Pablo Guede ya tiene todas las piezas que quería para jugar con la defensa de tres que tiene en la cabeza. La última, la del central Jonás Ramalho, cuyo fichaje ha hecho oficial el Málaga CF después de haber anunciado también los de Esteban Burgos y Rubén Yáñez. El día no ha tenido tregua en las oficinas de La Rosaleda.
Jonás Ramalho, natural de Barakaldo y criado en la cantera del Athletic Club, llega procedente del CA Osasuna, club del que se ha desvinculado al no entrar en los planes de Jagoba Arrasate.
El grueso de su carrera lo ha desarrollado Ramalho en el Girona, donde salió cedido después de debutar en el primer equipo del Athletic. En Montilivi estuvo dos campañas en préstamos, siendo un pilar en la zaga catalana antes del volver a Lezama para jugar en Segunda División con el Bilbao Athletic.
Al finalizar esa etapa firmó ya en propiedad por el Girona, donde militó durante seis temporadas, tanto en Primera División como en Segunda. Ramalho fue uno de los fijos en las alineaciones gerundenses.
A mitad de la 2020-21, Osasuna requirió de sus servicios y lo compró en propiedad, pero no ha terminado de consolidarse en el equipo pamplonés, donde apenas ha disfrutado de minutos, lo que le ha llevado a buscar una salida en busca de más oportunidades cuando roza la treintena, que es una de las caracterísitas de todos los fichajes del Málaga CF en este mercado veraniego, en el que está siendo el claro protagonista de Segunda División.
Además, Ramalho es internacional con Angola, de donde procede su familia.
Con Ramalho, son tres ya los centrales que se han incorporado a la disciplina del Málaga este verano, junto con Unai Bustinza y Esteban Burgos. En Ramalho ha pesado también la polivalencia que le pide Pablo Guede a sus jugadores, ya que se puede desenvolver en el lateral derecho.