Un cabizbajo Pepe Mel comparecía tras la nueva derrota contra el Eibar en La Rosaleda dudando incluso de la forma de jugar de su Málaga, que aunque a su juicio no está siendo inferior a los rivales contra los que está cayendo, igual no le da para sumar de tres en tres y que ahora mismo, tras nada menos que trece jornadas de campeonato, tiene al Málaga CF colista de Segunda División.
"Se me acaba el discurso". Así arrancaba Pepe Mel la rueda de prensa en el estadio de La Rosaleda tras la octava derrota del conjunto blanquiazul, otra más delante de su afición. "La gente no te cree".
Lamentaba el entrenador del Málaga las semejanzas con los partidos de Leganés u Oviedo, donde el equipo también cayó por la mínima. "Este Málaga no merecer perder. Tenemos errores puntuales que se nos hacen enormemente grande. El rival sabe que pasar el tiempo juega en contra nuestra por esa ansiedad. El primer error nos penaliza con gol". Un análisis que suena a lo mismo que el de los últimos partidos. Y por ello, Mel ha abierto la puerta a jugar de otra forma para buscar resultados.
"Desde que estoy aquí el rival no hace nada más que nosotros y gana". "A lo mejor tenemos que jugar a otra cosa. Con esto que hacemos no nos da. Hay que buscar otra alternativa", decía Mel ante una semana en la que tiene dos partidos por delante, Cartagena y Sporting de Gijón.
"Es la primera vez que me pasa esto. Que los jugadores ejecuten la idea pero que en el examen siempre suspendas…se te acaba el discurso. Por eso hay que buscar soluciones y proponer otra forma de hacer las cosas. Con esto no nos da. Es mi trabajo que eso no pase, y buscar soluciones, pero no queda otra que hay que seguir insistiendo y trabajando. Cada gol es un proceso mental de difícil curar", insistía Mel, para quien cada error es como "una lápida que no te puedes quitar de encima".
Ante esta situación, el preparador malaguista reconoce que se encuentra "jodido", porque "trabajamos muchísimo y no salen las cosas".
Una de las principales preocupaciones del técnico del Málaga es "la cabeza". "No te puedes imaginar lo que es el vestuario ahora mismo. Pensaba que esta semana mañana (por este lunes) era bueno darles libres y descansar, pero no sé si eso será contraproducente. Si es mejor tenerlos conmigo", reflexionaba un Pepe Mel tocado.