La Delegación Territorial de Educación de la Junta de Andalucía ha dado cuenta a las familias afectadas por el cierre del CEIP Domingo Lozano de Málaga de las medidas adoptadas para la redistribución de los 265 alumnos matriculados, que se hará en dos centros; y se compromete a estudiar, de cara al próximo curso, las distintas alternativas planteadas por los representantes de padres y madres.
Representantes de la Junta de Andalucía y del Ayuntamiento de Málaga han mantenido este viernes con afectados por el cierre del CEIP una reunión en la que se les ha trasladado información detallada de la situación y las medidas adoptadas. A su vez, las familias han expuesto a la Delegación Territorial y al Ayuntamiento su postura al respecto, han informado desde el Gobierno andaluz en un comunicado.
Al encuentro han asistido el delegado territorial de Educación, Miguel Briones, y responsables del servicio de Planificación y de la asesoría jurídica; así como las concejalas de Urbanismo, Carmen Casero, y del Distrito Cruz de Humilladero, Teresa Porras; técnicos de Urbanismo del Ayuntamiento; la directora del CEIP, Sylvia Frey; representantes vecinales y de los padres del centro.
Así, en cuanto la redistribución de los 265 alumnos, desde la delegación han indicado que este número "obliga a la distribución en dos centros, en tanto que resulta materialmente imposible la ubicación inmediata en un único edificio".
Al respecto, han indicado que tras contemplar distintas opciones, los colegios designados son el CEIP Luis Braille y el CEIP Ciudad de Popayán. El CEIP Antonio Machado, considerado inicialmente, se descartó por la excesiva sobrecarga que suponía y por ocupar sus dependencias el Conservatorio Elemental de Música durante las tardes.
Asimismo, según han precisado, el Servicio de Planificación gestiona desde el conocimiento de la medida la reubicación del alumnado con las direcciones de los centros de destino.
Esta acción incluye la disposición de los espacios materiales, a los que se realizará la mudanza la próxima semana, así como el incremento del personal de apoyo (personal docente y especialistas para la atención del alumnado con necesidades especiales de apoyo educativo) y de servicios complementarios (aula matinal, comedor escolar y actividades extraescolares).
Han apuntado que la reunificación de hermanos "se abordará de acuerdo con las disponibilidades de los centros de destino, todo ello sin menoscabo de que cada familia pueda optar de forma inmediata a solicitar otros centros de la zona".
Asimismo, han incidido en que la Delegación Territorial se compromete a estudiar, de cara al próximo curso, las distintas alternativas planteadas por los representantes de padres y madres del CEIP, que consisten en la instalación de aulas prefabricadas en el CEIP Luis Braille o en la utilización del edificio del antiguo CEIP Rafael Dávila.
De la misma forma, han significado que "se mantendrá como hasta ahora la información puntual y directa a las familias ante las distintas novedades y actuaciones que se realicen".
Además, en dicha reunión, los responsables de la gestión y mantenimiento del centro han indicado que las familias han recibido por parte de los técnicos de Urbanismo "una explicación detallada de la situación del edificio, compartiendo los datos de los últimos informes realizados y que aconsejaron su cierre".
Desde el Gobierno andaluz han indicado que en las distintas reuniones previas a este mes de diciembre con la comunidad educativa del CEIP "ya se fue trasladando toda la información técnica derivada de los estudios realizados, quedando a expensas de los informes geológicos y patológicos encargados por la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento, prevista como fecha límite para abril de 2024".
Al respecto, han apuntado que "la aceleración de estos trabajos técnicos y sus resultados han permitido la adopción de la medida propuesta de forma inmediata".
CCOO
Por otro lado, el Sindicato de Enseñanza de CCOO de Málaga ha informado sobre su apoyo a la movilización de las familias del colegio público Domingo Lozano ante la reubicación de su alumnado, un total de 262 menores "que no saben dónde van a empezar el segundo trimestre". Así, se ha realizado una manifestación desde la puerta del colegio hasta la Delegación de Desarrollo Educativo y Formación Profesional.
Desde CCOO de Málaga han criticado que el colegio "ya venía arrastrando importantes deficiencias en su estructura" y han lamentado que "se ha ido abandonando deliberadamente, lo cual obligó a cerrar espacios como la biblioteca y algunas aulas", apuntando que "tras una valoración del estado del edificio, se concluyó que el edificio y el terreno presentan una cimentación deficiente".
Ante la situación, el sindicato ha mostrado su apoyo a las familias del centro y a la comunidad educativa y han exigido que "se preste la ayuda necesaria para el traslado de todo lo necesario, y no pase como en el pasado mes de septiembre, que fue el profesorado y personal del centro los que tuvieron que mover el mobiliario ante el cierre de la biblioteca y cinco aulas".