra sino como una oportunidad histórica de que de verdad sumemos entre todos por un futuro que si no hacemos nada, se ve oscuro"
Juan Carlos Navarrete
Carlos Pasky es uno de los aficionados más habituales del Carnaval de Málaga que afirma "haber vivido siempre la fiesta desde fuera". Cree que se puede mejorar la organización con los grupos de canto, la organización de la calle y los grupos de animación. "Saber que una entidad privada es quien organiza el carnaval" no le gusta, sino que cree que "debería estar en manos del Ayuntamiento". Así, afirma que hay "un rayito de esperanza para que la fiesta se abra y sea más claro".
Toni Vertedor
Vertedor ha sido vicepresidente de la Fundación Ciudadana del Carnaval de Málaga hasta marzo de 2020. Según sus palabras, "este movimiento se lleva rumiando desde 2015, que yo recuerde. Me sorprende la unión, todos hemos sabido sacrificar intereses personales por el bien común. No me cabe duda que entre todos juntos sepamos afrontar los retos del presente y del futuro del carnaval junto a los miembros del actual patronato de la fundación donde hay gente muy válida y trabajadora. Es bonito hablar estos días con gente muy diferente del carnaval y apreciar esperanza en sus palabras".
Miguel Gutiérrez
El pregonero del Carnaval de Málaga 2022 entiende que "el manifiesto radiografía con tino la situación que atraviesa" la fiesta. Así, señala que es eso por lo que ha firmado "el manifiesto y mi comparsa se ha posicionado públicamente a favor; si bien es cierto que en el seno del grupo no ha existido unanimidad, el apoyo sí ha sido más que mayoritario, suficiente como para expresar una adhesión en total".
En conclusión, Gutiérrez espera y desea "por el bien de nuestra fiesta, que las aguas se reconduzcan y que todo este proceso culmine en puerto bueno, que la fundación se abra a las peticiones del manifiesto -porque son positivas y difícilmente podrían no entenderse como tal- y que el porvenir del Carnaval siembre en terreno fructífero, aportando cada cual desde la trinchera en que se sienta más válido. Lo que viene sucediendo ha de abrazarse como un soplo de esperanza".