Había quien esperaba algo así parecido al Domingo de Resurrección con una victoria que diera aire, pero lo que ocurrió fue tan dramático como desolador. El Málaga CF anticipó este 1 de abril su particular Viernes de Dolores tras la derrota ante el Girona (1-0). Otro tropiezo más que vuelve a dejar condenado al equipo en la clasificación y que deja con numerosas dudas que Natxo González vaya a sentarse el próximo sábado en La Rosaleda. Qué viernes otra vez. Como si nada hubiese pasado estos días.
Ni charla con la afición ni trabajo mental alguno. Jugaron bien y un despiste estrepitoso en defensa hizo que cualquier estabilidad saltara por los aires. Esta noche no fue Stuani, quien acabó sustituido. El particular héroe local fue Bustos con un control en el área con el que regateó, pensó y disparó. Y no pensó en milisegundos, tuvo tiempo suficiente como para ver que la defensa no reaccionaba y él tirar hacia el palo que tenía libre. Cualquier fallo garrafal castiga en LaLiga SmartBank y de qué manera.
No obstante, Natxo González volvió a remover el árbol en busca de resultados. La novedad más importante fue la portería. Tras el fallo de Dani Barrio contra el Huesca, el vitoriano decidió alinear a Dani Martín, inédito con el entrenador. Además, Javi Jiménez volvió a ocupar ese carril izquierdo en defensa, mientras que insistió de nuevo con Paulino en la banda derecha. Sin embargo, la revolución total llegó en ataque: Brandon a la banda izquierda y Antoñín como principal referencia en ataque.
El peligro no fue el gran protagonista en el inicio. Sí que controló el Girona el ritmo del partido siendo el dueño del balón, pero no causó ningún sobresalto durante los 10 primeros minutos. Es más, quien tuvo las tres ocasiones más peligrosas fue el Málaga CF: un cabezazo de Paulino rozando el palo, un disparo de Brandon que detuvo Juan Carlos y otro de Febas. Al menos intención no faltó. Más allá de esos minutos llenos de vértigo, el ritmo cayó de una forma bastante notoria.
Una vez superados esos instantes, el encuentro pasó a disputarse en el centro del campo con numerosas interrupciones. Aunque los locales empezaron a llegar cada vez más. Primero fue Stuani con un intento de remate acrobático con el que no llegó a conectar y después fue Iván Martín con un disparo a las manos del portero blanquiazul, un susto desde lejos que no inquietó a Dani Martín y poco más. Parecían conformarse con ese resultado al descanso y bajaron las revoluciones de marcha.
Como a nadie le servía este punto, todo se aceleró. El Girona quiso tener más jugadores en ataque y dio entrada a Pablo Moreno para volcar más el juego sobre el área malaguista. Brandon, con varios disparos peligrosos, y Stuani fueron los futbolistas con más peligro en sus pies. El Málaga CF siguió muy vivo y atacando sin casi piedad. No obstante, el verdadero problema llegó en los contraataques. El equipo empezó a partirse dos y replegar fue un duro ejercicio. Y pasó al revés. Cuando los visitantes recuperaban el balón en la zona alta, creaban peligro constante pillando en la salida a los de rojiblanco.
Hecatombe
Las cosas iban bien, pero seguían sin ser suficiente. Buena presión, buena actitud en defensa y pocas decisiones en ataque con acierto. Natxo González decidió mover el banquillo para que entraran Genaro y Kevin por Antoñín y Aleix Febas. Realmente no solucionaron los problemas. El centrocampista sí que dio más consistencia a ese mediocentro defensivo, lo que permitió que Jozabed diera un paso adelante, y a él se sumó Adrián López. Sin embargo, el castigo volvió a llegar atrás. Bustos recogió el balón, regateó, pensó y marcó. Una secuencia definitiva en la que dispuso de segundos para rematar ante una defensa impasible. Todo lo que había subido, bajó. Sin anestesia.
Es más, tras recibir el gol en contras pocos avisos hubo de la delantera malaguista sobre Juan Carlos. Fue al revés. Los de Míchel siguieron insistiendo ante unos jugadores que prácticamente dejaron de correr. El Girona jugó con los minutos finales a su ritmo, a su antojo e incluso con gusto. No hubo resurrección ni hubo nada porque volvió a jugar bien en la mayoría del partido y perdió. Bastará ver lo que ocurre en las próximas horas con el inquilino del banquillo blanquiazul y a ese partido Real Sociedad B-Alcorcón. Qué viernes tan de dolores.
FICHA TÉCNICA
GIRONA FC: Juan Carlos; Arnau Martínez, Bernardo, Juanpe, David Juncà (Valery Fernández, 79'); Pol Lozano, Víctor Sánchez (Pablo Moreno, 46'), Jairo Izquierdo; Alejandro Baena (Ricard Artero, 72'), Stuani (Nahuel Bustos, 79') y Samuel Saiz (Iván Martín, 36').
MÁLAGA CF: Dani Martín; Víctor Gómez, Peybernes, Lombán, Javi Jiménez; Escassi (Vadillo, 89'), Jozabed; Paulino (Adrián López, 80'), Aleix Febas (Kevin, 70'), Brandon (Roberto, 89') y Antoñín (Genaro, 70').
GOLES: Bustos (82').
ÁRBITROS: Caparrós Hernández. Pulido Santana (VAR). Amonestó con tarjeta amarilla a Bernardo (15'), Jozabed (19'), Víctor Sánchez (23'), Lombán (41'), Genaro (78'), Pablo Moreno (84'), Víctor Gómez (86').
INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la 34ª jornada de LaLiga SmartBank en el Estadio Municipal de Montilivi.