A muchos les puede parecer increíble que, por segunda vez consecutiva, cientos de aficionados de un equipo de Segunda División llenen los aledaños de un estadio de fútbol para recibir con cánticos de apoyo a su equipo. Lo increíble pasa a ser una gesta si se tiene en cuenta que ese equipo lleva 37 partidos anclado en puestos de descenso y, a falta de cinco jornadas, todavía lo separan siete puntos de la salvación. Pero si ese equipo es el Málaga CF y esa afición su afición, a día de hoy, nada parece imposible.
Los seguidores blanquiazules se han vuelto a concentrar en La Rosaleda este lunes para llevar en volandas a su equipo a obrar el milagro de la salvación o, al menos, a dar un paso más para sumar los tres puntos contra el Huesca y colocarse a cuatro puntos de la permanencia a falta de cuatro jornadas.
El Málaga CF está en su mejor momento de la temporada, pero no se puede permitir ni un respiro y el partido de este lunes es una nueva final. Los de Martiricos han ganado sus dos últimos partidos contra Leganés y Cartagena y suman tres victorias consecutivas.