Tras el parón de Navidad, vuelve el fútbol. Y los mantecados se le han atragantado al Málaga CF desde que volvió a la elite tras su desaparición. Los números del equipo de Martiricos después de las minivacaciones de final de año no son para tirar cohetes, más bien negativos, por lo que el partido del próximo sábado 7 de enero contra el Tenerife habrá que tomarlo con todas las precauciones a pesar de todas las necesidades que tiene el Málaga de sumar de tres en tres.
El Málaga CF volvió al fútbol profesional en la temporada 1998-99 tras su ascenso desde Segunda B a Segunda. Desde entonces, ha disputado 23 partidos tras el parón que se lleva a cabo en la Liga por Navidad. Solo en el año 2016 la patronal decidió imitar lo que se hace en la Premier League inglesa y el fútbol no paró. Y los números de esos 23 partidos no son los mejores para el Málaga.
El conjunto blanquiazul ha sumado seis victorias, siete empates y diez derrotas desde el partido que jugara el 3 de enero de 1999 contra el Albacete en el Carlos Belmonte y empatara a dos con goles de Catanha y Movilla.
De esos 23 partidos, once se han disputado en el estadio de La Rosaleda, donde ha ganado cuatro, ha empatado dos y ha perdido cinco. Un balance muy malo, siendo el estadio blanquiazul hasta la pasada temporada un elemento clave para el Málaga CF, el hecho de lugar de local.
De las cinco derrotas sufridas en La Rosaleda, la más dura quizás fue la de la temporada 2018-19, contra el Reus por 0-3. El Málaga era el más claro aspirante al ascenso y el Reus fue excluido de la competición poco después. De hecho, el partido estuvo en el aire hasta el final ya que el Reus no tenía fichas suficientes para afrontar un partido oficial, ahogado por el límite salarial. Fue el 6 de enero y ahí, quizás, empezó a frustrarse el retorno del Málaga CF a Primera División.
Entre las victorias destaca una contra el Almería, en Segunda División, en enero de 2007. Fue el día de irrupción de Popo, que a falta de pocos minutos dejó atrás a medio equipo almeriense para meter el 2-1. Ahí se quedó el canterano malaguista.
Otro partido de los destacados tras el parón de Navidad fue el debut de Diego Pablo Simeone como entrenador del Atlético de Madrid frente al Málaga que acabó clasificándose para la Champions League. El argentino plantó un cerrojazo en La Rosaleda que le valió un 0-0 desde el que no paró de crecer.
Respecto a los partidos que ha jugado el Málaga tras descansar en Navidad en Segunda División, han sido un total de siete, con tres victorias, tres empates y una derrota, precisamente la del Reus. De las victorias, la última fue la de la temporada pasada en Alcorcón, el 3 de enero. Un 0-1 con gol de Paulino.
Contra el Tenerife, el sábado 7 de enero a partir de las 18:30, tiene el equipo de Pepe Mel la oportunidad de mejorar esos números.